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Parte 1

El reino de Eldoria se extendía majestuoso en la ladera de una colina, rodeado por vastos campos de flores silvestres y caminos de piedra antigua. En el corazón del reino se alzaba un imponente castillo de torres altas y almenas doradas, cuyos muros de piedra blanca brillaban bajo la luz del sol.

A lo largo de las calles adoquinadas, los comerciantes ofrecían sus productos en mercados vibrantes y bulliciosos, mientras los músicos tocaban melodías alegres que resonaban en el aire. Las casas de los aldeanos, construidas con madera y techos de paja, estaban adornadas con jardines llenos de rosas, lilas y lavandas, creando un mosaico de colores y aromas.

Justo al norte del reino, se encontraba el Bosque de Lyria, un lugar místico y antiguo. Los árboles altos y frondosos se erguían como gigantes, sus copas entrelazadas formaban un dosel verde que filtraba la luz del sol, creando un ambiente de penumbra y misterio. Los senderos del bosque estaban cubiertos de hojas caídas y musgo suave, mientras riachuelos cristalinos serpenteaban entre las rocas, susurrando secretos antiguos.

El bosque albergaba una rica diversidad de vida silvestre. Ciervos majestuosos paseaban libremente, mientras aves de colores brillantes cantaban desde las ramas más altas. En las profundidades del bosque, se decía que existía una magia desconocida, una tan fuerte capaz de hacer arder el cielo y la tierra. Sin embargo nadie nunca la había visto verdaderamente.

Al borde del bosque, un lago sereno reflejaba el cielo como un espejo, sus aguas tranquilas eran hogar de cisnes. Los habitantes de Eldoria solían contar que allí habitaba un cisne mágico, que paseaba todos los días alrededor del lago pero durante la noche desaparecía y se transformaba en algo mas.

En el castillo la reina perseguía a su hijo, el príncipe Ben, quien salía a una de sus habituales caminatas hacia el bosque lo cual le desagradaba a su madre.

—Ben! Hijo por favor, tienes que escoger a una, solo a una! —dijo gritando algo cansada de perseguir a su hijo—el baile será dentro de dos semanas y debes tener una compañera adecuada

—Madre, ya te dije no quiero ir con ninguna de esas princesas presumida —resoplo de nuevo irritado, pues lo venia repitiendo desde la mañana.

—Debes ir con alguna, si no te agrada nadie entonces deberás encontrar tú alguna chica decente —menciono bajando su tono de voz y mirando preocupada a su hijo, temía que se quedara solo y no encontrara a una mujer a la cual amar.

Ben se volteo a ver a su madre, tomo sus manos ligeramente y hablo—Te prometo que encontrare a alguien, pero por favor deja de preocuparte tanto —él la abrazo queriéndole transmitir algo de seguridad para que confiara en él, aunque no la tuviera en si mismo.

Ella asintió y lo dejo marcharse, haciéndole prometer que volvería antes del anochecer. Ben monto a su caballo y lo guio hasta llegar al bosque, se dirigieron al lago del lugar, escuchando las pisadas de varios animales silvestres y como corrían a esconderse por si era un cazador, aunque ese no era el caso.

Ben se sentó en una de las rocas cercanas al lago, y comenzó a trazar ondas en el agua con una rama que había encontrado. Se preguntaba como le haría para conseguir a una pareja dentro de tan poco tiempo, a pesar de que podía salir con cualquier chica del reino o de mas lejos ninguna le llamaba la atención, y ni hablemos de conversar, la mayoría lo tenia en un trono tal alto que ni él mismo se lo creía, a pesar de eso mantenía la esperanza de encontrar a alguien que no lo juzgara o alabara solo por ser el príncipe, es verdad que quería compartir su vida con alguien solo debía hallarla.

Cuando noto como el sol se comenzaba a poner se levanto dispuesto a irse, pero freno sus pasos en cuanto noto como todos los cisnes se reunían en el centro del lago, comenzando a dar vueltas alrededor de este como si estuvieran danzando. Ben decidió quedarse un poco mas y observar, ya encontraría una excusa para su madre, se oculto junto a su corcel atrás de un gran árbol cubriéndose con su sombra pero apreciando a la perfección lo que pasaba en el lago.

♡ᴡɪᴛʜ ʏᴏᴜ...ɪɴ ᴀɴᴏᴛʜᴇʀ ʟɪғᴇ°࿐Donde viven las historias. Descúbrelo ahora