31. 𝓙𝓾𝓮𝓰𝓸 𝓼𝓾𝓬𝓲𝓸

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Al ver que Gyuvin y Jeonghyeon tendrían una competencia de pulsadas, varios de los concursantes se reunieron alrededor para apreciar el pequeño espectáculo.

―No quiero lastimarte ―Le dijo Gyuvin a Jeonghyeon para luego dejar ver sus músculos.

―Entonces tenías todo eso escondido bajo tu ropa suelta ―dijo Jeonghyeon ―. No debí subestimarte.

―¿Están listos? ―preguntó San mientras tomaba las manos de los Alfas.

Una vez los dos jóvenes Alfas que competían por la atención de Ricky dieron la señal, todos los demás alfas que se encontraban mirando comenzaron a alentar.

―Mira las venas en los brazos de Gyuvin ―le dijo Sungchan a Keeho.

―Apuesto por Jeonghyeon ―respondió Keeho ―. Observa su mirada y la forma en la que sostuvo la mano de Gyuvin. Él sabe lo que hace.

―¿Qué esta ocurriendo? ―preguntó Jiwoong mientras se acercaba.

«No puedo perder» pensó Gyuvin mientras hacía lo posible para vencer a Jeonghyeon.

«Es más fuerte de lo que parece a simple vista» pensó Jeonghyeon.

Después de unos segundos Gyuvin terminó por vencer a jeonghyeon, pero el Alfa de cabello oscuro no estaba feliz con eso y pidió una revancha.

―Ya te gané, ahora déjame en paz ―dijo Gyuvin.

―Dos de tres ―dijo Jeonghyeon.

―¿Están seguros? No se lastimen muchachos ―Dijo San.

―De acuerdo, lo intentaremos de nuevo ―Dijo Gyuvin a pesar de que ya sentía que había hecho un gran esfuerzo ―. Puedo ganar una vez más y eso será todo.

Esta vez Jeonghyeon estaba decidido a ganar, por lo que se fijó muy bien la postura de Gyuvin y decidió ir por todo desde el comienzo.

Mientras ambos jóvenes se preparaban para competir, Ricky se encontraba cerca del lugar observando.

―¿Qué hacen todos allí? ―se preguntó el Omega mientras se acercaba.

―¡Comiencen! ―dijo San al soltar a los Alfas jóvenes.

Ricky logró llegar al lugar justo para ver como dos de sus citas competían entre ellos.

Eso sorprendió al omega.

―¿Qué hacen? ―preguntó Ricky.

Jeonghyeon se distrajo al escuchar la voz de Ricky y dejó que Gyuvin lo venciera, pero Gyuvin no notó que su competencia había dejado de hacer presión y terminó por estrellar la mano de Jeonghyeon contra la mesa.

―¡Ahh! ―gritó Jeonghyeon de dolor ―¿Qué haces? Mi mano...

―¡Lo siento! ―dijo Gyuvin apenado ―. No era mi intención, pero es que tú...

―¿Qué yo qué? ―Lo miró ―. Necesito hielo ahora mismo.

―Hay un botiquín de emergencias en la mansión ―dijo Ricky mientras corría hacia Jeonghyeon ―. Yo te llevaré ―Miró a Gyuvin ―¿Qué estaban haciendo?

 Yo te llevaré ―Miró a Gyuvin ―¿Qué estaban haciendo?

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