♡ᴡɪᴛʜ ʏᴏᴜ...ɪɴ ᴀɴᴏᴛʜᴇʀ ʟɪғᴇ°࿐

ᰔ

Parte 2

This side of paradise- Coyote Theory

Los días pasaron y la interacción casual entre Ben y tú se volvió una rutina agradable. Siempre que se cruzaban en el pasillo, compartían sonrisas, pequeños comentarios sobre el día o el clima, y, de vez en cuando, algún intercambio más largo sobre el trabajo o sus estudios. Aunque no faltaba alguno que otro piropo de su parte que te hacían sonrojar y recordar aun mas el pequeño momento que compartieron en su departamento.

La conexión entre ustedes se hacía cada vez más profunda. Las conversaciones se volvían más largas, los mensajes de texto más frecuentes, y cada vez que se veían, había una química palpable, aunque ninguno lo mencionaba abiertamente. Había pequeños gestos que lo delataban: las miradas que se sostenían un segundo más de lo normal, el roce accidental de las manos al pasar algo en la mesa, o las sonrisas cómplices al recordar alguna broma compartida.

Ben empezaba a sentir que no solo eras su vecina, sino alguien con quien podía compartir sus pensamientos sin esfuerzo. Aunque no te lo había dicho, cada vez que escuchaba tus pasos fuera de su puerta o el ruido suave de la música que salía de tu departamento junto a tu voz cantando, se daba cuenta de cuánto le importaba verte. Lo que sentía iba mas allá de una mera atracción, él lo sabía, y estaba decidido a hacer algo respecto.

Un fin de semana, Ben decidió devolver el gesto que le habías hecho al darle la bienvenida con postres. Después de varias búsquedas en internet, derrames de mezcla, una tanda quemada y otra sin coser bien, logró preparar unas galletas de avena y chocolate, se encontraba nervioso por si no eran lo suficientemente buenas. Pero aun así, decidido, golpeó tu puerta y esperó.

Cuando abriste, lo miraste sorprendida, y antes de que pudieras decir algo, Ben alzó la bandeja.

-No soy tan bueno como tú en esto, pero pensé que era hora de devolverte el favor -dijo con una risa nerviosa.

Sonreíste sin poder evitarlo antes de hablar -¿Gustas pasar?

-Claro El tiempo dentro de tu apartamento parecía detenerse. Las paredes delicadamente pintadas de tonos claros pero cálidos, emanando un aire de comodidad. Había varias plantas y flores alrededor de la casa, la mayoría de interior pero las que necesitaban del sol, se encontraban en el balcón, donde un pequeño sillón con varios cojines y lo que parecía una mesita esperaban la entrada de la noche. Decir que tu casa era otro mundo para él seria poca cosa, tus cuadros con fotografías o pinturas resaltaban en cada momento, así como un olor floral y dulce que no supo distinguir si venía solo de la estancia o de ti.

Se sentaron en una mesa que había en la cocina, mientras probabas las galletas, Ben te observaba ansioso por una respuesta.

-¡Están deliciosas! -dijiste con entusiasmo, y Ben sintió cómo una oleada de alivio lo recorría.

-¿Enserio? Dios, estaba preocupado de que no hubieran quedado bien -dijo, asiéndote voltear a mirarlo curiosa.

-¿Por que? ¿No fue la primer tanda que realizaste?

-En realidad esta fue la tercera, la primera se me quemo y en la segunda la masa quedo... como decirlo, literalmente cruda -revelo, haciéndote soltar una risa al imaginarlo batallando con la masa.

-No habías preparado galletas antes, ¿o si?

-En realidad no, pero se hizo el intento

-Bueno déjame decirte que te quedaron deliciosas -dijiste al seguir probando las demás mientras el te miraba con una sonrisa, pensaste en preparar algún café o te como el lo hizo aquella vez pero antes de que pudieras ir a prepararlo viste como saco de su sudadera unos pequeños cafés que probablemente había comprado antes de ir contigo.

-Toma, te he visto comprarlo en la tienda así que pensé que te gustaría -dijo extendiéndote la bebida para que lo tomaras, estabas un poco sorprendida de que se hubiera dado cuenta de ese detalle pero no te molesto, al contrario, hizo latir tu corazón frenéticamente.

El ambiente era tan tranquilo en ese momento, puede que no hablaran pero cuando sus miradas se cruzaban entendías que las palabras en ese momento sobraban. Escuchaste como un cascabel sonó desde tu cuarto y tu gatito hizo acto de presencia, al ver que ya no estabas sola en la estancia, al contrario de gruñirle a Ben, como hacia normalmente con los extraños que se sentaban en su lugar de la mesa, simplemente dio un salto y se acomodo en sus piernas, sorprendiendo al masculino.

-¿Eso significa que te caigo bien? -pregunto recibiendo un ronroneo por parte del minino dejándose ser, probablemente Artemis sabía algo que ustedes no notaban o se negaban a decir en voz alta.

-Considérate afortunado, no suele gustarle que se sienten en su lugar, no importa si es la mesa o el sillón -dices soltando una risita al ver como duda en si acariciarlo o no, finalmente haciéndolo lentamente para no asustarlo.

-¿Ha estado contigo desde que vives aquí? -pregunto.

-Si, fue un regalo de mis padres cuando empece la universidad, y de verdad que me ayuda mucho -mencionas terminando de masticar la ultima de las galletas -Es gracias a el que no me desvelo tanto por las noches, ademas soy un poco miedosa así que el es el guardián de la casa

-¿Miedosa? ¿en que sentido? -pregunta intrigado

-Digamos que si intento ver alguna película de terror no puedo dormir muy bien -mencionas tratando de no darle demasiada importancia al tema, aunque creíste que se burlaría por ese detalle te sorprendió cuando volvió a hablar.

-Entonces que bueno que tienes a Artemis, en realidad tampoco soy fan de ese genero pero las soporto aunque al final me este muriendo de miedo

-¿Enserio? Y yo que creí que te gustaban de ese estilo

-No mucho, solo las veo de vece en cuando pero para disfrutarla o así ni hablar

-Entonces si vas al cine a ver una película ¿de que estilo ves? -preguntas curiosa, en parte porque tenias un poco la idea de invitarlo a ver alguna vez.

-Mmm -dijo pensando un poco antes de hablar -Creo que o alguna de acción o alguna de romance, mientras no romanticen tanto las decisiones

-¿Y eso?

-Digamos que he visto algunas que según son de "amor", pero la protagonista es ciega y solo ve lo bueno, no hay comunicación y todo se resuelve o a base de mentiras o por algún otro personaje

-Cierto, por eso a veces prefiero las de los 2000s, hay algunas joyitas que se estrenaron dentro de esos años y actualmente son mis favoritas -mencionas con una sonrisa, puedes ver de reojo como comienza a mover su pierna en señal de nerviosismo, como si quisiera preguntar algo.

-Entonces... Si te invitara a una cita, ¿querrías ver alguna película conmigo? -pregunta nervioso, pero mirándote directamente, no sabes que decir pero el continua hablando -Sé que hemos pasado mucho tiempo juntos últimamente, y realmente lo disfruto. Así que... estaba preguntándome si te gustaría ir al cine a ver una película y cenar conmigo este fin de semana. No como vecinos... sino como una cita.

Lo miraste sorprendida cuando termino, pero en tu rostro solo apareció una sonrisa suave, la misma que siempre lo ponía de nervios pero que hacia que estuviera aun mas seguro de querer estar contigo.

-Me encantaría - respondiste sonriendo. Ben al escucharte, sonrió también aliviado y emocionado. Ese día la calidez que ambos sintieron se incremento aun mas, con la expectativa de que esa cita definitivamente cambiaría el rumbo de su relación.

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Este capitulo debía salir el día de ayer, pero por problemas técnicos se subió hoy ໒꒰ྀིっ˕ -｡꒱ྀི১, espero lo disfruten 🫶🏻