Capricho

0.16

Ｃａｐíｔｕｌｏ  16.

Pase toda la noche en vela. Atlas no se comunico conmigo en nada y para mi fue algo bueno. Me mantuve leyendo documentos y esperar que cumpla sus amenazas. Salgo de casa por fin ya que compre unas cajas especiales para guardar cosas. Me llegan en un camión. Pagué todo. Volví a dentro de casa y seguí para guardar las cosas de mas valor. Estaba todo organizado y guardado. Solo faltaba donde ocultarlo. Estaba frustrada viendo toda la casa. Me quedé sentada un pasillo. Escuche paso a fuera de casa. Me acercó y vi mamá. Ella estaba rociando algo por todos lados. Salgo de casa para lanzarme. Forcejeos y golpes. Mamá me dio la golpiza de mi vida. Maldito palo. Me levanto adolorida. Ella al verme se asusta pero yo sentía mucho más dolor solo por ser ella que me hace daño. Sale corriendo y yo sentía la sangre caer de mi cabeza. Me afirmó a una pared. Caigo de rodillas.

—¿Qué debo hacer?. —Pregunto a la nada con un nudo en la garganta.

Abrí la llave del agua y mojo todo. Me quedé parada bastante tiempo para que la gasolina que vertió mi mamá pueda volverse inútil al mezclarse con agua. Momentos después estuve curándome heridas. Me faltaban mucho más gasas y parches. Camino para llegar al supermercado. Al lado de este estaba una farmacia. Tomé una canasta. Lo llene de artículos que podrían ayudarme. Llego a la caja y pago todo. Ellos me miraban con temor. Me llevé mis compras caminando algo cansada. Un auto se detiene frente a mi y vi a Sasha. Ruedo los ojos.

—¿Qué mierda quieres?. —Digo molesta.

—No me sorprendería que aburrieras a Atlas. Por estúpida te paso. —Se burla.

—Te diría que si, pero mande a la mierda a la maraca que te dijo donde esta Atlas y al mismo. Quien me golpeó fue la que me parió así que no me sorprende para nada. —Le digo seria.

Me alejó de ella y del auto. Camine hasta llegar a casa. Al entrar fui directo a hacerme curaciones por mi misma. Bufo molesta. Esperaba sanar antes de navidad. Me dedique a mover cajas por todos lados. Al final acabe metiendo las cajas un cuarto con una ventana muy pequeña. Los muebles los acomodó de forma en que si queman la casa sea lo primero en muebles en quemarse. Me dedique todo el día aquí. Compre de comer y todo. Mi celular vibra y me acercó para ver. Era Atlas, pedía volver a casa. Le dejo el visto y me fui a casa de el. Al llegar abrí la puerta con la llave que el me dio. Estaba Sasha sobre el y yo parpadeó. Atlas me mira y en segundos, Sasha salto a la chucha. Pobrecita.

—¡¿PERO QUE MIERDA?!.

Se veía horrorizado. Se me acerca con una mirada llena de emociones confusas lo más probable.

—La puta de Sasha creo que le dijo a todos que me golpeaste aún que es mentira. Mi mamá vino a quemar mi casa. —Digo haciendo pucheros.

Aparto sus manos cuando me quiere tocar.

—Karla dios mío, vamos al hospital.

—No quiero. Vine a cambiarme de ropa y llevarme un poco de ella. Me quedaré en mi casa.

—Te van a matar.

—¿Y?, que lo hagan, pero pude ver como le afecto verme ensangrentada.

Me cambiaba de ropa y me llevo un bolso con ropa. Me llevé mi cepillo de dientes y mi cepillo de cabello. Mientras llevo mi bolso vi a la puta de Sasha hablar por llamada. Ella al verme se ve incomoda y yo me río de ella. Atlas me seguía como loco. Toma mi mano.

—Tengo las manos limpias, lo juro, ahora vámonos.

—¿A dónde?.

—Karla la cláusula.

—La rompiste, te follaste a esa. —Digo para soltarme de Atlas.

Camino para salir de la casa. Atlas me quiere seguir pero se detiene. Me voy sola a casa. Ya dentro me atacan. Era mi hermana. Fue una pelea que realmente no me sentí orgullosa. Desde patadas hasta hacerla caer una y otra vez al suelo con llaves. La saque de la casa. Pero fue más de lo mismo al entrar. Se me olvidó que tengo familia homicida. ¿Cuándo pase a ser integrante a objeto de eliminación?. Le rompí los brazos a mis dos hermanos. Le rompí la cabeza a mi hermana mayor. Los cargo hasta afuera de casa. Estaba exhausta. Por segundos vi mi vida pasar por mis ojos. Mi mamá me lanzó un cuchillo que se clavo en la puerta de entrada. Los vecinos gritan que llamen a carabineros. Mis ojos se llenan de lágrimas. Detrás de mi me agarran. El brazo rodea mi cuello. Trato de librarme. El agarre es más fuerte. Miro arriba y era mi papá. Mis ojos llenos de lágrimas.