50. Formaggi.

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50. Formaggi.


REGINA


Estamos en la última semana de agosto y justo se cumplen dos años exactos desde que ocurrió el desfalco. Es increíble cómo sigo resolviendo los vestigios. Pese a la rabia que me embarga, admito que el suceso me llevó a conocer a Alonso pero, en particular, me convirtió en alguien más fuerte y memorable.

Me recordarán como la reina que no pudo ser derrotada. Aquella que resurgió de las cenizas. Tardé más de año y medio en recuperarme del escándalo por arresto y, con cada día que pasa, se hace más notable que mi reputación ha crecido. Mi nombre aparece de forma positiva en revistas, televisión, sitios web y redes sociales.

Me alivia que Charlotte no efectúe movimientos relevantes contra Novacell International más allá de difamar e intentar quitarnos clientes. Disolver la alianza no figuró pérdidas significativas gracias al apoyo Goldskin, el aumento de clientes por las victorias en las exposiciones y los pactos con el príncipe Hassam.

Haber dormido tres horas no impide que me levante antes que cualquiera. Aunque ayer discutimos y me hizo enfadar, beso la mejilla de Alonso antes de salir de nuestra habitación. Paso por la de Ryan, beso su frente y acaricio la cabeza del león acurrucado en sus pies. Decidió participar en las carreras estadales y se prepara desde ya para mantener una buena posición en las locales.

Voy directo a torre Azzarelli, donde abordo un helicóptero que me llevará a Boston. Mashiro me acompaña hasta la suite del hotel en donde Michelle ya se encuentra desayunando. Pone expresión amarga y resentida apenas me ve. Es tan inmadura que no puede separar su derrota de los negocios. Evito reír o burlarme y adopto una actitud profesional. Ni siquiera tomo asiento porque esto será rápido.

—Tienes tratos sólidos con la familia Keegan —comento acercándome.

Michelle frunce el ceño y se torna recelosa.

—Y me costó mucho conseguirlos. No pienso romper mi relación comercial sólo porque tú lo hiciste. —Aparta su plato y cruza los dedos sobre la mesa, enderezando la espalda—. Mi alianza contigo no es pública, no hay conflicto de intereses.

—Pero me debes. Tu amiguita está viva gracias a mí. —Me fulmina con la mirada. Sonrío y le entrego un IPad que saco de mi bolso—. No te alejarás de los Keegan o irás en su contra. Quiero que seas neutral y ejecutes un par de movimientos que nos beneficiarán a largo plazo.

Su rostro se contrae mientras lee la información.

—Esto le hará un daño de cien millones a mi empresa —replica.

—Que regresarán multiplicados en los meses posteriores.

—De una forma que no podré explicarle a mi junta directiva.

Encojo los hombros.

—Sé creativa y arréglatelas.

—Me estás pidiendo que viole la ley, Regina.

—¿Crees que asaltar un casino fue legal?

—Fue por justicia.

—Esta es la misma causa

—Pero más cruel.

—Tengo razones para ser una hija de puta. Lee todo. K-corp usó esas empresas para asociarse contigo y todas están enlazadas con una red que fue administrada por Emmett O'Conner para lavar dinero ilícito. Estamos hablando de la misma gente involucrada en el desfalco a mis fondos y el incendio en Alphagine —revelo y sus ojos se salen de órbita—. Se cuidan las espaldas usando chivos expiatorios. Lacroix está preparando una intervención, auditorías y arrestos masivos.

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⏰ Última actualización: Sep 10 ⏰

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Resiliente Fulgor ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora