Sexto Sentido ~Luke Hemmings~

Capítulo 34

Dio tres pitidos el despertador. Froté mi espalda en el pecho de Luke y me acurruqué en la almohada. No quería ir, estaba muy cómoda así.

-No quiero ir -le dije.

-Está bien -dijo-, no vamos.

Sonreí y seguí durmiendo. A las once, Lisa se subió en mi cama y nos despertó a los dos, con muy buen humor fuimos a la cocina y empezamos a hacer el desayuno. Yo estaba la mar de contenta por haber faltado otro día a clase por cortesía del señor Hemmings.

-Ya verás la bronca que me van a echar -suspiró Luke.

Yo seguí con una sonrisa vertiendo zumo en un vaso.

-Pero ya sé que no es que te importe mucho -rió.

-No creo que te hagan nada, invéntate una buena escusa.

Su móvil empezó a sonar con una canción de Blink-182. Luke miró quién le estaba llamando y respiró profundamente antes de contestar la llamada.

-Hola -dijo-. Ah, ya... Sí, lo sé... Helena se ha despertado con vómitos y no estaba en disposición de ir... Puede que esté embarazada, sí... No, no, todavía es muy pronto como para hacerle pruebas... Que sí, estoy seguro... A lo mejor le sentó mal la cena... Bueno, pues reza para que esté en estado... Está otra vez vomitando, mira te dejo, que no quiero que se desmaye o algo, adiós -y colgó.

No me lo podía creer, le había dado a entender al hombre de que posiblemente estaba embarazada. ¿Por qué no podía haberle dicho que era él el que se encontraba mal en vez de yo?

-Una muy buena escusa desperdiciada, y no puedo decir que se ha muerto un amigo para faltar al trabajo y así poder ir al velatorio porque saben perfectamente quién se muere.

-Pero decirles eso... ¡Yo no estoy embarazada!

-Pues te sentó mal la cena. -Afirmó-. Helena, no eres de comer fuerte por las noches -dijo asintiendo con la cabeza.

Sacó de la tostadora las tostadas y las puso en la encimera. Dejé su café a su lado y mi zumo al mío.

Desayunamos tranquilamente, Lisa se comió su comida tranquila y empezó a jugar con sus juguetes por el comedor.

-Tengo que salir a hacer unos recados -me dijo Luke-, muy importantes -aclaró.

-¿Y de paso puedes sacar a Lisa a dar un paseo? -le pregunté.

-Sí, puedo hacerlo -dijo.

-Me ducho y me voy -me dijo, me besó y se fue al cuarto de baño de mi habitación.

Recogí todo lo que habíamos ensuciado y lo metí en el lavavajillas. Limpié la barra americana y la encimera. Cuando terminé fui a mi habitación y empecé a hacer la cama. Hubiese preferido que Luke se quedara e hiciera la cama o limpiara y sacásemos juntos a Lisa. Pero claro, no podía ser así porque tenía cosas que hacer. Tampoco es que su trabajo fuese muy importante a parte, ya le había dicho a La Cúpula que no iba a ir porque yo me encontraba muy mal y se tenía que quedar conmigo para cuidarme. ¿Qué iban a pensar ellos cuando lo vieran pasar las puertas del edificio para hacer eso tan importante?

Luke salió de la ducha con una toalla enrollada en su cintura.

Puse las almohadas en la cama y me dirigí a Luke.

-¿Qué es eso tan importante?

-Unos documentos que tengo que recoger de casa de Ashton, él los miércoles no da clase.

Si me estaba mintiendo era muy bueno, e incluso creíble, yo lo creí y no le hice más preguntas.

-¿Sabes dónde está mi camiseta de Green Day? -me preguntó buscando en el armario.