El trabajo de Azazel ⸸

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Shh... — Susurro sobre su oído, notando como incluso su cuerpo comienza a temblar bajo el mio. Desbloqueo la puerta y deslizo mi mano hacia arriba, cubriendo ambos de sus ojos con esta y haciendo que camine hacia delante en cortos pasos.

Me refiero, a tu primer trabajo, gacelita... — Aseguro en voz baja, cerrando con la pierna detrás de mi.

Veamos hasta dónde eres capaz de llegar...

Él traga saliva con algo de dificultad y yo destapo lentamente sus ojos.

Quizás no sería capaz, la idea era ver en que nivel estaba.

La gacelita abre mucho los ojos, observando a aquella persona atada de manos y piernas a la silla, situada esta en el centro de la habitación, la cual lleva un saco de tela colocado sobre su cabeza. Aunque estaba algo embriagado a causa de las copas que se había tomado aquella noche, si que parece estar bastante consciente.

Se ha quedado sin palabras, después de todo.

Era tal y como dijo él mismo hace unos minutos cuando estaba sobre mi regazo, sin duda, no había bebido demasiado. Eso, facilitaría las cosas.

Él aprieta los puños con fuerza y retrocede un paso casi de forma incosciente, provocando que su espalda choque con mi pecho, sobresaltándole.

Elevo ambas de mis manos, deslizándolas lentamente por su piel y acariciando sus brazos.

— Q-Que... — Musita casi inaudible, extremadamente nervioso — E-Es una... — Sus pupilas se mueven frenéticamente por todo el cuerpo de la persona atada a la silla, casi incapaz de procesar que realmente estaba allí.

Shh... — Susurro en voz extremadamente baja, deslizando mis manos por sus brazos hacia abajo — Controla tu respiración... — Ordeno en tono ronco, apretando ligeramente el agarre en la zona de sus antebrazos.

La tensión en su cuerpo aumenta al instante, se queda inmóvil, negando con la cabeza repetidas veces mientras no deja de mirar en aquella dirección con una expresión completamente horrorizada.

En la misma posición, vuelvo a subir mis manos acariciando sus brazos hacia arriba paseando delicadamente mis dedos por su piel — No tendrás que matarla, relájate — Le aseguro en el mismo tono, sabiendo que eso era algo que probablemente sería demasiado para una primera vez.

Algo de tensión emana de su cuerpo, pero aun se encuentra extremadamente rígido observando fijamente a la persona en la silla. Él mueve únicamente sus pupilas y me observa por el rabillo del ojo, aun no procesándolo del todo — ¿Q-Qué se supone que es el trabajo? — Pregunta en tono precavido y asustado.

Ese es mi chico.

Esbozo lentamente una sonrisa un tanto pícara y aun con mis manos sobre sus brazos, paso junto a él, colocándome a su derecha — Creo que te lo puse fácil, para ser la primera vez — Admito, acercándome sin prisa a la mesa de la esquina y tomando dos cubrebocas con mis manos, extendiéndole después uno a él.

— ¿F-Fácil? — Inquiere él, frunciendo ligeramente el ceño. Mueve sus pupilas hacia el cubrebocas en mis manos durante unos largos segundos y finalmente lo agarra con cierta inseguridad.

Oh, esto va a encantarte... — Aseguro en tono juguetón, colocándome correctamente el cubrebocas.

Que comience la fiesta.

Me acerco de nuevo hacia la mesa y destapo con ayuda de mis manos una especie de olla térmica. Él se acerca junto a mí, con pasos dudosos y yo destapo también algo que está envuelto por un paño blanco, colocado en perpendicular junto a la olla.

Esposado A Un Asesino. Libro 1 . Unholy Blood. ⸸ | Yoonmin Hard +18⚠️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora