Cuando el mundo se vuelve nuevo - Wonhui

11. REVELACIONES Y RECONCILIACIONES

Durante las semanas siguientes, Junhui mantuvo su determinación de ayudar a Wonwoo. Cada día, tocaba la puerta y se esforzaba por mantener conversaciones que, a menudo, eran respondidas con monosílabos o miradas vacías. No obstante, Junhui no se dejaba disuadir; su paciencia y compromiso parecían no tener límites.

Sin embargo, ese día, algo cambió. Junhui, al llegar a la casa de Wonwoo, notó que la puerta no se abría. Tocó insistentemente, llamando y gritando, pero no hubo respuesta. La preocupación creció en su pecho; Wonwoo casi nunca salía de su casa, y mucho menos desde que había dejado de querer ver a sus amigos, sumado a la última situación que tuvieron en el parque.

Cuando Junhui se asomó por una ventana, su corazón dio un vuelco al ver la silla de ruedas vacía dentro del apartamento. Sin pensarlo dos veces, se subió por la reja, temiendo lo peor, pero no le importa si alguien llamaba a la policía, para acusarlo de ladrón. Cuando entró, el escenario que encontró lo dejó estupefacto y aterrado.

Wonwoo estaba tirado en el suelo, llorando y tratando de levantarse sin éxito. El suelo estaba frío y la situación, desesperante. Junhui, movido por la preocupación, corrió hacia él y lo abrazó con fuerza, instintivamente tratando de consolarlo.

Wonwoo, abrumado y avergonzado, se retorcía con incomodidad. No quería la lástima de Junhui, y se sentía humillado por la situación. Sin embargo, Junhui no se apartó; en lugar de eso, ayudó a Wonwoo a reincorporarse y a sentarse nuevamente en su silla de ruedas.

Wonwoo, con el rostro cubierto de lágrimas y enrojecido por la frustración, miró a Junhui con desdén. -Esto es lo que quiero decir cuando digo que soy un inútil -dijo con voz quebrada-. No puedo ni siquiera levantarme solo. Quiero que te vayas

Junhui, cansado de escuchar a Wonwoo hablar tan despectivamente sobre sí mismo, se exasperó. -¡Cállate! ¡Deja de hablar así de ti mismo! -le gritó, su voz resonando en la habitación.

El grito de Junhui, aunque lleno de furia, parecía despertar algo en Wonwoo. La intensidad de la voz de Junhui y la cercanía del abrazo provocaron una reacción inesperada. Wonwoo, a pesar de sus reservas, finalmente se entregó al abrazo, devolviéndolo con un agradecimiento implícito. La necesidad de contacto humano, aunque reprimida, era fuerte y evidente.

En medio del abrazo, la puerta se abrió con un golpe sordo, revelando a los amigos de Wonwoo. Habían venido una vez más, con la esperanza de disculparse y enmendar sus errores. La expresión de sorpresa en sus rostros se tornó en angustia al ver a Wonwoo y Junhui en esa postura.

Wonwoo levantó la vista, su expresión cambiando de sorpresa a furia. - Fuera de aquí.- no gritó pero su voz estaba cargada de ira-. No quiero verlos nunca más

Los amigos de Wonwoo, atónitos, intentaron acercarse. -Wonwoo, por favor, escúchanos. Queremos disculparnos de verdad, comportate, nos equivocamos pero nuestra amistad es más grande que eso-dijo Hoshi, con desesperación en su voz.

Junhui, sintiendo que la situación se estaba saliendo de control, se interpuso. -Déjalos hablar. Dales la oportunidad de disculparse -le pidió a Wonwoo, con un tono que mezclaba autoridad y comprensión.

Wonwoo, sin poder contener su furia, soltó palabras hirientes. -Por culpa de ustedes, he tenido el peor día de mi vida después del maldito accidente, no saben la vergüenza y la humillación por la que me hicieron pasar ese día, pueden ponerse a pensar como yo, ponerse en mi lugar. -La frase cortó el aire como un cuchillo, dejando una marca dolorosa en Junhui. La herida era profunda porque ese día que Wonwoo catalogaba como el peor había sido también el día en que Junhui se había acercado a él con esperanza.

Junhui se dio cuenta del impacto de las palabras en Wonwoo, notando la tristeza en la mirada del otro. Sin decir una palabra más, se excusó, sabiendo que había llegado al límite. -Voy a dejar que hables con tus amigos. -Y con una última mirada de tristeza, se dio la vuelta y salió, dejando el lugar para que Wonwoo pudiera procesar sus sentimientos.

Dentro del apartamento, los amigos de Wonwoo intentaron razonar con él. Después de una discusión larga y cargada de emociones, Wonwoo, aunque todavía resentido, finalmente aceptó sus disculpas. Sabía que sus amigos habían intentado ayudar, a pesar de sus errores, y que realmente sin ellos él no era nada, los necesitaba de vuelta, por ellos era capaz de dejar su coraza.

Cuando la calma comenzó a instalarse en el apartamento, Wonwoo miró el lugar vacío donde Junhui había estado.

La ausencia de Junhui dejaba un vacío que resonaba en su corazón. Aunque había perdonado a sus amigos, el hecho de que Junhui se hubiera ido sin haber logrado solucionar todo dejó una marca en su espíritu.

El día había terminado, pero el impacto de los eventos recientes aún pesaba sobre Wonwoo. Mientras se preparaba para ir a la cama, se dio cuenta de que las palabras de Junhui y el acto de preocupación sincera podrían ser el primer paso hacia una posible recuperación, a pesar de lo doloroso y complicado que había sido el proceso.