Cuando el mundo se vuelve nuevo - Wonhui

37. LA DECISIÓN DE WONWOO

La casa de Wonwoo se había convertido en un lugar de esfuerzo y esperanza renovada. Junhui había instalado diversos equipos para la terapia en casa, incluyendo barras de apoyo y una serie de ejercicios adaptados para fortalecer las piernas de Wonwoo. Quería seguir avanzando en casa de este, quería darle todo su apoyo incluso fuera de la clínica y aplicar todo lo que habia aprendido. Se tomaría el tiempo de ayudar a Wonwoo.

Cada mañana y tarde, los dos trabajaban juntos, enfrentándose a los retos y caídas con una determinación compartida.

En una de esas sesiones, Junhui observaba a Wonwoo con una mezcla de preocupación y admiración mientras este intentaba levantarse de una silla con la ayuda de las barras. La frustración era evidente en el rostro de Wonwoo, quien había caído al suelo una vez más.

—¡Vamos, Wonwoo! —animó Junhui, acercándose rápidamente para ayudarlo a levantarse—. Lo estás haciendo muy bien. No te desanimes, estamos en esto juntos. Arriba mi amor, ese es el hombre del que estoy enamorado- lo siguió alentando

Wonwoo, con el rostro enrojecido por el esfuerzo, miró a Junhui con una determinación renovada. A pesar de las caídas y los momentos de duda, la presencia de Junhui le daba fuerzas para seguir intentando.

—Lo siento, Junhui. No quería que esto fuera tan difícil —dijo Wonwoo, mientras Junhui lo ayudaba a ponerse de pie.

—No te preocupes, Wonwoo. Sabía que sería un desafío. Lo importante es que estás intentando y no te rindes. Eso es lo que importa —respondió Junhui con una sonrisa alentadora.

Una vez que Wonwoo estuvo nuevamente en pie, Junhui lo abrazó y le dio un beso en la mejilla, agradecido por su esfuerzo.

—Verte así me hace sentir orgulloso de que lo sigues intentando. Me enamoras cada día más - le dijo sonriendole

—No me digas eso que me lo voy a creer. Como yo, Jeon Wonwoo, voy a estar enamorando al chico más lindo y más hermoso del mundo - le dijo y Jun ayudó a secar algunas gotas de sudor que resbalaban de la frente de Wonwoo

—¿Sigues pensando en la nueva operación? —preguntó Junhui de pronto, con esperanza en su voz—. Puede ser una oportunidad real para mejorar, y realmente creo que podrías beneficiarte.

Wonwoo suspiró profundamente y negó con la cabeza, su expresión firme.

—He tomado una decisión, Junhui. No quiero más operaciones, ni más intentos. Ya he pasado por tres operaciones y no quiero enfrentarme a la posibilidad de más cicatrices, tanto físicas como emocionales. Esta es mi última decisión.

Junhui miró a Wonwoo, buscando en sus ojos una señal de duda o arrepentimiento, pero encontró solo resolución. Aunque su corazón deseaba que Wonwoo reconsiderara, entendía y respetaba su decisión.

—Está bien, Wonwoo. Si eso es lo que realmente deseas, lo aceptaré —dijo Junhui, con una voz suave pero llena de cariño y comprensión—. No quiero presionarte ni hacerte sentir que estás tomando la decisión equivocada. Estoy aquí para apoyarte, sin importar lo que elijas.

Junhui rodeó a Wonwoo con sus brazos, abrazándolo con ternura. Sus labios encontraron los de Wonwoo en un beso lleno de amor y apoyo, transmitiendo todo el cariño que sentía. A pesar de las dificultades, el abrazo y el beso eran una promesa de que no estaba solo en su lucha.

Junhui no quería separarse de Wonwoo y este tampoco, lo jaló de la cintura haciendo que se sentara en sus piernas y siguió besándolo.

Este podía jurar que era el beso más intimo que habian compartido desde que estaban juntos.

Acariciando la pequeña cintura de Junhui, mientras este dejaba que sus manos pasearan por lo hombros anchos de Wonwoo. Separándose levemente para respirar, siguieron compartiendo el beso, hasta que finalmente una alarma del móvil de Junhui lo hizo separar.

Con los labios rojizos, Junhui le sonrió a Wonwoo

—Voy a seguir aquí, Wonu. No importa qué decisión tomes o cuán difícil sea el camino. Lo haremos juntos —dijo Junhui, mirando a Wonwoo con determinación.

Wonwoo sintió un alivio y una calidez al escuchar las palabras de Junhui. Aunque su decisión era firme, la presencia y el apoyo incondicional de Junhui le daban fuerzas para seguir adelante, sin importar las circunstancias.

—Gracias, Junhui. Significa mucho para mí saber que estás aquí y que me apoyas —dijo Wonwoo, con una sonrisa agradecida.

Junhui sonrió de vuelta y se inclinó para dar otro beso a Wonwoo, esta vez en la frente. La determinación y el amor entre ellos eran palpables, creando una sensación de unidad y esperanza a pesar de las dificultades.

Juntos, comenzaron a trabajar nuevamente en la terapia en casa, enfrentándose a los desafíos con un renovado sentido de propósito. Aunque la decisión de Wonwoo era final, la presencia constante de Junhui y su apoyo incondicional eran una fuente de fortaleza para ambos.

Mientras el sol se ponía afuera, bañando la habitación en una luz dorada, Wonwoo y Junhui se encontraban más unidos que nunca, enfrentando el futuro con la seguridad de que, a pesar de las adversidades, su amor y compromiso mutuo los guiarían a través de cualquier desafío que viniera.