UN ETERNO FINAL

CAPITULO 102: EL SEGUNDO EVENTO

CAPITULO 102: EL SEGUNDO EVENTO

Adrián no había investigado el hechizo "VIDA"

Era una palabra que puede sonar tan simple.

Pero en sus manos todo el mundo podría engullirse.

Era el segundo hechizo que el Diablo Celestial le había mostrado.

Pero que aún no lo había usado. El Diablo Celestial puede mostrar la verdad al mundo, puede controlarla, y puede engullirla.

Adrián no sabía que pasaría si el lanzaba este tipo de hechizo. Era algo que siempre había querido intentar, pero con muchos ojos mirándolo, no se atrevía. A menos de que fuera una situación de vida o muerte.

Su mascara del Diablo Celestial deseaba estas almas malditas, estos seres malditos no se acercaban a Adrián, era como una presencia noble antes estos seres. Alguien que no debía ser tocado, visto como una Deidad.

Cuando miro a todas las almas dentro de este cristal, todas las almas se detuvieron de su estado caótico y se reformaron mostrando sus formas cuanto estaban vivos.

Se postraron mostrando completa sumisión.

Adrián los miro y ellos no se atrevieron a mirarlo.

No conocía que efectos tendría en ellos, todas las almas debían reunirse, a la vez que Xu Wudao planeaba destruir esa puerta, con tantas almas malditas, Adrián seguía aun pensando en su hechizo VIDA.

De pronto mientras Misa manejaba su cubo Prístino, de varias zonas de esta tumba aparecieron cientos de seres máximos de la condensación del Qi.

Todos parecían que estaban esperando en este tramo para poder detenerla.

"¡No dejen que pase!"

"¡Si la detenemos seremos recompensados!"

Gritaron estos humanos, quienes deseaban las recompensas más que nada.

Varios de estos seres lanzaron puñetazos, otros alzaron su espada desatando varios haces de luces, algunos hicieron crecer el tamaño de su cuerpo, además de que aparecieron varios tesoros protectores, e incluso un gran escudo con 5 refinamientos.

Cinco refinamientos le daban a cualquier tesoro a poseer el aura del nivel máximo de la condensación del Qi.

Los tesoros de la condensación del Qi eran conocidos como tesoros mundanos por los demás, pero cuando este escudo se mostró, un aura y la figura de un gigante apareció.

El gigante grito mientras su mano se extendió para detener a Misa.

Adrián esta vez no dijo ninguna palabra, estos seres no merecían su atención, por lo cual decidió seguir pensando en su hechizo.

Al ver que Adrián no iba a actuar al menos que la situación se vuelva desesperante.

Misa ordeno a Ana, Carlos y a San Simons actuar, Bai Guoer sabía que su hermano tenía que descansar por lo cual ella también saco dos cuchillos de su bolsa de almacenamiento.

Ana convoco a un lobo quien aulló y lanzo ondas sonoras que podían destruir los oídos de cualquiera.

Carlos saco una espada reluciente y lanzo varios haces de luz hacia los ataques que se acercaban.

San Simons incremento la masa muscular de su cuerpo mientras se lanzaba como un berserker hacia los seres máximos de la condensación del Qi.

Bai Guoer desapareció con un paso y ataco como un fantasma a varios de los puntos débiles de estos seres.