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-ok, entonces los primeros meses no hay riesgo- dijo Ángel- Él riesgo no es de ti Mathew eres inmortal, el riesgo es del bebé, que pueda morir antes de nacer.

- mi bebé - dije acariciando mi estomago.

- todo estará bien - dijo Julián besando mi frente.

Luego de unos minutos todos se retiraron de la habitación dejándonos sólo a Julián y a mí. Julián retiro la sábana de la cama y se adentro conmigo en ella.

- estas feliz? - me atreví a preguntar.

- más de lo que he estado en toda mi vida- dijo y beso mi frente, me acurruque en su pecho y admire el tatuaje que sobresalía por la manga de su polo.

- me encanta como te queda este tatuaje- dije y acaricié el coliseo.

- y a mi como te queda este- dijo acariciando la parte trasera de mi cuello- duerme un rato pequeño. Debes estar cansado, demasiadas impresiones en un día.

- pero mañana volvemos a casa, quería disfrutar de Jacksonville- dije.

- tenemos toda una vida para poder disfrutar de este hermoso lugar, ok?- asentí y cerré mis ojos tratando así de conciliar el sueño.

Esa noche no soñé con esos ojos de los que ya sabía su procedencia, si no con mi futuro bebé.
...

Me levante al mismo tiempo que el sol salía. Me pare de la cama y tome una larga ducha, salí envuelto en una toalla y me puse ropa para bañarme en la piscina.

Salí de la recamara y me aproxime a la cocina. Todos se encontraban hay comiendo y charlando.

-Buenos días - dije sonriendoles.

- Buenos días Mati - dijeron todos a la vez. Les sonreí y me senté al lado de Julián.

- como amaneciste?- pregunto.

- muy bien- dije besando su mejilla.

- toma, necesitas comer mucho- dijo Ángel dejando un plato de fruta y pan tostado frente a mi y besando mi frente - no puedes beber café, por lo tanto ahora tu mejor amigo se llamará té- dijo y puso una tasa con una sustancia amarillenta, que me provocó náusea. Lo mio no es el té, lo mío es una tasa humeante de café americano.

- enserio?-pregunté viendo esa bebida fea.

- sí, encerio- dijo riendo. Fruncí mi ceño y me dispuse a beber un trago. Sentí esa cosa deslizarse por mi garganta y no era lo mismo que mi compañero de desmadre, el Café.

- te tienes que acostumbrar pequeño- dijo Julián acariciando mi estomago. Me sonroje por ese acto y le sonreí.

- lo hare- dije besando sus hermosos labios.

- o por dios dejen de comer delante de los pobres- dijo la voz de Lily sacándome de la ensoñación en la que me encontraba.

Gire mi vista y observé que todas las parejas se estaban besando.

- deja los celos Lil- dijo Vero quien se encontraba entre los brazos de Ian, quien besaba su cabeza.

- Cállate Vero, tu eras mi compañera en esta soltería, pero no ahora te follas a ese monumento de hombre y yo aquí ,por siempre infeliz- término de decir mientras se seguía quejando.

Andrew quien estaba al lado de Fran, se aproximó a ella, la tomó por el cuello y la beso. Todos en la cocina nos quedamos con la boca abierta presenciando tal escena.

- joder Lily callate y se mi jodida novia- dijo cuando se hubo separado de ella. Ella lo observó con los ojos en grande y dijo.

- a la mierda, yo ya tengo al mio- y se lanzó encima de él, besandolo de nuevo.

Creo que mi cara debe de dar risa, porque de los que menos sospechaba que pudieran salir en una relación eran ellos dos. Si vivían para discutir continuamente.

Del odio al amor hay solo un paso.

- y que lo digas pequeño- dijo besando mi oreja Julián.

- oigan ahora que me doy cuenta que hacen todos despiertos a las seis de la mañana- pregunté confundido.

- Saldremos a navegar- dijo Valerio besando la mejilla de Josh.

- cuando saliste por esa puerta, yo iba para la habitación a despertarte- dijo Julián.

- genial, siempre e querido navegar - exclame feliz.

Dos horas y medias después y solo media hora en el mar.

-odio navegar - dije llorando por ser la tercera vez que vomitaba desde que habíamos salido del puerto.

- no pensé que te haría tan mal estar aquí - dijo Julián acariciando mi espalda.

- es normal en él, es por el embarazo - dijo Ángel en un susurró para que sólo nosotros lo escucharamos.

- pues no me gusta- dije llorando más fuerte.

- y eso también es por el embarazo, son los cambios de humor que se producen. Puede que esté feliz o triste, o que no quiera que lo toques o que no dejes de hacerle el amor - dijo Ángel viendo a Julián.

- me gustó la última parte- dijo sonriendo.

- Ja Ja, muy gracioso tú, como a ti no te crecerá la panza como si te hubieras comido una jodida Sandía- dije llorando.

- Mati quieres helado de mantequilla de maní?- pregunto Braulio detrás de Ángel. Y el solo echo de decir mantequilla de maní me tenia sonriendo.

- sí, dame- dije extendiendo mi mano para que me lo diera. Me paso un pote de helado y yo comencé a comerlo feliz de la vida.

Narra Julián.

-como sabias lo que él quería - pregunté a Braulio.

- no sabía, pero mi mama me dijo que al abuelo le dio por comer mucho ese tipo de helado y cuando dijeron que íbamos a navegar, decidí traer uno - dijo encogiéndose de brazos.

- pues te lo agradezco- le dije sonriendole.

Tomé a Mathew en mis brazos y lo levante del piso, sentandolo en una de las silla. Mat se encontraba literalmente con la cara dentro del helado, por el contrario de los demás que tomaban sol en diferentes áreas del catamarán.

- Joder Julián, acaso te pudres en dinero, este catamarán te debió costar mucho- dijo Ángel mientras acariciaba el cabello de Mat.

- fue un regalo- dije viendo a Braulio.

- de quien?-pregunto Mat, mientras llevaba una cuchara de helado a su boca.

- de Braulio- dije.

- y por que se odian- dijo Ángel.

- no nos odiamos, por el contrario somos los que mejor nos llevamos. Puede que en muchas cosas no estemos de acuerdo como en lo de Mathew, pero después siempre hemos estado bien - dijo él y yo asentí colaborando lo que dijo.

- ustedes son raros - dijo Mathew negando con la cabeza y sacando una sonrisa en mi.

Tengo su selloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora