Los omegas de Jeon [KM]

043

— Bien cariño tendré está reunión con mi padre, espérame en nuestro hogar ¿Si?.

— ¿Estás seguro de querer hacer esto solo?.

— Claro, regresaré temprano al edificio, ¿Quieres que te lleve algo?.

— Hmm no, no tengo ningún antojo...

— Muy bien.- El alfa beso castamente los labios del Omega, mirando como este se subía al auto acompañado de sus guardaespaldas.

Ahora tenía que enfrentar la parte más difícil para el y era hablar con su padre acerca de lo que había descubierto.

Pues este llamó pidiendo que se reunieran para hablar del acuerdo que su abogado le había hecho llegar.

Necesitaba mantener a Jimin alejado de todos sus problemas, si bien le había hablado de lo que sucedía era con el fin de Jimin no sé sintiera abrumado, Pero lo quería lejos de cualquier cosa que pudiera dañarlo.

Por eso cuando el auto desapareció de su vista, este suspiró y se dió la vuelta dispuesto a esperar por su padre que llegaba en algunos minutos.

Aún que el peligro estaba más cerca de su Omega de lo que el creía.

Luego de unos largos minutos de camino donde el Omega miraba con una sonrisa por la ventana, el auto fue persuadido y el camino trancado por dos grandes camionetas.

El sonido de balas impactarse, el estruendo de cada disparo, fue un detonante.

El omega sentía miedo, sentía que todo le daba vueltas e inmediatamente y tomo su vientre entre sus manos.

Cerrando sus ojos con fuerza mientras todo a su alrededor pasaba en camara lenta...

Cuando el silencio reino en el lugar se permitió abrir los ojos, solo para mirar aquella escena aterradora frente a el.

Su dos guardaespaldas estaban completamente muertos, ensangrentados en los asientos delanteros.

Su pulso se aceleró cuando escucho como intentaban abrir la puerta del auto.

Inmediatamente se alejó de la misma mirando a su alrededor algún artefacto que le sirviera para defenderse.

Aún que ni siquiera sabía para que, si estaba invadido de miedo.

Sus pensamientos y planes fueron interrumpidos cuando un hombre un poco más alto que el abrió la puerta, estaba completamente vestido de negro pero con un olor bastante conocido para Jimin.

Sus ojos se abrieron cuando su lobo gruño y el olor llegó como tal a sus fosas nasales.

Min Yoongi.

— Hola cariño.

Los ojos del Omega se invadieron en lágrimas y su cuerpo empezó a temblar, el contrario entró y lo saco por el brazo del auto.

A decir verdad Jimin ni siquiera había pensado en como serían las cosas si alguna vez ellos se volvían a ver, Pero definitivamente aquello era demasiado inesperado para el.

— Yoon.- susurró tratando de llamar su atención mientras era arrastrado por el alfa.

— Cállate no me hagas arrepentirme de esto.

¿A qué se refería?.

¿Que acaso ya no había pasado la mala racha en su vida?.

¿Por qué la madre luna no se apiadaba de el?.

— Lo llevó yo, le recuerdo que el está embarazado de mis hijos, así que lo llevaré yo.- Exclamó a los otros alfas, los mismos que asintieron mientras Jimin sentía su mundo caer en pedazos.

Yoongi estaba reconociendo a sus hijos, puede que en otras circunstancias se hubiera emocionado pero no podía ser así, no cuando sus bebes ya habian establecido un lazo con Jungkook, no cuando ya estaba planeando una vida con Jungkook y sus cachorros.

¿Por qué siempre tenía que ser infeliz?

Yoongi lo subió al auto acompañado de otro alfa.

— Ponte el cinturón.- Le dijo el alfa con autoridad, mientras quitaba el pasa montaña de su cara.

Inmediatamente el Omega hizo caso bajando su rostro, necesitaba pensar con claridad, aún que las lágrimas y la desesperación se estuvieran apoderando de su ser.

🌖🌕🌔

— ¿A qué se debe esto Jungkook?.- El padre del alfa estiró el documento hacia su hijo, el mismo que había sido enviado por su abogado en la tarde.

— Algo que quiero darte, bueno... Verás... En realidad creo que que siempre te correspondio, eres el hijo de la abuela y yo...- Jungkook estaba demasiado nervioso, no podía solo decirlo y ya, era demasiado...

— Entonces ya lo descubriste...

Los ojos del peli negro se abrieron con sorpresa ante aquello y sin dejar de mirar a su padre fue incapaz de decir palabra alguna.

— Lo supe desde que estabas en su vientre, un lobo renconoce a sus cachorros desde que están en el vientre de su pareja.

— Pero...

— Te crié, de ti todo mi amor, porque la amaba, sabía que ella no me amaba a mi y que estaba detrás de esa fortuna, Pero yo si la amé y te ame a ti con todo mi corazón sin importar nada ni nadie, no sabes el orgullo que senti cuando te presentaste como alfa, la primera vez que me dijiste papá, tus primeros pasos, tus graduaciones, Jungkook no me importa esto, lo que único que me pertenece realmente en este mundo eres tu, mi hijo.

Los ojos del alfa se humedecieron, por primera vez su padre le hablaba de aquella manera y no podía sentirse mejor.

Sin importar nada más se levantó y abrazó a su padre.

Porque ese era su papá.

El hombre que lo crío y le dió todo el amor que necesitaba, sin un vínculo de sangre pero con un vínculo de amor lo suficientemente grande para ser incluso más importante.

Igual que el con sus lindos Omeguitas.

Estaba a punto de decir algo pero su lobo empezó a inquietarse, rápidamente sintió la tristeza y el miedo en Jimin.

Se separó de su padre con la mirada perdida.

Era demasiado abrumador el miedo que Jimin sentía, tanto que le atemorizaba que se tratara de los cachorros.

Su corazón palpitaba con fuerza y su lobo rasguñaba su interior con insistencia.

Definitivamente algo estaba mal con su Omega.

Rápidamente busco su celular y empezó a marcar el número de Jimin, sin embargo este no contestaba, así que intento llamar a Mingyu y al darse cuenta que este tampoco contestaba Jungkook lo supo.

Supo que lo que mas temia había pasado pero a pesar de eso, y sentir el miedo y la ira en su interior.

El ya estaba preparado para esa situación.

Por lo que sin duda alguna empezó a mirar la ubicación en el rastreador que le había puesto en el teléfono a Jimin.

Porque si Yoongi creía que podía llevarse a su Omega tan fácilmente estaba equivocado.

Nada ni nadie alejaría a Jimin sus hijos de el.