"Dentro de cada uno existe una chispa, quienes son capaces de encenderla serán quienes ganen sus batallas por los sueños."
El combate entre aquel ser y Meredith se recrudecía, la diferencia entre ellos era abismal, dejando claro que aquel enemigo poseía una fuerza física curtida en combate, su nivel de estrategia era directa y violenta sin patrones lo que le hacía un enemigo aún más peligroso y su nivel de poder sobrepasaba el control de Meredith. Las armas golpeaban unas contra las otras dejando en un eco el tintineo al chocar, el cual recorría el bosque como una pequeña campana.
Meredith comenzaba a sentir que perdería si no hacía algo rápido y por ello decidió que su única salida era dejar de controlar su poder, al menos en ese estado si tendría una oportunidad de salvarse y vencer al enemigo como antaño, por ello en uno de los choques, la chica aprovechó el golpe para saltar hacia atrás.
- Reconozco que me está costando más de lo que me esperaba por ello no me dejas otra opción que usar esto...- Dijo Meredith mostrando sus ojos totalmente blancos.
Meredith comenzó a dejar salir todo su poder que con rapidez tomó posesión de su cuerpo mostrando sus cabellos blancos como la nieve, el aura blanquecina que envolvía su cuerpo y las llamas descontroladas que la recorrían del mismo color. El ser la miró riendo sin parar, su risa, aquella sádica risa nunca cesaba mientras adoptaba una postura de combate diferente, su cuerpo emanaba aún más calor que antes, uno sofocante y desértico.
Ambos se miraron preparados para seguir con el combate, Meredith avanzó con más rapidez chocando con la defensa del contrario, quién tan solo retrocedió un paso, seguidamente l chica comenzó a golpear sin control, sin descanso, primero su espada y seguidamente el martillo, los golpes se sucedían uno tras otro como si Meredith estuviera desesperada por acabar ya el combate, uno que el propio enemigo, claramente, estaba disfrutando.
- Eso es...¡Odiame! ¡Desea matarme! ¡Hazlo niña! - Decía el ser entre risas.
- ¡Basta ya! ¡Ríndete de una vez! - Gritaba Meredith sin dejar de luchar.
El combate sucedía con un ritmo caótico, fuera de lo normal en uno, las notas armoniosas de las espadas al encontrarse pasaban a ser semejantes a un chillido corto lleno de dolor, ninguno cedía un palmo de terreno, Meredith no descansaba en sus ataques y el contrincante reía tras su defensa férrea dejando que la chica atacase a placer. El tiempo iba pasando y pronto los golpes de Meredith comenzaron a perder fuerza y velocidad sin darse cuenta, algo que su enemigo pronto comenzó a percatarse dejando que siguiera con su empeño de golpearle o al menos intentarlo.
En cuanto Meredith empezó a jadear por el agotamiento mágico, su enemigo enmascarado aprovechó para asestarle un golpe extendiendo el brazo, dando con la palma de la mano en el rostro de Meredith, el calor desprendido se asemejaba al aire comprimido que hizo que además Meredith no solo recibiera un golpe grave, si no, que también la hizo salir despedida de nuevo por los aires hasta la roca donde antes estuvo escondida. El dolor se hizo aturdidor dejando a la chica casi fuera de combate, el contrario se acercó paso a paso a ella riendo con el arma extendida.
- Pobre...pobre niña...pues no fuiste lo suficientemente fuerte y ahora morirás - Decía el enmascarado acercándose a ella.
- No...¿Qué...Qué ha pasado?...Mi poder...Socorro...- Meredith no comprendía que había ocurrido.
La mente de Meredith se encontraba embotada por el golpe y la ola de calor, su poder se estaba apagando poco a poco por el desgaste, el cuerpo de la chica se encontraba tan sumamente cansado que ni siquiera era capaz de mover los dedos de su mano que trataban, de alguna manera desesperada, llegar hasta su espada, la cual descansaba a su lado viendo como su enemigo estaba cada vez más cerca. El ser se acercó hasta ella mirándola desde aquella posición donde parecía incluso más imponente, mirando a la chica con sus ojos rojos degradando al naranja, llenos de ira, de muerte y maldad, la risa resonaba con más fuerza que antes en la cabeza de Meredith.
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Desierto de Sombras
FantasíaEn un mundo donde los seres humanos viven tranquilos, hay quien vela por ellos en secreto desde hace demasiado tiempo. Ellos son los clanes que guardan al mundo de aquellas pesadillas, sueños y fantasías que tan solo creemos que son cuentos para dor...