Capítulo 34

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♤ No Debiste Asistir ♤

Céline

Me siento en la cama mientras admiro mi anillo es una joya preciosa, Elian entra a la habitación después de hablar con uno de los sirvientes Dylan — creo que te ha gustado el anillo.

— es maravilloso.

— como todo lo que hago — ruedo los ojos y me recuesto en la cama, doy una palmada y Dalí sube, me incorporo cuando siento que pesa mucho.

— joder estas gorda — acaricio su pelaje ya están grandes y todavía les falta crecer más, examino sus colmillos y ¡joder una mordida de estos dos y no dejan nada!

— con que el empresario, mafioso tiene su lado romántico — le digo mientras me acerco.

Rueda los ojos — disfruta de eso que eres la única que lo tendrá — sonrió.

Tocan la puerta cuando estoy apunto de besarlo, suelta un gruñido — puede ser algo importante — excuso a la persona que está de el otro lado.

— nadie puede interrumpir cuando estoy con mi mujer — abro la puerta.

— mi señora, la señora Miranda me dijo que le entregara esto — Dylan esta parado con un perchero personal y una caja roja de terciopelo.

— pasa déjalo por ahí — asiente y baja la mirada cuando esta adentro.

— mi señor — le entrega unos documentos.

— retirate Dylan — este asiente y sale de la habitación.

— ¿Dylan nunca descansa? — Elian niega.

— es uno de los sirvientes de confianza y no lo traje para vacacionar — cierra el tema.

Bajo el cierre de la bolsa negra para ver el vestido, no es un vestido es una falda larga negra con toques verdes que parecen hojas, me encanta, es muy holgada que casi no se nota la abertura que tiene saco el top y deja al descubierto mi espalda solo es una tira la que lo sostiene en la espalda se ajusta muy bien a mis pechos los levanta deja ver mi abdomen, saco el cinturón negro que lleva la falda la hebilla tiene diamantes, saco las sandalias son unas sandalias bajas solo de meter de una marca muy costosa.

Despues de un baño me coloco todo y si que se ve bien peino mi cabello en una coleta alta para que se vea un poco el escote dejo dos mechones afuera en la parte delantera, me maquillo un poco aplicando un labial de un tono rojo oscuro, Elian entra al baño.

Sale con un trajes estilo playero pero en negro trae las mangas arrolladas hasta los codos, dejo los primeros botones abiertos se coloca el cinturón negro que hace juego con el mío, trae el reloj que comparte con sus hermanos su barba está muy bien recortada no se ve desaliñada, el cabello lo ha peinado hacia atrás le da un toque salvaje, me observa y luego ve la mamo donde está mi anillo.

— y tu collar — busco la caja de el collar con la W se lo entrego.

— ¿me ayudas? — asiente.

Me giro y lo beso -— toma las cadenas de los felinos se las coloca esta de cuchillas frente a ellos, aún en esa posición se gira y me da las cadenas las tomo y besa el dorso de mi mano.

— ¿vajamos señor Wolf?.

Asiente y bajamos tomados de las manos Dagón y Dalí van delante de nosotros, la mayoría se aleja cuando ven a los felinos.

— ¡Mami mira unos gatitos! — grita una niña y se suelta de la mano de su mamá, corre hacia ellos.

— сидящий — (sentados), les ordeno a los felinos, la niña se acerca y los acaricia, Dalí es la más gustosa ama que la acaricien, Dagón se queda en su lugar no se mueve — ¿son tuyos? —su voz es tierna, me pongo de cuchillas y asiento.

Melodíosa Tentación (+21)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora