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Cuán dulce puede ser el sabor de la felicidad cuando tu me provocas ese sentimiento y cuán doloroso puede llegar a ser la infelicidad cuando tu eres la principal causa de mi llanto.
                       By Kelly Ami Gómez

Sentía mi cabeza palpitar y un dolor recorrió todo mi cuerpo. Trate de abrir los ojos y la luz me cegó. Palpe a mi alrededor y estaba acostado en una muy alcolchonada cama, que me recordaba a la mía.

Mi vista se termino de aclarar y reconocí que evidentemente estaba en mi cuarto. Me levante de la cama y a paso lento me aproxime al baño, tome mi reloj que estaba al lado del lavamanos y vi la hora, eran las 8 y media de la mañana y no sabia por que me levante tan temprano.

Me despoje de mi ropa y entre directo a la ducha, necesitaba quitar el repugnante olor a alcohol que salía de mis poros. Me duché durante media hora, teniendo cuidado con las suturas que aún tenía en mi ano.

Salí de la ducha envuelto en una toalla y luego de que me secará, me coloque unos boxers negros y un pantalón de deporte con un suéter manga larga, mi rostro todavía poseía el morado y no había manera de taparlo para bajar a desayunar.

Solté un cansado suspiró y me dispuse a salir del cuarto en busca de algo para mi dolor de cabeza, mi casa era un caos y no tenia idea de por que.

Vi a mi mama y me acerqué a ella con intensión de preguntarle por que.

-mamá- dije cuándo estuve detrás de ella, ella se giró y quedo frente a mi, vi como sus ojos se abrían en grande al verme.

-Mat, que te paso- dijo tocando con delicadeza mi rostro.

-antes de ayer me robaron, no es nada importante- dije tratando de sonar convincente.

-estas bien, no te hicieron nada más?- preguntó.

-estoy bien - dije y le sonreí, la vi dudar un momento y luego asentir- que esta pasando, por que tanto caos si la boda no será aquí- dije.

-es que tus suegros llegan en un par de horas y se quedarán aquí - dijo y me estremecí de solo pensar que Lucifer estaría bajo mi mismo techo- a las una viene el sastre- dijo acariciando mi rostro y yo asentí.

La boda se llevaría a cabo a las tres y la fiesta a las cinco. Me encamine a la cocina.

-Liam me puedes dar algo para la resaca- le dije a uno de los cocineros.

-deja de beber, por lo que veo tu despedida fue muy salvaje- dijo pasándome un vaso de agua y una aspirina.

-no sabes cuanto- dije sonriendole luego de haberme tragado la pastilla, él me paso un plato con pancakes y me dispuse a comerlo.

-Mati puedo preguntarte algo- dijo sentandose frente a mi, yo asentí- que te paso en la cara

-bueno, antes de ayer me robaron- dije tragando lo que tenia en la boca y esquivando su mirada.

-voy a hacer como si te creyera, si necesitas hablar con alguien no dudes en hacerlo conmigo, esta bien?- yo le asentí sonriendo.

Termine rápido mi desayuno y me levante de la mesa, salí de la cocina y me aproxime a mi habitación de nuevo, llegue a ella y en ese mismo instante mi celular comenzó a sonar.

Llamada telefónica.

-bueno- dije al contestar.

-Mati - dijo la voz de Josh del otro lado de la línea, su voz se escuchaba nerviosa y rasposa, como si hace poco se hubiese levantado.

-sí Josh, que paso.

-sabes quien es un moreno grande, lleno de tatuajes, que creó que conocí anoche en tu despedida- dijo y comencé a darle mente a lo de a noche y me llego el recuerdo del mejor amigo de Julián.

-sí, se llama Valerio y es el mejor amigo de Julián, porqué lo preguntas?.

-algo paso a noche y no se que pudo ser - dijo con voz temblorosa. Mi mente trato de imaginarse algo más de lo pasado a noche, y me pude acordar cuando ellos dos se fueron a una de las recamaras juntos.

-creo que si, me acuerdo que se fueron tomados de la mano a una de las habitaciones.

-Y si me violó y si ese psicópata abuso de mi - escuche su voz asustada.

-te duele las nalgas - le pregunte y lo escuche negar - pues no te violó.

-estas seguro? Esperate un minuto y tu como sabes que se siente cuando te violan - dijo inquisitante, aclare mi garganta.

-no se como se siente, lo que se es como se siente tener sexo con otro hombre.

-ohh, así que eres el pasivo, me lo sospechaba - dijo y mi cara se convirtió en una gran mancha roja de la vergüenza.

-Josh hablamos luego ok - dije y le colge la llamada antes de que agregará algo más.

Fin de la llamada.

Deje mi celular a un lado y apoye mi cabeza en la almohada, vi alrededor de mi habitación y me di cuenta que este era el último día que estaría en ella. Solté un cansado suspiró y me dispuse a arreglar mis maletas.

Comencé a sacar toda mi ropa y fui doblandola en la cama y luego entrandola en la maleta, hice lo mismo con zapatos, mis boxers y demás. Tomé otro bulto y entre mis libros y útiles del colegio.

Cuando estuvo todo listo vi la hora y eran las diez y media, me lanze de cara a la cama y me di vuelta quedando de frente al techo.

Una duda había asaltado mi mente y era que si Julián vivía en Italia, significaba que me iría con él y que dejaría a mis amigos aquí. Un escalofrío recorrió toda mi columna vertebral de solo pensar en eso. Estaba agotado de todo esto, solo quería que este día y todos los demás llegarán a su fin, no quería pensar en que tal vez las cosas no serían lo mismo en Italia y que Julián cambiaría.

-Mati cariño baja han llegado los papás de tu prometido- dijo mi nana.

-esta bien nana ya bajo- dije y ella asintió, me levante de la cama y me aproxime al espejo para verme, me arregle lo más que pude y solté un suspiro, mi rostro era un completo asco.

Salí de mi cuarto y recorrí el pasillo hasta la escaleras, bajé por ellas y me adentré en la sala, mamá estaba sentado con cinco personas, dos de ellos adultos y tres chicas.

-Buenos días- dije y todos giraron hacia mi poniéndome más nervioso de lo que me encontraba. Todos se levantaron y mi mamá hablo.

-Mathew ven - dijo y me acercó a ella- él es mi hijo Mathew- dijo presentandome, todos me observaron y él que supuse obviamente era el padre de Julián se me acercó tendiendome la mano.

-un gusto Mathew soy Francesco padre de Julián - sólo hizo decir ese nombre y mi cuerpo involuntariamente tembló y trate que mi mente no pensara en lo que había pasado, cosa que dude que funcionará ya que vi como el rostro de todos los presentes cambio.

Creo que todos entendieron que el de la foto era Lucifer. Besos.

Tengo su selloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora