Storm - Jenlisa

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Pov Lisa

Me encontraba en mi habitación decidiendo que ponerme esta noche en la cita.

-Espero que la suertuda imbécil de Jennie te trate como te mereces porque yo su amiga no soy y estás más buena que la cerveza, tu sabes que yo si te doy.-me dice Camila acostada en mi cama y yo suelto una carcajada.

-¿Puedes creer que no se follo aller a Jennie? con lo sexy que está, no se como le hizo porque yo desde que la vi en esa película dudo de mi heterosexualidad.-comenta Jisoo avanicandose como si hiciera calor y yo la fulmino con mi mirada.

-Te he explicado miles de veces que no quiero apresurar las cosas, hoy vamos a nuestra primera cita oficial.-sonrío en grande orgullosa.

-Por dioss que asco me dass con esa sonrisa de enamorada, lo que tienes que hacer es follarte a Jennie ya que no me follaste a mi, seguro ya ni te acuerdas de como hacerlo bien, llevas tanto tiempo sin acción.-ambas se ríen estando de acuerdo.

-No todo es el sexo y estoy segura de que Jennie piensa igual, vamos a tener una gran cita y después cada una vuelve a su casa sin nada más. No es tan difícil.-ellas se miran entre sí y sueltan una carcajada ruidosa.

-Créeme si Jennie lleva el mismo tiempo que tu sin nada de nada, esa te salta encima esta noche como una fiera.

Siguen con sus comentarios y burlas entre ellas, y opto por ignorarlas y al final me decido por un bodycon dress blanco corto.

-Estas hermosa ese vestido te queda estupendo.-elogian ambas.

-Gracias voy a buscar a Jennie nos vemos luego.-camino hasta la salida.

-Seguro que si, las dos te vamos a estar esperando justo aquí hasta que regreses para contarnos los detalles y especialmente los sucios.-me grita Camila y ruedo los ojos.

Diez minutos después llego en el coche a casa de Jennie y toco la puerta.

-Hola.-saluda abriendo la puerta de inmediato como si llevara esperando un rato.

Me olvido de respirar al verla con ese vestido negro de tirantes tan corto y la espalda descubierta.

Me acerco y le pongo una mano en la cintura acercandola de un tirón y besándola sin previo aviso.

Mordió mi labio inferior consiguiendo un gemido de mi parte pero también fue suficiente para que mi cerebro decidiera regresar al cuartel.

Si seguía sabía que no pararía y quería mucho más que esto con ella.

-Estas deslumbrante.-susurro sobre sus labios y ella me da un pico sonriendo en medio de el.

-Tu si que estas deslumbrante y muy sexy.-pasa su dedo por mi cuello acariciándome y sonrío.

-Vámonos de una ves.

Estaba muy nerviosa ¿y si Jennie no la pasaba bien?.

¿Y si no estaba a la altura de las citas que había tenido con sus parejas anteriores?.

-Te amo.-ella dice y la miro sin comprender.

-¿A que viene eso?.

-A que te amo y me gusta que lo sepas.-me da una de sus sonrisas que me estremecen por completo y solo con eso logra que un poco de mis nervios se alejen.

Caminamos una al lado de la otra hacia la entrada de un restaurante que escogí especialmente para nosotras y miro mis manos preguntándome si debería tomar la de Jennie.

¿Le molestara? tal ves lo hace.

Odio todas estas malditas inseguridades que tengo.

Ella deposita un beso en mi mano y entrelaza nuestros dedos como si leyera mis pensamientos y así entramos finalmente.

-Buenas la mesa reservada para Lalisa Manobal.-pregunto y la mujer nos lleva hacia ella.

Cuando llegamos hay dos asientos con la botella de champagne en la mesa y decorado alrededor con rosas rojas, justo como lo pedí.

Tomamos asiento a una distancia corta con nuestros muslos casi rosandose y ella sonríe burlona.

-Eres tan cursi y dios se supone que yo debería de odiar estas cosas, pero mi corazón esta latiendo tan fuerte y no puedo parar de sonreír me siento idiota.-dice entre risas.

-Yo me gano el papel mayor de idiota que fui la que hizo esto.-ella se ríe todavía más haciéndome reír a mi.

-Es cierto pero me encanta mucho, tu me encantas muchismo.

-Lo se.-sonrio arrogante y ella me gira la cabeza y me besa.

Su boca tomo la mia con decisión y necesidad, roza su lengua con mi labio y le concedi la entrada de inmediato, con su lengua danzando en torno a la mía con apetito.

Mis manos no tardaron en acariciar su estómago subiendo hasta llegar a su cuello, buscando cubrir con desesperación la apabullante necesidad que me invadía desde dentro y se extendía por cada una de mis extremidades de tocarla.

Estábamos en un espacio bastante privado porque no sabía si Jennie quería que alguien nos reconociera, y en este momento lo agradeci porque hubiéramos dado un buen espectáculo que no hubiera tardado en salir en todos los medios.

Succionó mi labio inferior y después volvió a meter su lengua profundamente haciendome gemir.

-Jen.-menciono su nombre para que se detenga.

-No traigo bragas y estoy tan mojada Lisa.-toma mi mano adentrándola bajo su vestido.

Me va a volver loca.

Jennie esta tan mojada que estoy segura que si se pone de pie la humedad le correría por los muslos.

Quiero abrir sus piernas y enterrar mi rostro en ellas.

Maldita seas Jennie Kim.

Lisa por favor respira concentrate, no caigas en su juego.

Jennie toma mi mano pasando mis dedos por su coño sintiendo toda su humedad.

-Imagina tus dedos entrando en mi y mis gemidos repitiendo tu nombre sin parar mientras me follas.-susurra en mi oído y saco mi mano rápidamente.

-No lo vas a lograr Jennie.-le digo con la mandíbula apretada y ella sonríe con suficiencia.

-Lo veremos al final de la noche.-toma uno de mis dedos que tenía rastros de su humedad y lo chupa mirándome fijamente.

Madre santísima siento que me puedo correr con esta imagen.