CAPITULO 105: EL SEGUNDO EVENTO PARTE 4

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CAPITULO 105: EL SEGUNDO EVENTO PARTE 4

Xu Wudao quien miraba este espectáculo puso una sonrisa.

"Esto puede ser bueno, pero a la vez hay que tener cuidado" – Xu Wudao empezó a pensar en los pros y los contras sobre lo que el anciano Sao acababa de decir.

Fue algo impactante que alguien reconociera la espada de madera, sin embargo, los ancianos de las 99 familias del Dao eran muy antiguos por lo cual muchos debieron conocer a la secta del Emperador de la montaña celestial.

Quienes escucharon el nombre que dijo el anciano Sao, no entendieron a lo que se refería, incluso los 3 principales discípulos de las 99 familias.

Para ellos, era la primera vez que escucharon ese nombre, pero al ver que el anciano mostro tal respeto. Muchos empezaron a suponer cosas.

"Ya veo" – Fan Dao miro a Adrián con diferentes ojos, mientras su aura crecía aún más que antes.

"Esta aura la he sentido antes" – Kura Ise fue la siguiente en sospechar luego de sentir el aura de la espada de madera.

Sao Jan no dijo ninguna palabra, pero si regreso a dar una mirada a Adrián.

Todas estas tres figuras miraron a Adrián, con una fuerza completa. Al ver su pelea contra Ted Sao, ninguno puso a Adrián por debajo de ellos, incluso la pusieron a su par, al ver que era solo un humilde ser de la condensación del Qi, podían suponer porque el anciano Sao se mostró tan respetuoso.

Adrián regreso a donde Misa, quien ya había llegado a la meta final, nadie la había detenido.

Adrián hizo todo lo posible para no parecer tan herido, después de todo, parecía que había conseguido que otros le dieran una segunda mirada. El ser de cristal regreso victorioso a su sombra, con solo tres anillos de almacenamiento, parecía que se le habían escapado dos seres del establecimiento de la fundación.

Cuando regreso cerca de Misa, se sentó en el suelo, mientras hacia el esfuerzo para que los huesos de su cuerpo no se rompieran.

Realmente si desataba un golpe más de la espada de madera, su cuerpo se partiría.

Mientras pensaba en todo esto, Bai Guoer se acercó a él.

"¿Hermano mayor estas bien?" – Bai Guoer se sentó cerca de su hermano mayor, Adrián abrió un rato los ojos para asentir, mientras usaba toda la fuerza de su cuerpo para recuperarse.

Cuando vio que su hermano asintió, Bai Guoer sintió un poco de dolor en su corazón, podía notar que su hermano mayor estaba herido.

Pero aun así se esforzaba para tranquilizarla. Ella se sentó a su lado para protegerlo mientras él se recuperaba. Adrián la observo por el rabillo de su ojo, solo puso una sonrisa. A veces la compañía no era mala.

Todos también aprovecharon para recuperarse, solo Xu Wudao empezó a observar esta puerta circular gigantesca. Estaba hecha de piedra antigua, y se necesitaba cuatro cristales, los cuales debían colocarse en su centro para que pudieran abrirse.

Realmente era un sistema algo sencillo, pero una vez que estaba puerta se abriera significaría que entrarían al tramo final de esta tumba.

Sin embargo, para Misa este era el final de su camino, ella mismo sabía que si decidía continuar, entonces estaría compitiendo contra los 3 lideres principales, su objetivo se había logrado, aunque deseaba llegar aún más lejos, su fuerza no lo permitía, a la vez que todos sus subordinados estaban agotados.

Por lo cual, ella mismo decidió que este sería el final de su recorrido.

Xu Wudao entendía ese pensamiento, pero regreso su mirada hacia Adrián.

"Ya es hora hermano menor" – Xu Wudao hablo por su sentido divino.

Adrián entendía a que se refería Xu Wudao. Por lo cual dio un suspiro.

"¿Cómo vas a hacerlo?" – Adrián pregunto, tenía muchas dudas, de lo que Xu Wudao estaba por hacer, después de todo, al saber que un anciano podía aparecer en cualquier momento, era algo que él no podía detener.

"Todo lo que debes saber, es que detrás de esta puerta está la verdadera tumba, una vez que se abra, aprovecharemos ese momento para entrar, he puesto ya varios sellos en esta puerta, por lo cual puedo ganar algo de tiempo antes de que se den cuenta, pero no durara mucho"

"¿Puedo preguntarte algo hermano mayor Xu Wudao?"

"¿Qué es?"

"¿Vale la pena?" – Cuando Adrián hizo esta pregunta, Xu Wudao se rio un poco.

"Todos tenemos un camino en nuestra vida, mi camino es el buscar tesoros más allá de la comprensión, descubrir lugares que nadie ha visto, y explorar incluso las profundidades de la oscuridad ¡Esa es mi obsesión y mi Dao! ¡Si lo vale o no, mi corazón quiere conseguirlo de cualquier manera! ¡Ese es mi camino a seguir!"

Las palabras del hermano mayor Xu Wudao estaban lleno de obsesión a la vez de un egoísmo extremo, como si dijera que no le importara cuanto estuviera dispuesto a sacrificar, aun así, lo haría, porque su corazón le dictaba que necesitaba explorar todo este mundo, incluso si todo a su alrededor empezara a morir.

Quizás esa era la razón por lo cual sabía mucho sobre los distintos continentes a la vez que su profundo conocimiento, sin embargo, Xu Wudao era más que eso.

"¡Tú también debes tener una obsesión tan grande como un mundo! ¡¿Verdad hermano mayor Adrián?¡"

Adrián simplemente asintió, realmente Xu Wudao era raro. Pero no podía encontrar ninguna mentira en sus palabras, todos eran más honestas que una nube en el cielo.

Él también tenía su obsesión, la cual era eliminar a esa cara demoniaca en el cielo.

Así que lo comprendía.

Por lo cual sus ojos también se abrieron y su aura volvió a resurgir.

"¡Mi obsesión es un cielo azul, ya no más muertes, ya no más maldiciones...ya no más sufrimiento, quiero algún día...!" – Adrián también se emociono mucho cuando nombro su Dao, hablaba de las vidas que necesitaba transformar con su mascara celestial. Y a la vez, que quería revivir a sus padres.

Levanto su dedo y señalo al cielo, Xu Wudao observo a donde señalaba Adrián. Pero de pronto sus palabras se llenaron de una poderosa fluctuación.

"...Quiero un día destruir a ese Rostro Demoniaco!" – Esta era su obsesión más grande, por lo cual no se permitía morir, por lo cual había sobrevivido hasta el día de hoy, no podía permitir que ese rostro demoniaco existiera al mismo tiempo que el mismo.

No podía y no lo dejaría, usaría toda su fuerza para algún día destruirlo. Este era el camino que Adrián estaba siguiendo.

Cuando Xu Wudao escucho estas palabras, primero se quedó callado, luego se empezó a reír pavorosamente, nunca pensó que se encontraría a alguien más enfermo que él.

Parecía que ambos tenían algo en común, ahora que lo pensaba quizás esa era la razón por la que Adrián le caía también, era un par de locos.

"¡Entonces!"

"¡Comencemos!"

En ese momento Xu Wudao quien tenía una mirada perdida, de pronto se puso serio, y observo esta puerta por un instante antes de tocarla con su mano. Parecía un acto desinteresado, y de lo más normal, sin embargo, si alguien viera de cerca, podría ver como finas serpientes se balanceaban por toda su mano.  

UN ETERNO FINALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora