Capítulo 14: Camino Electrizante

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Capítulo 14: Camino Electrizante

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El frío aire del lugar desconocido azotaba el pelaje de Pikachu, mientras este despertaba lentamente. Frente a él, una inmensa puerta de piedra se erguía, enmarcada por un ambiente enigmático y sombrío. El Pokémon amarillo parpadeó, intentando aclarar su mente. El entorno le resultaba completamente ajeno, lo que incrementaba su sensación de desconcierto. En ese instante, una figura femenina se materializó ante él. Era una mujer de una belleza impactante, rodeada de una misteriosa aura de poder. Su porte sereno y la tranquilidad en sus ojos reflejaban una sabiduría inalcanzable. Era Tengen.

Pikachu, aún desorientado, trató de comunicarse de la única manera que sabía: con sonidos. Su "Pika, pika" resonó en el aire, seguido de un agudo "Chu!", pero sus intentos de expresarse resultaron inútiles. La barrera idiomática era infranqueable. Tengen, sin perder la compostura, lo observó con atención, como si estuviera evaluando cada uno de sus movimientos, comprendiendo que se enfrentaban a un obstáculo en la comunicación.

El silencio se apoderó de la escena por unos instantes. Tengen, aparentemente acostumbrada a situaciones complejas, extrajo de su túnica una hoja de papel fina y una pluma, las cuales usó para escribir rápidamente sobre la superficie del papel. Sus manos se movían con destreza, dibujando enérgicamente los trazos de los caracteres kanji. Tras unos segundos, se acercó con delicadeza a Pikachu, extendiéndole la hoja.

—¿Sabes leer esto? —preguntó con una voz suave y pausada.

Pikachu miró el papel. En un primer momento, su mente se resistía a conectar los símbolos que allí aparecían, pero tras unos segundos, los recuerdos de su tiempo observando a los humanos surgieron en su mente. Aunque no dominaba el idioma, había estado expuesto a la escritura japonesa lo suficiente como para reconocer los kanjis básicos. Asintió con la cabeza, aunque la ansiedad por no poder expresarse plenamente se reflejaba en sus ojos.

Tengen, notando la frustración de Pikachu, desvió la mirada hacia el suelo polvoriento y le hizo un gesto con la mano, indicando el polvo acumulado. Pikachu, captando la intención de inmediato, usó su cola cargada de energía estática para trazar símbolos en el suelo. Aunque nunca había escrito japonés antes, la electricidad le permitía controlar los trazos de forma precisa. Con movimientos lentos, pero decididos, empezó a dibujar kanjis en el suelo.

Escribió con cuidado: 「¿QUÉ PASA?」

Tengen sonrió, sorprendida por la rapidez con la que Pikachu se adaptaba a la situación. Para un ser que no hablaba el idioma, había encontrado una manera ingeniosa de comunicarse.

—Bien. Esto será suficiente para que podamos dialogar —dijo Tengen, volviendo a escribir en el papel—. Pikachu, te ofrezco una oportunidad única. Tu poder, que hasta ahora ha sido impredecible y sin control, puede ser dirigido hacia algo más grande, hacia un propósito mayor. En este mundo, dos entidades oscuras, Sukuna y Kenjaku, amenazan con destruirlo todo. Sukuna, el Rey de las Maldiciones, y Kenjaku, el maestro de la manipulación de almas, son un peligro inmenso para todos los seres vivos. Necesitamos tu fuerza para detenerlos. A cambio, te permitiremos vivir y te daremos la libertad que tanto anhelas.

Pikachu miró a Tengen con sus pequeños ojos, donde se reflejaban emociones encontradas. El nombre de Sukuna hizo que un escalofrío recorriera su espalda. Aunque sabía con precisión quién era, el mero hecho de escucharlo provocaba una sensación de inquietud profunda. No obstante, también sintió que esta era la oportunidad de redimirse por fin al usar su poder para un bien mayor.

Pikachu en Jujutsu KaisenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora