13. El santuario.

240 22 0
                                    

Alessandra.

Aparté rápidamente a Aron y bajé de la mesa. Me agaché a recoger mi ropa interior, pero él la tomó primero y la guardó en un bolsillo de su pantalón.

—Un recuerdo —dijo con una gran sonrisa.

—Estás loco.

—Por ti.

Tomó mi rostro entre sus manos y me besó nuevamente con pasión. Sentí otro toque en la puerta y sonreí sobre sus labios.

—Les ¿estás aquí?

Me aparté de Aron y caminé a la puerta que estaba con seguro. La abrí y encontré a Cas y Elena del otro lado.

—¿Por qué tardaste tanto en abrir? —Preguntó Cas.

—Estaba ocupada con... un asunto que no puedo discutir.

Me pasaron por el lado y entraron. Sus miradas se fijaron en Aron que estaba en la mesa fingiendo leer un libro.

—¿Por qué estaban los dos encerrados? —Cas me miró y Elena sonreía detrás de él.

—¿Recuerdas cuando fuimos al templo hace unos días? —Cas asintió—. Me dieron una tarea secreta que no estoy autorizada a revelar, pero Aron me ayuda aquí.

—Entiendo —pareció creerlo—. El sacerdote no me quiso decir nada ese día, dijo que era algo muy secreto.

—Así es —respondí.

Cas se acercó hasta Aron y Elena vino donde mí.

—Tu hermano será ingenuo, pero yo no —sonrío—. Me contaras todo hoy a la noche —enfatizó.

Nos acercamos a la mesa y escuché a Cas hablar.

—Bueno, venía a informarte lo que padre me dijo. Acabo de salir de una reunión con él —nos sentamos y pude sentir la mirada fija de Aron en mi—. Nosotros partiremos en dos días hacia Sidia, Elena y sus hermanos también volverán a Argo ese día y mi madre se encargará de lidiar con las princesas y sus delegaciones. Padre dijo que tu estarías ausente porque estarías en el santuario del monte.

—Sí —contesté—. Me iré en tres días y está vez estaré cuatro días allá. Vanesa me escoltará de ida y vuelta.

—Muy bien —sonrió Cas—. Hoy cenaremos con todas las princesas, pondrán conocerlas —nos dijo a Elena y a mí—. ¿Vendrás?

—Claro.

Cas me pidió que lo acompañara para conocer a las princesas, él estaba muy entusiasmado, en especial porque ellas querían conocerme.

Antes de seguirlos volví a mi habitación para tomar una nueva ropa interior. Aron trató de seguirme, pero Cas lo entretuvo hablando, aunque estoy segura de que no escuchó nada de lo que él le decía.

*

En la cena de la otra noche conocí a las cinco princesas; La mayor tenía apenas 12 años y era la princesa heredera de Sidia, la seguía la hermana menor de Reiner Broix, dos princesas del imperio del sur y la princesa de Galerast. Todas aún eran muy jóvenes, pero a la vez muy maduras al aceptar sus compromisos a corta edad.

Esa misma noche Elena fue a mi cuarto y me obligó a contarle todo lo que había pasado. Le conté con todo detalle lo de Chris y luego lo que pasó con Aron. Ella también me contó que durmió con Cas, aunque evitó los detalles, él es mi hermano así que preferí no escuchar mucho.

Llegamos a la conclusión de que tendré que decidir en algún momento, pero Elena me hizo ver que probablemente me apresuré al aceptar una propuesta de matrimonio con un hombre que no conozco del todo y que él mismo me dijo que no había sido completamente sincero conmigo, en especial ahora que me convertiría en archiduquesa, tenía que tener mucho cuidado con quien relacionarme, aun así, pensaba llevar a Cas en el próximo encuentro que tuviera con Chris. Por otro lado, lo que me sucede con Aron siempre ha sido algo en lo cual no tengo control de mis sentimientos, así que creo que solo debo darme un poco de tiempo.

La joya de la corona (BORRADOR FINALIZADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora