Tengo su sello

32

Termine de botonar mi camisa azul marino y dí un último vistaso al espejo de cuerpo completo. Salí de la habitación y baje las escaleras, me aproxime a la sala de estar y cuando me disponía a salir de la casa una voz interrumpió mi salida.

- a donde crees que vas?-pregunto Julián atrás de mi.

- voy a salir con Alisson, te lo comente esta mañana- dije acercándome a él.

- sí, me lo dijiste pero no que seria esta noche, a las diez de la noche.

- y a que hora crees que se va de disco- dije en tono irónico- Saldremos a una disco que según Alisson es impresionante.

- saldrás a bailar, y desde cuando tienes una amistad tan estrecha con Alisson para hacer ese tipo de cosas?

-desde que intercambiamos números antes de ayer, nos hemos estado mensajeando y hablando por teléfono. O vamos Julián es viernes.

- no irás - dijo en tono posesivo.

- no me hables en ese tono, no tienes derecho a decir si puedo o no salir de fiesta, eres mi esposo no mi padre.

-por que soy tu esposo te digo que no irás.

- joder Julián salí de casa de mis padres, no espere que aquí también tuviera uno- dije alejándome de él- por que no quieres que valla?

-por que los italianos y más los de aquí de trieste son muy calienta orejas, no quiero que esos tipos con sus acentos y sus melenas rubias y piel bronceada te conquisten.

- estas celoso o por dios, pero si tu también eres italiano- dije sonriendo.

- por que crees que lo digo- exclamó.

- vamos Julián cariño, quiero bailar.

- esta bien, pero yo voy- dijo.

- tú - dije señalandolo- la muerta en una discoteca, tengo que ver eso.

- pues lo verás, anda vamos.

- irás así- pregunté observando su sencilla pero voraz manera de vestir.

- sí, todo me queda bien- dijo sonriendome engreidamente.

- modestia- exclame en alto, saliendo de casa entre risas.

Nos encontramos a Alisson fuera de la discoteca, estaba acompañada de un hombre extremadamente atractivo. Joder que si no estuviera casado me hubiera interesado en él.

- entonces Mathew y donde quedó yo- dijo levantando su ceja.

- por eso pensé que si no estuviera casado - dije riendo.

- deja de pensar en otros hombres, eso molesta.

- pues deja de leer mi mente- dije sacandole la lengua.

- Mati - dijo ella llamando mi atención, gire mi rostro hacia ella, dejando a un lado la conversación con Julián- mira este es mi hermano mayor Ian.

- tu hermano, pero si no se parecen- dije. Alexandre y Alisson eran rubios de ojos azules pero Ian era moreno de cabello y ojos verdes claro casi azules.

- lo se - dijo sonriendo.

Nos saludamos y nos adentramos a la discoteca, repleto de personas de todas las edades.

- quieres algo de beber pequeño?-pregunto Julián en mi oído para que lo pudiera escuchar a pesar de lo alto que estaba la música.

-un mojito- dije.

- y ustedes que quieren de tomar? - les pregunto Julián.

- yo un sex in the beach- dijo Alisson.

- yo te acompañó - dijo Ian y fueron juntos al bar, dejándonos a nosotros en la pista de baile.

La música era estridente pero las vibraciones que ocasionaba en el ambiente hacia que tu cuerpo se moviera sin consentimiento. Alisson y yo comenzamos a movernos de manera lenta y nos dejamos llevar por la letra seductora de la canción.

Sentí un cuerpo posicionarse atrás de mi y me espante, hechando mi cuerpo involuntariamente hacia delante, gire mi cuerpo y quede frente al causante de mi susto.

- joder Julián, me has asustado- dije y en su rostro se formó una sonrisa pícara.

- toma- dijo y me paso mi vaso, le di un trago y el sabor a mojito de coco recorrio mi garganta y solté un sonido de satisfacción por el delicioso sabor de la bebida, me acerqué a Julián al ritmo de la canción que sonaba y el reía por mi tonta manera de tratar de seducirlo.

I don’t like it, I love it sonaba y yo movía mis caderas contra las de Julián, mientras que sus manos dominaban todo lo que podía mi cuerpo. La canción hacia que nuestros cuerpos friccionaran, por el escaso espacio que dejábamos entre nosotros.

Cuando la canción hubo finalizado y mi vaso agotado, oye eso rimo, volviendo al tema, cambie de pareja con Ian, y Alisson y yo comenzamos a bailar una canción extremadamente vulgar, mientras que Julián me observaba con ojos de deseo e Ian bailaba con una chica desconocida para mi.

Cada movimiento que hacíamos Julián lo observaba sin perder detalle, disfrutaba de la atención que me brindaba.

- tratas de excitarme en esta discoteca- me pregunto cuando me hube acercado a él.

- pensé que te había quedado claro hace rato - dije agarrando el cuello de su suéter y arrastrando su rostro hacia mi y besando sus labios rosados y grandes.

Sus manos se aferraron a mi espalda y   sus labios acariciaron los míos con pasión. Segundos después cuando ya nos faltaba el oxígeno nos separamos y observé su grandes orbes negras llenas de excitación.

- te deseo pequeño- dijo besando mi lóbulo y mordiendolo, solté un gemido contenido y deseé que sus labios se quedarán envolviendo mi oreja.

- yo también cariño- dije acercandolo más y volviendo a besarlo.

- vallan a un motel- dijo riendo Ian quien bailaba aún con la desconocida rubia.

- eso haremos - dijo Julián antes de arrastrarme hacia la puerta y sacarme del establecimiento.

Llegamos a mi Jeep, que estaba en la parte alejada del establecimiento. Julián abrió la puerta de atrás y me lanzo a esta.

- no creó poder llegar a casa- dijo subiéndose también y comenzando a besar mi cuello y a desprenderme de la molesta camisa que interponía las manos de Julián de mi pecho. Cuando está fue lanzada lejos, Julián deslizó su experta lengua por todo mi abdomen dejando marcas de chupones por donde sus labios recorrían.

Me quito lo que restaba de la ropa y cuando estuve completamente desnudo y excitado, detuvo sus manos y dijo con voz ronca por el placer.

- abre las piernas Mat, esta noche te follare duro.