♡ᴡɪᴛʜ ʏᴏᴜ...ɪɴ ᴀɴᴏᴛʜᴇʀ ʟɪғᴇ°࿐

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En una tarde de primavera. La biblioteca de la ciudad estaba llena de vida, a pesar de la calma que reina en su interior. Al entrar, el olor a libros antiguos y café recién hecho se mezcla con el susurro de páginas pasando y murmullos bajos.

La bibliotecaria, una mujer de mediana edad con gafas redondas, camina entre las estanterías, devolviendo libros a sus lugares y ayudando a los visitantes a encontrar lo que buscan. Te agradaba conversar con ella de vece en cuando, pues antes de trabajar allí había viajado por muchos países y conocido a personas importantes, sus historias te llenaban de alegría y siempre te brindaba los mejores consejos.

Cerca de las ventanas, un anciano con una chaqueta de lana lee el periódico, mientras que en la sección infantil, un cuentacuentos mantiene a un grupo de niños pequeños absortos en una historia sobre dragones y aventuras. La atmosfera era tan tranquila y acogedora que era imposible no sentirse en paz y tranquilo.

En la zona de lectura silenciosa, te sumergías en una novela, con tus auriculares puestos y una taza de café a tú lado. Habías llegado allí hace al menos una hora con la misión de ir a recoger unos libros para un trabajo, pero no pudiste evitar detenerte momentáneamente a leer un poco.

Estabas tan sumergida en tu libro que no notaste que alguien mas había entrado a la estancia, camino a paso lento hacia a ti y no fue hasta que estuvo enfrente de ti que alzaste la vista para encontrarte con un enorme ramo de flores. Parpadeaste algo confusa, quitándote tus audífonos para por fin escuchar la voz de tu novio, Ben.

- Lamento si te interrumpí linda- menciono aun sosteniendo el ramo enfrente de ti- Pero vine a hacerte la entrega de este ramo- en cuanto dijo eso ultimo inicito a que lo tomaras, lo cual hiciste con delicadeza para no aplastar las bellas flores que sobresalían y que hacían que tus ojos brillaran de la emoción al contemplarlas.

El ramo constaba de distintas flores, todas de tu color favorito, sobresalían las rosas junto a los tulipanes, pero podías notar las pequeñas margaritas blancas entré cada flor, había al menos tres flores lilis grandes esparcidas por el ramo junto a las demás formando un corazón y en el centro había un peluche de un oso color cafe claro al lado de unas cuantas camelias blancas.

Cuando saliste de tu trance al admirar las flores volteaste a ver a Ben para luego hablar.

- Son muy lindas Ben, pero por qué me las trajiste? Hoy no es ningún día especial o si?- preguntaste con duda.

Él te dedico una sonrisa y hablo- Te las traje porque si, por el simple hecho de estar conmigo todos los días son especiales para mi, ademas se que te gustan mucho los ramos. No necesitamos celebrar algo para darte flores.

Tu lo miraste ahora asombrada, no creíste que te llevaría ese detalle cuando solo lo habías mencionado unas cuantas veces en conversaciones causales. Una sonrisa se extendió en ti y no pudiste evitar levantarte a abrazarlo con fuerza, no había palabras que describiera como te sentías.

Él te devolvió el abrazo pasando sus brazos por tu cintura y quedándose junto disfrutando de tu felicidad.

Al separarse te ayudo a sostener el ramo mientras guardabas tus cosas para irse a casa, en el camino a la salida no pudiste evitar sentir las miradas de todos los presentes asombrados al ver el enorme ramo que cargabas. La bibliotecaria solo te sonrió y le hizo un ademan a Ben de que lo había hecho bien.

Era difícil levantar el rostro sin sonrojarte pero aun así sonreías orgullosa al cruzar la salida y al pasar por las calles, con tu corazón latiendo desbocado pero muy feliz y pleno.

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La camelia blanca representa el amor puro y para toda la vida, y, por su color blanco, inocencia, pureza y humildad.

Las margaritas son flores que representan la belleza y la inocencia. Así como admirar la belleza de otra persona.

Los tulipanes suelen considerarse una alegoría del amor. Es un símbolo del amante perfecto, la pasión y el romanticismo. El tulipán es un símbolo de amor sincero.

Las lilis varían su significado dependiendo el color pero normalmente evocan a la pureza, la belleza, la prosperidad y la alegría.

No incluyo el de las rosas puesto que también varían según el color pero la mayoría hace alusión al amor.