Capítulo 40

425 67 79
                                    

La reunión siguió su curso, después de tocar dos melodías, afortunadamente Jin Guangshan ya no le insistió más a Weiying que tocara el guqin, solo le indicó que practicara más y podría aprovechar la presencia de Wangji para aprender, a lo que el Segundo Jade respondió que estaría encantado de hacerlo.

Charlaron más y siguieron bebiendo té hasta que se hizo de noche y llegó la hora de irse. Al despedirse de Yanli, Weiying la abrazó como siempre, al lado de ella estaba Lan Zhan y cuando se dispuso a despedirse de él casi lo abraza también, pero se dio cuenta a tiempo y se detuvo.

—Oh...Buenas noches, Hanguang-Jun —dijo con una reverencia y algo apenado.

Lan Zhan se había emocionado al ver al Loto con los brazos abiertos dirigiéndose hacia él y admitió que se sentía decepcionado de no haber sido abrazado también.

—Lo acompaño a la salida —dijo el Jade.

Weiying se sorprendió por tal gesto y caminaron juntos hacia la salida. Delante de ellos iban Guangyao y Huaisang.

—¿Su hermano no vendrá? —preguntó Weiying.

—No.

—¿Planea quedarse muchos días aquí?

—Al menos estaré una semana. ¿Y usted?

—Yo también. Gracias por acompañarme.

—Nos vemos mañana. Que tenga buena noche —Lan Zhan hizo una reverencia y volvió a entrar a la residencia principal donde se estaba hospedando. Evitó mirar hacia atrás porque si se encontraba con esos ojos grises de nuevo, no podría controlar sus ganas de abrazar a Weiying y decirle cuánto lo había extrañado.

"Nos vemos mañana", esas palabras se quedaron resonando en la cabeza de Weiying. Se quedó viendo como Lan Zhan volvía a entrar a la residencia y desaparecía.

—Amm, cof cof —Huaisang tosió para poder captar la atención de su amigo quien se había quedado hipnotizado viendo al Jade. Weiying volteó a verlo con confusión— ¿Nos vamos?

—¡Ah, sí! Ya voy —corrió hacia la pareja— Oigan, ¿por qué no me habían dicho que Lan Zhan también estaría aquí?

—Amm, quizás olvidé mencionarlo —fingió Huaisang.

—Con tantas cosas se me fue decirte —dijo Guangyao fingiendo también. Miró a su esposo y ambos se guiñaron en ojo con complicidad.

Llegaron a la casa y Weiying se despidió de la pareja.

—¡Buenas noches! Qué fortuna que aquí no tengo que levantarme a las cinco de la mañana. ¿Qué hará Lan Zhan si él se levanta a las cinco y aquí las actividades empiezan a las siete?

Guangyao y Huaisang se rieron disimuladamente al ver como el Loto solo pensaba en el Jade, pero éste era bastante terco y tonto para aceptar que estaba enamorado de él.

—Es una buena pregunta —dijo Huaisang— Podrías acompañarlo. Estuviste mucho tiempo en la Residencia Baihua, seguramente no te costará acostumbrartre de nuevo a levantarte a las cinco de la mañana para estar con él.

Weiying lanzó una carcajada— ¿Yo, levantarte temprano por Lan Zhan? ¡No gracias! ¡Ya me voy!

—Como tu digas. Que duermas bien.

Huaisang esperó a que el Loto desapareciera para decir lo siguiente:

—Ya quiero que se case con Wangji y ver como se levanta a las cinco de la mañana por el resto de su vida.

Guangyao rió ante tal comentario y pasó su brazo por detrás de los hombros de Huaisang— Ven, te acompaño a tu habitación.

No dormían juntos, al casarse sin sentimientos de por medio, por supuesto que dormir juntos nunca había sido una opción. Aunque dadas las circunstancias, lo más probable es que eso cambiaría muy pronto.

Orgullo y Prejuicio. Versión MDZSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora