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Mis niños.
Soy fiel creyente de que las personas suelen mentir para proteger a quienes aman.
Pero las mentiras suelen ser peor que la verdad, estoy asustada, y siempre tengo miedo, pero hay personas a mi cargo, personas que tengo que proteger, así tenga que ir al mismo tártaro y matar yo misma a Cronos, nadie tocara a las personas que amo.
Aunque claro.
Las personas a mi cargo nunca pueden saber que tengo miedo, porque soy quien los sostiene, mi fortaleza los mantiene de pie.
Cuando Thalía se sacrificó para que Annabeth Chase y Luke Castellán junto con Grover llegaran al campamento, mi corazón se rompió en pedazos, nunca mantuve mucho contacto con Thalía, pero cuide de Annabeth y Luke un buen tiempo cuando eran más jóvenes.
Ese es mi trabajo en el campamento, ser la niñera de aquellos niños que presentan signos de ser semidioses, y cuando llega el momento, Grover o otro sátiro protector, los traeria al campamento.
Aunque a veces suele ser algo pesado, para mi es un trabajo precioso, claro, es mas riesgoso de lo normal, ya que, yo también soy una semidiosa.
Llegue al campamento cuando recién tenia cinco años de edad, mi madre había muerto, y ya no tenia mas familia, desde entonces, Dionisio y Quirón son mi familia, y los niños del campamento, claro.
Recientemente había cumplido 23 años, lo que me hacia la persona mas adulta del campamento, podría decir, que soy la semidiosa que más ha durado viva.
Sin reclamar.
Después de tantos años, no ser reclamada, no dolía, al principio sí, pero después, fue remplazado por la ira, si mi padre divino no se había tomado el tiempo de reclamarme durante los últimos 18 años, significaba que le importaba tan poco como para siquiera dignarse a mirarme un segundo.
—Eleonora.
—Lo que creas que he hecho, te juro que no lo he hecho.
Me gire, Quirón tenia sus manos en su ¿Cintura?, de igual forma, me miraba de manera seria, no recordaba haber hecho nada malo, pero su mirada a pesar de ser seria no era de regano, algo malo había pasado.
—¿Qué paso? —Pregunto alarmada—¿Sucede algo? ¿Los chicos están bien?
—Grover llego hoy, con Percy Jackson.
—¿Qué?
Percy Jackson, el hijo de Sally Jackson, quien fue coronada por mí, como la mejor madre del maldito siglo, no exagero, me acerqué a ella cuando Percy tenía siete años y comencé a ayudarla a cuidarlo en el momento en el cual comenzó a salírsele de las manos.
—Percy tiene 12 años—Hablo Quirón—Ya era hora de que llegara al campamento.
