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El frío se filtraba por las ventanas deterioradas haciendo que el ambiente dentro de aquel departamento fuera poco apropiado para una persona débil e indefensa y para completar en cinta.

Sin embargo la noche parecía más estrellada e iluminada por la gran luna llena, simplemente una imagen perfecta para cualquier lobo.

Jimin terminaba de comer sus fideos instantáneos entre temblores que su cuerpo sentía cada vez que una ventisca se colaba por las grietas de las ventanas, era una situación lamentable, pero al menos agradeció tener un techo y no estar vagando en las frías calles de Seoul.

— Hoy llegaré tardé, no me esperes en el sofá, puedes dormir en la cama - Dijo el alfa acomodando su largo e impecable abrigo, ni siquiera agradecía que Jimin lavara su ropa a mano rompiendo sus nudillos y esforzándose demasiado para quitar los olores del tabaco y el alcohol que tanto consumía.

— Yo... Eh... ¿Podemos hablar un momento?

— Voy tarde.

— Solo un momento por favor.

— ¡Que molesto! Ya di que quieres...- El Omega sintió sus ojos cristalizarse y tragando grueso apenas pudo pronunciar

— Buscaré un trabajo mañana...

— No. - El alfa solo había pronunciado aquello dándose la vuelta para irse, sin embargo Jimin estaba tan cansado de la situación que no le importaba rogar por qué lo dejara hacerlo, el necesitaba dinero para asegurar algo para su cachorro.

— ¡Por favor Yoon! No debería pedirte esto...

— Si, si debes porque dependes de mi

— ¡Ya no quiero hacerlo! Quiero trabajar por favor...

— No.- Tomó sus llaves dispuesto a irse y Jimin sentía que estaba perdiendo toda su dignidad y orgullo, si su padre viera la situación se decepcionaría de el una vez más.

— ¡Cómo quieras lo haré de todos modos!

Dicho esto se dió la vuelta dispuesto a dejar de seguir los pasos del alfa, pero este lo tomo por el cabello fuertemente volteandolo para quedar cara a cara y desatar su furia mirándolo a los ojos.

Porque la idea de que Jimin compartiera y conociera a mas personas lo hacía hervir en furia.

Puede que no lo amara pero tenía ese orgullo de alfa y sentido de pertenencia hacia el Omega, que no dejaba de martillar en su interior.

Jimin era su Omega, suyo y punto.

— Me estás lastimado Yoon...

— ¿Ya no tienes las agallas para desafiarme? ¿Eh? ¿Por qué siempre tienes que hacerme enojar maldita sea?

— Yoon mi cabello...

El alfa soltó el cabello del castaño de manera fuerte haciéndolo pegar la cabeza de la pared, había sido tan brusco que Jimin sintió todo a su alrededor moverse como si hubiera sido un temblor.

— ¡Deja tus malditas ocurrencias! ¡Y no me hagas enojar suficiente tengo con tener que velar por ti! ¡Maldito mal agradecido!

Ya basta

Defiendete

Defiendete

¡Hazlo ahora!

— ¡Deja de mentir! No estás haciendo más que dañarme ¡Deja de quedar como un buen alfa cuando incluso me engañas con alguien más! - La respiración del Omega se volvió erratica y una fuerte oleada de furia lo invadió - ¡Estoy cansado de esto!

— ¡¿Y que mierdas harás?! ¿Te irás? ¡No tienes donde caer muerto Jimin!- El alfa se burlaba en su cara, se burlaba de su situación, de su dolor, de sus lágrimas y de su vulnerabilidad - ¡Si te engaño! Porque... ¿Acaso no te has visto? ¡Dejaste de parecerme atractivo! Pareces un maldito vagabundo.

El corazón del castaño se rompía cada vez más conforme los pasos que daba el alfa hacia el...

— Si no fuera lo único que tú tuvieras, ya te hubiera dejado en la calle.

— ¿Cómo puedes decirme eso? ¡¿Por qué eres tan cruel?! ¡Si tanto me odias entonces me iré de aquí!

El Omega entre llanto se dirigió a su habitación necesitaba salir de ese lugar, no importaba si tenía que pasar una noche en la fría calle, el no podía seguir al lado de ese alfa nunca mas.

Tomo su vieja mochila y empezó a meter su ropa con sus lágrimas cayendo como cascadas de sus ojos.

Sin embargo el sonido de la puerta cerrándose lo hizo detener, su cuerpo se estremeció por el fuerte escalofrío y sus piernas temblaron cuándo escuchó:

— Con que quieres irte, bien, déjame darte una grata despedida cariño.

La mano del alfa fue directo en forma de puño a la cara del castaño, haciéndolo perder el equilibrio cayendo a la cama.

El miedo de saber lo que estaba apunto de pasarle lo invadió y utilizo su último recurso.

— ¡Yoon no! ¡Estoy en cinta! ¡Por favor no me pegues!...

Pero aquello fue un simple chiste, Yoongi estaba siendo controlado por su alfa y su razonamiento humano ya no estaba en el.

El solo gruñó y después de eso, lo único que se escuchó en aquel frío y oscuro departamento fueron los gritos del Omega rogándole que se detuviera y pidiendo ayuda.

Nadie lo escuchó.

Nadie lo ayudó.


Ni siquiera sabía el tiempo que había pasado, su cara dolía a montones, pues Yoongi se había ensañado con golpear su rostro como un saco de boxeo

Con la poca fuerza que tenía tocó su vientre con el latente miedo de que su bebé ya no estuviera ahí

Su lobo estaba tan silencioso que tenía miedo, si su lobo perdía al cachorro podía morir de tristeza y el junto a su lobo.

Sus ojos no podían abrirse completamente, su cara dolía pero sabía que su lobo podría curar sus heridas externas, aún que las internas seguirían ahí por un tiempo.

Esos ojos rojos y la furia con la que lo golpeó, esas imágenes seguirían en su mente por mucho tiempo.

Aún así no detectaba el olor del alfa por lo que imaginó se había ido, era su única oportunidad de escapar, así que con la poca fuerza que tenía, se levantó empacando sus pocas pertenencias

Su rostro estaba hinchado y en su camisa de pijama había sangre que había salido de su labio y nariz, los cortes en su pómulo eran muy leves pero ahí estaban, parecía un monstruo.

Con cuidado se colocó un suéter de lana y sin casi energía se inclino bajo la cama, aquella caja de madera donde guardaba los ahorros que su madre le mandaba a su cuenta de banco cada mes, le serviria para pagar alguna residencia precaria igual o peor que ese departamento, pero lo único que importaba era tener un lugar donde pasar las noches frías.

Ese día Jimin abandono al alfa que creyó amar hace meses, con un cachorro en su vientre.

Los omegas de Jeon [KM]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora