Me enamore de mi pervertido vecino

Parte 40

El Pent-House era precioso, tenía una vista increíble, al ver el tamaño de la cama no pude evitar imaginar un sinfín de locuras que pudiéramos hacer ahí – No solo en la cama, escuché en mi oído mientras Marcus pasaba sus manos por mi cintura clavando su cara en mi cuello besaba mi oreja.

Pero será un gran comienzo le dije mientras me aferraba a su cabeza enredando mis dedos en su cabello. Su boca devoraba mi oreja, mi cuello su mano estaba masajeando mi zona por encima de la ropa, empecé a jadear con las palpitaciones en mi vagina cuando me arrojo a la cama y se clavó entre mis piernas, me aferraba a las sabanas de la cama casi a punto de correrme sobre su cara – Aun no pequeña... su lengua suavemente empezó a rodear mi coño mientras su mano apretaba mi teta izquierda haciéndome jadear intensamente

– Quieres que pare... – hhhuuummm No pares dije mientras me retorcía de place... No pares repetí mientras jalaba su cabello presionándolo contra mi ... Su lengua se deslizo hasta mi hinchado clítoris mientras sentí lentamente un dedo introducirse en mi punzante coño ya húmedo por su lengua.

Gemía como loca mientras me movía desesperada queriendo sentirlo más adentro de mi – Esto es lo que quieres introdujo el segundo dedo que empezó a masajear dentro y fuera haciéndome desfallecer de placer. En ese momento ya no tenía control de mi cuerpo estaba pidiendo más, tercer dedo deslizarse dentro y fuera – Estas tan jodidamente excitada pequeña... Por favor suplique...– Por favor que dijo él mientras introducía sus dedos lentamente.

– Te necesito dentro ... – Quieres que te coja... Si dije mientras sentí un dolor punzante desgarrar lentamente mi pequeño coño, Marcus estaba muy bien dotado su pene era muy grueso me dolía muchísimo pero el solo entro sin moverme mientras me acariciaba con una mano el clítoris y con la otra mis pezones para excitarme más mientras pasaba el malestar, hasta que por fin empecé a moverme despacio y entendió que estaba lista para él, lo hizo demasiado lento no quería lastimarme: Mientras me penetraba alternaba entre mis dos accesos hasta que ambos legamos al clímax dejando mi agujero chorreando con su leche.

Aún estaba revolcándome perdida gimiendo cuando Marcus entro de golpe en mi vagina haciendo gritar nuevamente

– Eres tan estrecha pequeña, susurro mientras acariciaba mis pezones, lo atraje a mis labios hasta que empezaron las embestidas fuertes y profundas haciéndome perder nuevamente el control – Así amor cógeme fuerte le dije... Estas tan mojada que te voy a coger tan duro hasta que solo puedas decir mi nombre dijo mientras me embestía brutalmente hasta que termino dentro nuevamente y se desplomo sobre mi mientras intentábamos recuperar el aliento. Finalmente me acurruco en su pecho hasta que me perdí en un sueño profundo.

Pequeña son las 5 tienes que arreglarte tus amigas nos esperan... Vamos a bañarnos me saco de la cama cargando. Mientras nos bañábamos me pregunto si no me había lastimado, es la primera vez que experimentaba placer por esa parte de mi cuerpo, pero lo negué cualquier tipo de incomodidad, sabía perfectamente que si le confirmaba la mínima molestia no me lo volvería hacer.

Mensaje de WhatsApp de las chicas: Nos vemos en la playa en el lobby, vallan con ropa cómoda y sandalias.

Me puse un traje de baño de una pieza blanco sencillo, arriba vestido de playa bordado corto muy flojo que se ajustaba en la cintura y sandalias. Marcus uso bermudas gris y una camisa de gasa Blanca con sandalias, ambos nos recogimos el cabello y nos dirigimos a la playa privada del hotel.

Estábamos pasando un rato genial platicando, con comida y bebiendo y escuchando un grupo acústico que estaba tocando para nosotros cuando Marcus me indico que tenía que responder Tiano lo estaba llamando. Seguí escuchando la música cuando las chicas empezaron a cantar así que me uní a ellas cantando a todo pulmón como cuando estábamos en la prepa.