77. Buena noticia, mal momento.

102 9 1
                                    

Alessandra.

Bajo la sombra del árbol le conté a Rob todo lo que sentía por él, desde que lo conocí hasta este momento. Fui completamente honesta, él debía saber todo de mí, se lo tenía decir, al igual que había decidido irme al plano divino en un año.

—No quiero que te vayas —susurró mientras acariciaba mi cabello—. Debimos escaparnos cuando tuvimos tiempo.

—No podemos escapar del destino, Rob.

—Uno crea su destino, bonita, nada está escrito.

—No podemos cambiar lo que somos, ya te lo dije una vez, Rob, tal vez solo fuimos una casualidad que no estaba destinada a ser.

—Una casualidad muy dolorosa.

—Para mí fue linda —lo miré—. Aunque no pude amarte como quería, siempre te llevaré en mi corazón.

Nos dimos un pequeño beso y luego nos fuimos. Agradecí que no preguntara nada de anoche, no quería comentar que dejé que Lía tomara el control y durmiera con Henry. Solo la dejé hacerlo para no levantar sospechas sobre lo que pasó con Rob y por como actúe la última vez juntos.

Los días pasaron, habían muchas reuniones, mis padres corrían por todas partes, el consejo del imperio y demás gobernantes exigían respuestas, todo era un caos.

Estaba atardeciendo, decidí estar fuera del palacio, no podía lidiar con el ruido y gritos dentro. Me senté al borde de una fuente y observé el agua fluir, solo quería descansar mi mente.

—El agua es interesante —Istora se sentó a mi lado—. Los humanos son muy ruidosos.

—Me sorprende que sigas aquí —la miré—. Yo pensaba que ya te habías ido.

—Me iré en cinco días. Volveré al plano divino, pero te dejaré protegida por una barrera.

—¿Por qué?

—Solo una precaución —se encogió de hombros—. No confío en los humanos, así que bajo esta barrera estarás a salvo, y si necesitas mi ayuda, vendré de inmediato —acarició mi cabello—. No quiero que nada te pase.

Curvé levemente mis labios hacia arriba. Cada día buscaba alguna forma de romper mi destino, no quería abandonarlo todo. Istora parecía querer ayudarme, pero algo me decía que ella quería que me quedara a su lado.

—Istora —bajé mi mirada—. ¿Puedo romper la profecía?

—No lo sé, si mi madre estuviera aquí podría ayudarnos, pero no hay nadie que sepa cómo romperla.

—Quiero cambiar el destino.

—Las acciones que realizas para cambiar tu destino solo logran sellarlo más —me tomó el mentón y me hizo mirarla—. Yo lo aprendí de una forma dolorosa.

—¿Mi madre? —Asintió.

—Alessandra ¿Qué significa Aron para ti?

La pregunta me dejó en blanco, fue un cambio abrupto de tema y la verdad no sabía bien cómo responderla, pero intenté ser lo más honesta.

—Aron es mi estabilidad, lo he amado desde que entendí el significado de la palabra amor. Quería una vida a su lado, con él siento que tengo todo, el solo hecho de pensar en perderlo fue lo que hizo que mi sello se agrietara —bajé mi vista a mi mano izquierda—. Tenemos una conexión especial, no es solo física, es como si estuviésemos destinados, quisiera que el fuera mi destino.

Sí, eso sentía por él, era un amor diferente al de Rob o lo que creí sentir por Henry.

—Si él acepta, podría venir al plano divino con nosotras. —Abrí mis ojos y miré a Istora—. Como nacido con gracia divina, puede cruzar la barrera, pero quedaría atrapado, al igual que tú.

La joya de la corona (BORRADOR FINALIZADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora