26. PRIMERA DISCUSIÓN

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El sol se estaba poniendo cuando Wonwoo llegó a casa, junto a Sejong, después de un largo día. Había estado pensativo desde la tarde anterior, cuando, un día Junhui sin querer dejó su laptop abierta en la sala y pudo ver que por alguna razón tenia información de fisioterapia guardada, algo que le hizo cuestionar la naturaleza de la relación entre él y Junhui. A lo mejor lo hacía por ayudarlo, al final del día no le pregunto nada a Junhui.

Pero tal vez su curiosidad fue más grande que un día revisó la mochila que siempre traía Junhui, aprovechó que intentando acomodar las cosas se cayeron, vio su carnet de practicante en la misma clínica a la que iba, él no tenía idea de eso, se suponía, que dicho por boca del contrario, estudiaba Administración y aquella tarjeta no decía lo mismo. Junhui era terapeuta. Guardando la tarjeta en su bolsillo, bastante pensativo y molesto por la mentira, decidió no preguntarle.

Wonwoo más tarde, ese mismo día fue a la clínica para hacer su terapia física y cuando tuvo la oportunidad estuvo sacando y buscando información acerca de Junhui, la noticia de que Junhui estaba en su etapa de prácticas como terapeuta le preocupó, especialmente después de una conversación casual en la que uno de los compañeros había mencionado cómo Junhui estaba muy comprometido con su trabajo, particularmente con casos difíciles.

Cuando Wonwoo llegó a casa después de sus ejercicios, encontró a Junhui ya esperando en la sala, una de las pocas veces que se habían visto en ese espacio desde la discusión sobre el cumpleaños de Wonwoo. Junhui estaba sentado en el sofá, con un libro de terapias en las manos, absorto en la lectura. La tensión en el ambiente era palpable.

—Wonwoo, ¿cómo fue tu día? —preguntó Junhui, intentando iniciar una conversación.

Wonwoo no respondió inmediatamente. En lugar de eso, se dejó caer en el sofá con un peso que parecía estar más allá de la simple fatiga.

—¿Junhui, ¿qué estás haciendo aquí? —preguntó finalmente Wonwoo, su voz cargada de frialdad—. No pensé que tu trabajo te dejara tiempo para venir a verme.

Junhui se sorprendió por el tono cortante de Wonwoo. Dejó el libro a un lado y se inclinó hacia adelante.

—Vine a verte porque eres mi novio y me preocupaba cómo estabas. ¿Qué pasa? - dijo cuando Wonwoo giró su rostro rechazando el pequeño beso que le iba a dar

Wonwoo lo miró con una intensidad que hacía difícil ignorar su incomodidad. No lo iba a alargar más

-Qué es esto – sacó la tarjeta de practicante de Junhui y el rostro de este palideció

-Sabes no quería precipitarme, pensé que tal vez eras alguna especie de voluntariado, pero escuché algo hoy. Algo que no me gusto para nada —dijo Wonwoo, tratando de mantener su voz firme, pero el enojo era evidente—. Alguien me dijo que estás en prácticas de terapia. ¿Es cierto? ¿Por qué me mentiste y me dijiste que estudiabas Administración y no esto?

Junhui asintió, frunciendo el ceño, preocupado, lo que tanto temía estaba por pasar.

—Sí, es cierto. Pero te lo puedo explicar, sí estoy en mi etapa de prácticas y no te lo quise decir porque…

Wonwoo se levantó de un salto, el dolor y la confusión transformándose en una rabia que no podía contener.

—¿Por qué? —repitió, su voz aumentando en intensidad—. Porque quizás todo esto no es más que un experimento para ti. ¿Quieres experimentar conmigo? ¿Es esto solo una forma de obtener puntos en tu carrera? ¿Para poder decir que has tratado con un caso difícil?

Junhui se levantó, mirando a Wonwoo con sorpresa y una mezcla de tristeza.

—¿Qué estás diciendo? ¿Cómo puedes pensar eso? —su voz temblaba de emoción—. Mi interés en tu bienestar no tiene nada que ver con mi carrera. La terapia es mi carrera, sí, pero mi interés en ti es personal, no profesional.  Te quiero y estoy aquí porque me importas, no porque quiera obtener algo de ti para mis prácticas.

Wonwoo sacudió la cabeza, sus manos cerradas en puños. La frustración y el miedo lo estaban controlando.

—Eso es lo que me dijeron. Que estás buscando casos difíciles para ganar experiencia. Y tú... —la voz de Wonwoo se quebró un poco—. Tú has sido increíblemente amable conmigo, y ahora me siento como si todo esto no fuera real. ¿Y si solo estoy siendo usado para que puedas conseguir tu título? Quizás solo estás tratando de ser el héroe, el terapeuta que salva al desafortunado. ¿No es así?

Junhui dio un paso hacia adelante, desesperado por aclarar la situación.

—Wonwoo, por favor, escucha. Mi trabajo es ayudar a las personas, sí. Pero eso no significa que esté usando a nadie. Tú eres importante para mí, y lo que siento por ti no tiene nada que ver con mi carrera.

Junhui se detuvo, sus ojos llenos de tristeza. Wonwoo lo miró con una mezcla de dolor y desconfianza.

—No puedo creer en esto. Me resulta difícil aceptar que alguien pueda querer estar conmigo sin algún motivo oculto. ¿Y qué pasa con tu amigo Minghao? —interrumpió Wonwoo, aún enojado—. ¿No te has preguntado si te sientes más cómodo con él porque no tiene que lidiar con todas estas cosas? ¿O porque no está en una silla de ruedas?

Junhui se detuvo, el dolor en sus ojos se hizo más evidente. Sabía que la frustración de Wonwoo no solo era sobre él, sino sobre el miedo y la inseguridad que sentía. Se acercó a Wonwoo, intentando mantener la calma.

—Minghao es mi amigo, no tiene nada que ver,  lo que siento por ti e totalmente distinto

Wonwoo se apartó, mirando hacia abajo, las lágrimas a punto de brotar. Su voz se volvió más baja y quebrada.

—No sé si puedo creer en esto. Tengo miedo de ser una carga. De ser algo que solo estás manejando porque es tu trabajo, no porque realmente te importe.

Junhui sintió una punzada en el corazón. Se acercó lentamente a Wonwoo, intentando tocar su brazo con suavidad.

—Wonwoo, te prometo que lo que siento por ti es real. No estoy aquí solo por mi carrera. Estoy aquí porque me importas. Porque te amo.

Wonwoo se apartó bruscamente, sacudiendo la cabeza, esas dos pequeñas palabras eran tan fuerte, pero tan engañosas a la vez.

—No... no puedo hacer esto ahora. No puedo... No sé si puedo soportar esto, no con estos miedos.

Junhui lo miró, sus ojos llenos de tristeza y comprensión.

—Wonwoo, por favor, déjame estar contigo. Podemos superar esto juntos.

Pero Wonwoo no se movió, sus miedos y dudas aún presentes. Finalmente, con una voz quebrada, dijo:

—Me temo que lo mejor es que te vayas. Necesito tiempo para procesar esto. Por favor, déjame solo.

Junhui se quedó allí por un momento, luchando con su propio dolor.

Finalmente, se giró y salió de la casa, sintiendo que el peso de la separación era más grande que nunca. Sabía que tenía que darle a Wonwoo el espacio que necesitaba, pero el corazón de Junhui se rompía con cada paso que daba hacia la puerta.

Cuando el mundo se vuelve nuevo - WonhuiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora