♡ᴡɪᴛʜ ʏᴏᴜ...ɪɴ ᴀɴᴏᴛʜᴇʀ ʟɪғᴇ°࿐

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Advertencia! Aquí se toma que la protagonista (ustedes) tienen pecas, no quiero que sientan por esto ninguna clase de inseguridad hacia ellas porque a mi parecer todas las mujeres con pecas son simplemente hermosas, es solo un pequeño escenario y por ello no quiero que se lo tomen a mal. Sin mas que decir disfruten!

Estabas sentada cerca a una pequeña cascada que había en la isla. Contemplabas como el sol iba bajando poco a poco dando paso a el manto oscuro del cielo, junto a las estrellas, mientras los últimos rayos del sol se iban y realzaban tus pecas, no pudiste evitar sentirte algo insegura. Desde hace un tiempo sentías que desentonaban con tu rostro y no te agradaba diferenciarte por eso de las demás chicas.

Mientras jugabas nerviosamente con sus manos, escuchaste como unos pasos se acercaban hacia a ti, te ibas a poner de pie pero te tranquilizaste al ver a Ben llegar.

- Enserio debes dejar de desaparecer así- dijo observándote y sentándose a tu lado.- Voy a tener que prestarte mas atención para que no te pierdas- dijo a modo de broma, aunque noto que estabas algo inquieta por el movimiento de tus manos.- Oye te encuentras bien?

Levantaste la vista ante su pregunta y le sonreíste tímidamente.- Estoy bien, solo... pensando.

Ben noto tu tono triste y pregunto nuevamente.-¿Enserio estás bien? Pareces un poco triste.

Suspiraste y bajaste levemente la mirada.- Es solo que... a veces no me gustan mis pecas. Siento que hacen que mi rostro se vea raro.

Él frunció el ceño, sorprendido.- ¿Tus pecas? Pero, linda, tus pecas son preciosas. Siempre he pensado que te hacen ver mas hermosa de lo que ya eres.

Levantaste la vista, tus ojos llenos de sorpresa.- ¿De verdad lo crees?

-Claro que sí- dijo con una sonrisa cálida.- Tus pecas son como pequeñas constelaciones en tu piel. Me encanta mirarlas. Y además, son parte de lo que te hace ser tú. Y eso la hacen todavía mas bonitas.

Sintiste que una calidez se extendía por tú pecho. Las palabras de Ben eran sinceras, y por primera vez, comenzó a ver sus pecas bajo una nueva luz. Iluminadas, ahora, por la luz de la luna que se alzaba frente a ustedes.- Gracias, Ben. No sabes cuánto significa eso para mí.

Él te tomó la mano y la apretó suavemente al mismo tiempo que entrelazaba sus dedos con los tuyos.- Siempre hay que ver la belleza en lo que nos hace diferentes. Y tus pecas son realmente...- el hizo una pequeña pausa buscando las palabras adecuadas- son como las constelaciones, tan únicas y tan brillantes. Y cuando la luz las toca se ven aun mejor y te hacen brillar a ti también, eso no es algo por lo cual avergonzarse, al contrario, a veces creo que son demasiado perfectas

Sentiste como tu corazón martillaba constantemente, tus mejillas se habían coloreado de un bonito rosa y tus ojos brillaron ante las palabras del chico. Esas simples palabras habían hecho que todas tus dudas desaparecieran y sonreíste ampliamente al verlo a los ojos.

Y recuerden todo lo que nos hace diferentes nos hace simplemente mas únicos, mas nosotros.