UN ETERNO FINAL

CAPITULO 141: VERDE

CAPITULO 141: VERDE

"Ese hijo de.....buagh" – El primero en caer al suelo fue Xu Wudao, mucha sangre de color negruzco salió de su boca, tras haber usado su mano esquelética de manera desquiciada.

El brazo esquelético se desvaneció y volvió a su cuerpo.

Habían perdido, incluso después de haber usado toda su fuerza en conjunto.

Esto le molestaba, le daba ganas de sacar algunos tesoros que tenía en su mano. Pero no lo hizo, logro controlarse.

Su Ming al ver que había salido ileso de tal golpe, también suspiro, sabía que el maestro de Sac Do debía haberlo protegido de alguna forma.

Su círculo mágico en el cielo se desvaneció, voto un poco más de sangre, y sus espectros volvieron a su sombra.

Había usado toda la fuerza que tenía, por lo cual era poco probable ganar contra alguien de la formación del núcleo.

Xu Wudao estaba muy enojado, sin embargo, reprimió todos los impulsos que tenia de mostrar algún tesoro.

Adrián recogió su espada de madera. Mientras dentro de su sombra.

Kiara observaba cada movimiento de Sac Do, si trataba de atacarlo no dudaría en mostrarse.

Su intención podía sentirse por toda su sombra. Adrián le quería dar alguna orden para que se calmara.

Pero, viendo la situación, estuvo a la expectativa.

Prácticamente no les quedaba energía alguna, y si podían realizar otro ataque, perderían mucho de su fuerza, incluso había la posibilidad de que dañaran su cultivo.

Mientras los tres se apoyaban para levantarse.

Sac Do levanto su mano.

"¡Ahí viene!" – Dijo Xu Wudao mientras su mano se posaba en su anillo, estaba preparado para desatar un horror si Sac Do se atrevía a atacar.

Su Ming también uso toda su necromancia para envolverlos en su sombra. Como un escudo protector.

Adrián en cambio, estaba a la expectativa. De ser posible no quería usar a Kiara.

Sac Do miro a este grupo de niños frente suyo. Y también miro a los ojos a Su Ming, el representante de la nueva generación, quien odiaba un sistema tan corrupto.

(Confiare en ti) – Fue un mensaje que le envió por medio de su sentido divino a Su Ming.

Su Ming se sorprendió de este mensaje repentino. Y al siguiente momento Sac Do hablo.

"Esto es muy problemático, me rindo" – Fue lo único que dijo Sac Do antes de bajar la mano.

E irse de ese lugar.

"¿Eh?"

"¿Qué dijo?"

"Enserio se rindió"

"¿Qué...?"

Cuando esas palabras salieron de Sac Do, múltiples voces del escenario, como de los discípulos presentes saltaron con gran sorpresa.

Incluso los ancianos entrecerraron los ojos, mientras no se atrevían a decir nada, sabían quién era el maestro de Sac Do, por lo cual a lo mucho solo podía pedir explicaciones.

El Anciano Zhuo entendía un poco a Sac Do, para el esto solo fue un juego, pero al final le demostraron lo dispuestos que estaban para ganar.

El Anciano Zhuo no podía decir mucho de sus pensamientos frente a estos ancianos codiciosos.