El hermano de mi mejor amiga

Capitulo 27

Narra Agustin.

Ya estaba todo listo, solo faltaba que llegara mi hermosa novia. Hace tanto que deseaba tener una cita con ella. Miraba la hora cada 2 minutos, hasta que sentí el ruido de un auto acercarse. Escuchaba que alguien se quejaba, seguramente era Jas, pobre mi pequeña debe pensar que está sola. Como vi que se acercaba me di la vuelta dándole la espalda a ella, escuche unos pasos detrás de mí hasta que se detuvieron. Me di la vuelta y allí estaba. Tan hermosa como siempre, tan única, tan ella. Nos quedamos mirando por unos segundos hasta que rompí el silencio.

-Esta preciosa mi amor- me acerque y la tome por la cintura.

-Pues tu estas muy guapo- coloco sus manos en mi cuello, y me sonroje, primera vez que lo hago estando con ella- y más cuando te sonrojas.

-Oh tú quieres que me ponga como un tomate- dije bajando la mirada.

-Me gustan los tomates- se mordió el labio inferior- aparte son muy ricos.

-¿Ah sí? ¿Y yo seré igual de rico?- le alce las cejas.

-Ya te lo averiguo- se acercó y me dio un largo y tierno beso- Te puedo asegurar que sos el tomatito más rico y lindo que eh probado en mi vida- me guiño un ojo.

-Eres tan hermosa mi amor- le di un pequeño beso en su nariz- ven- tome su mano y la lleve a su silla. La corrí, espere que se sentara y luego me coloque frente a ella.

-¿Y todo esto?- señalo el lugar- ¿a qué se debe?

-Solo quería agradecerte por todo lo que me das- sonreí.

-Pero amor, tu siempre me sorprendes y yo no te doy nada- bajo su mirada.

-Hey princesa- tome su barbilla- con el simple hecho de que existas ya haces mucho- me acerque y la bese.

-Te amo tanto mi vida- sonrió.

-Y yo mucho más a ti- le acaricie la mano- ¿quieres comer?

-¿Tu cocinaste?- asentí con la cabeza- Wow ¿y cómo hiciste?

-Por ti hago hasta lo imposible mi amor- le guiñe un ojo- bueno ¿quieres ver que hice?- tome de la tapa que cubría la comida, ella asintió. La destape y quedo impresionada, debo admitir que me había quedado bastante bien la presentación.

-Mi comida favorita- dijo con los ojos como platos y una gran sonrisa- mi amor te pasaste.

-Falta probarla- corte una porción y lo coloque en su plato, luego hice lo mismo con el mío. Ella tomo un pequeño trozo y se lo metió a la boca. – ¿Te gusta?

-Mmm mi amor esto sabe horrible- comento mientras yo la miraba extrañado, pensé que le iba a gustar. A los segundos ella comenzó a reírse- era una joda amorcito, es lo más rico que eh probado en mi vida- se levantó de su silla y me dio un tierno beso.

-Uf- suspire- pensé que me había quedado feo- reímos.

Mientras comíamos conversábamos de distintas cosas que habíamos pasado en nuestras vidas, ahora era turno de nuestro amores pasados.

-Bien, entonces ¿cuantas novias tuviste?- pregunto Jas.

-Si no me equivoco 3- le respondí.

-¿Cuánto duraste con ellas?

-A ver, la primera fue Mariana, con ella dure solo un mes, porque éramos muy chicos. La segunda fue Anthonela, con ella dure medio año porque me engaño con su mejor amigo y la última fue Candela, ella en verdad me gustaba, pero solo estaba jugando conmigo, por eso le compuse el tema "Nunca Más".

-Oh mi amor pobre- me acaricio mi mano.

-No importa-sonreí- ahora es tu turno, ¿cuantos novios tuviste?

-Solo 2, el primero fue Matías, con el duramos 8 meses nada más porque también me engaño con su vecina y el segundo fue Joaquín.

-¿Al que le pegue?- pregunte.

-Si a ese, con el dure 2 años y meses, pero de un día para otro se fue y me dejo sola. 

-Pero algo tendría que haber pasado ¿o no?

-En realidad si- suspiro- me dejo porque yo le conté mi secreto.

-¿Que secreto?

Narra Jas

-Es que yo...- me calle, no sabía si contarle o no.

-¿Tu que amor?- tomo mi mano y me miro tiernamente.

-Yo...- suspire- es que yo soy virgen- le dije la verdad, pero no mi secreto. No estaba lista para decírselo, era una noche grandiosa y no quería arruinarla.

-Mi amor- se paró y se puso en cuclillas frente a mí- si el no supo aceptar eso, es porque en verdad no te quería.

-Pero es que llevábamos 2 años juntos, era obvio que iba a querer tener relaciones- baje la mirada- solo que yo no estaba lista.

-Mira princesa, yo por mi parte no te voy a obligar a nada, yo si te voy a respetar y te voy a dar tu espacio porque te amo y además porque- suspiro- yo también soy virgen.

-¿Enserio?- lo mire confundida- y pero todas las chicas con las qu...- me interrumpió.

-Nunca nada- sonrió- yo me quiero entregar a la mujer con la que voy a pasar el resto de mi vida, no a alguien que solo dure unos días.

-Igual yo- acaricie su mejilla- eres, tan perfecta.

-No tanto como tu mi princesa- se acercó y me dio un beso con mucho amor- Ven te quiero mostrar algo- me tomo de la mano.

-¿Más sorpresas?- sonreí.

-Así es- entramos a la casa, estaba decorado todo tan lindo, subimos por unas escaleras a un gran balcón.

-Wow amor esto es asombroso- el rio.

-Todavía no llegamos- nos dirigimos a unas escaleras que estaban un poco escondidas, subimos y quede totalmente en shock. El lugar era grandioso, había pétalos, velas, corazones y 2 cojines sobre una hermosa alfombra roja y de allí se podían ver todas las luces de la ciudad, la vista era espectacular. ¿Te gusta amor?- pregunto.

-¿Que si me gusta?- el asintió con una gran sonrisa- esto me encanta amor- me acerque y le di millones de besos sobre su hermoso rostro.

-Me- beso- alegra que- beso- te gustara- beso, me separe y fui directo a la orilla de la terraza.

-¡TE AMO AGUSTIN ALMEYDA!- Grite con todas mis fuerzas, Agustin se acercó a mí y me tomo por la cintura mientras reía.

-Amor, acá no nos escucha nadie.

-No importa, solo quería gritarlo.

-Bueno si lo pones de ese modo- se colocó a un costado de mi- ¡JASMIN BUTER ERES EL AMOR DE MI VIDA!- Grito más fuerte que yo.

-Te amo, te amo, te amo, te amo- lo abrase lo más fuerte que pude- nunca me faltes.

-Y yo te amo mucho más a ti princesa- me beso- y no, nunca te voy a faltar- ven siéntate- me señalo uno de los cojines. Hice lo que me pidió y él fue a buscar el postre a una mini heladera.-Ten- me entrego el vaso con distintas frutas en rodajas- ¿crema o dulce? 

-Crema- sonreí. El tomo el frasco de crema y coloco un poco sobre mis frutas. Después busco el dulce, tomo una cucharada y el depósito sobre su vaso.- Tú no dejas más el dulce eh.

-Es mi debilidad- rio y puso un poco dentro de su boca.

-Pensé que yo lo era- agache mi mirada.

-Tus eres la primera, el dulce queda en segundo lugar- me guiño un ojo y le di un corto beso sobre sus labios.

-Mmm tienes un rico sabor en tus labios- me saboree.

-Siempre para ti- me sonrió- tu eres la única que podrá probarlos- me sonroje.

-¿La única?- asintió- ¿cuándo quiera? 

-Cuando quieras y donde quieras preciosa- me acerque nuevamente y lo bese.