Bailando con el diablo II ⸸

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(POV JiMin)

Estaba en medio de un bosque descalzo y con ropa ligera, la suave brisa rozaba levemente la piel de mi rostro, mandándome pequeñas descargas relajantes por todo el cuerpo. Me quedé de pie, con los ojos cerrados, disfrutando del aroma de la vegetación y de la húmeda tierra que se extendía a mí al rededor.

Entonces, repentinamente, ese aroma cambió, provocando que frunciese un poco el ceño, olía a algo un poco más fuerte, pero era incapaz de descifrar que era, me concentré todo lo que pude tratando de averiguar que podía ser, no era del todo desagradable, pero si extraño.

Noté entonces que olía a algo parecido al metal, lo cual me extrañó por completo ya que estaba en medio del bosque después de todo. ¿Qué metal podía encontrarse allí? Invadido por la curiosidad, abrí de nuevo mis ojos y observé a mí al rededor, no viéndose nada más que árboles, arbustos, plantas y un hermoso paisaje verde.

Decidí dar un paso adelante y tratar de seguir aquel olor fuerte que no se detenía para averiguar de qué se trataba. Al avanzar, noté que mis descalzos pies habían pisado un charco de agua. Bajé rápidamente la vista hacia abajo y di un brinco en mi sitio, retrocediendo completamente horrorizado mientras observaba aquel charco frente a mí.

Sangre.

Sentí unas fuertes náuseas recorrerme el estómago y me saqué la camisa, secando y frotando mis pies con fuerza para quitar todo resto de aquel viscoso líquido carmesí. Observé al rededor preocupado por si se trataba de algún animal herido al que pudiese ayudar, sin embargo, no se vio nada.

Parecía que estaba completamente solo en el lugar.

Solo luego de concentrarme unos segundos, pude ver que sobre aquel charco de sangre había dos extraños objetos. Me acerqué lentamente, por un lado, con cuidado de no volver a mancharme y me agaché viendo aquello que flotaba con detenimiento.

Me tapé la boca con fuerza aguantando las ganas de vomitar cuando visualicé dos ojos humanos, sintiéndose al instante un tirón en mi mano izquierda, que me distrajo en seguida de la escena. Giré mi cabeza rápidamente y había un niño pequeño sosteniéndome del meñique con algo de fuerza, fruncí el ceño sintiendo como el tiempo pasaba demasiado lento por alguna razón y decidí preguntarle.

— Oye... ¿Estás bien? — Traté de hacer contacto visual con el menor, pero en cuanto este alzó su cabeza viéndome, las cuencas de sus ojos se encontraban completamente vacías mientras aquel líquido carmesí se escurría por su pálido rostro sin vida.

— ¡DÉJAME! — Grité todo lo fuerte que pude tratando de zafarme de su fuerte agarre y cuando me soltó me sentí caer de pronto al charco de sangre, luego me hundí al vacío, hacia un abismo oscuro.

Abrí los ojos de golpe notando mi respiración algo agitada y lo primero que contemplé fue un techo blanco sobre mi cuerpo. Mi pecho todavía subía y bajaba aceleradamente.

Cerré mis ojos unos segundos.

Suspiré, había sido solo un sueño, una pesadilla.

Miré hacia mi derecha y había una enorme ventana de cristal por donde comenzaban a colarse algunos primeros rayos nacientes de lo que supuse que sería el amanecer.

Esta no era mi casa, estaba seguro, sin duda alguna. ¿Dónde estaba?

Fruncí el ceño y noté un pequeño movimiento a mi izquierda provocando que girase inevitablemente mi cabeza en aquella dirección. Abrí mucho los ojos.

La escena era simplemente indescriptible.

YoonGi se hallaba con su cabeza algo ladeada, acostada y cómodamente hundida en la mullida almohada, pasando una de sus manos por debajo de esta, podía decir que estaba profundamente dormido por la delicada forma en la que respiraba, sus finos labios ligeramente entreabiertos permitiendo pasar algo de aire, asimismo, sus rasgados ojos cerrados, dejando descansar aquellas claras pestañas sobre sus mejillas. Su cabello rubio algo alborotado le caía por todo el rostro en suaves olas relajadas, hasta cubrir levemente la punta de su nariz. La camisa que portaba aún estaba a medio desabrochar y dejaba al descubierto la tez pálida de sus clavículas. Su pecho ascendía y descendía de forma pausada y tranquila junto con las acolchadas sábanas que lo arropaban.

Esposado A Un Asesino. Libro 1 . Unholy Blood. ⸸ | Yoonmin Hard +18⚠️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora