Sexto Sentido ~Luke Hemmings~

Capítulo 12

Aparté mis labios de los suyos. Luke me liberó las manos y se puso de pie. Me miró a los ojos.

-¿No íbamos a casa de Liz? -pregunté cambiando de tema, me sentía super incómoda-. Estamos tardando -dije levantándome de la cama.

Salimos al porche y Luke abrió el Golf. Entré en el coche y no hablamos en todo el camino. Luke miraba a la carretera y yo me entretenía viendo a la gente pasear por la acera y las novedades de los escaparates de las tiendas.

Un semáforo nos pilló en rojo y fue ahí cuando Luke decidió abrir la boca.

-¿Qué tal si desayunamos antes? Hay muchas cafeterías por aquí.

-Luke, no llevo el carnet.

-Es verdad, se me había olvidado -dijo.

El semáforo se puso en verde y Luke apretó el acelerador.

En unos 10 minutos o así Luke aparcó el coche en un parking desierto. Nos bajamos del coche, eran las 11 de la mañana.

***

Luke giró una calle y entramos en el edificio donde vivía Liz.

-¿De qué conoces a Liz? -le pregunté.

-Ella fue mi tutora -respondió.

-Nunca me dijo nada -dije mientras entrábamos en el ascensor.

Marqué el botón de la planta número 5 y las puertas del ascensor se cerraron.

-No es que estuviera muy orgullosa de mí -dijo apoyado en una de las paredes del ascensor.

Las puertas se abrieron y pasamos al pasillo. El suelo era de cristal, en él podías ver decenas de plantas violetas bajo él.

Fuimos andando hacia la puerta de Liz y toqué el timbre. Luke pasó sus brazos por detrás mío y pegó mi espalda a su pecho.

Oí la puerta abrirse y me encontré con Liz.

-Hola Helena. -Me saludó con esa voz cálida como si fuera mi madre-. Luke -dijo mirándolo. No se esperaba que él estuviera conmigo.

-¿Podemos pasar? -preguntó Luke y antes de que pudiera responder entró en la casa haciendo que Liz se apartara de la puerta.

-Es insoportable -murmuré para que solo Liz me pudiera escuchar.

-Pasa -me dijo Liz suspirando.

Luke había ido directamente a la cocina y cuando llegamos Liz y yo a ésta no lo encontramos en pleno atraco a la nevera.

-No ha desayunado -le dije a Liz.

-Y tampoco cené anoche -se quejó cerrando la puerta del frigorífico con un yogur en la mano.

-Porque no quisiste -dije rodando los ojos.

-¿Qué hacéis los dos juntos? -preguntó Liz molesta.

-Creo que está claro -habló Luke-. Los dos juntos... Saben que el otro ni cenó anoche ni desayunó esta mañana...

-Cállate. -le ordené a Luke-. Liz, se me olvidaron las llaves en mi casa y no puedo volver. ¿Me puedes dejar la copia, por favor?

-Claro que sí pequeña -dijo pellizcándome la barbilla con cariño.

Liz salió de la cocina y me fijé en como Luke la fulminaba con la mirada.

-Luke, venga, sé educado -le pedí.

-No sabes nada -dijo.

-Si no me lo cuentas, ¿cómo quieres que lo sepa? -le hablaba dulcemente. No quería que armara escándalo con Liz cerca.