Capitulo 31: Para Chloe, de Carl.

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La historia de mis padres me había conmovido enormemente, jamás pensé que mi Daryl hubiera amado tanto a mi verdadera madre y que todo este tiempo aparento amar a Juliet para que yo creciera en una buena familia. Ahora por fin entendía todos los malos tratos que había recibido de ella en su momento, y entendía el porqué de su indiferencia a mí. Después de conocer la verdad perdí las ganas de relacionarme con ella, y aunque ahora estaba aquí, solo lo permitiría por agradecimiento a Isaii.

[...]

A lo largo de este par de semanas ya me había acostumbrado a las miradas apáticas de mi madre, pues en cada oportunidad que tenía se alejaba de mi presencia, aunque yo no deseara tener contacto con ella.

Deanna había aceptado que ellos permanecieran en Alexandria, pues aunque sí había una carga mayor de responsabilidad, también había un par de personas extras que sin dudar aceptaron en salir de vez en cuando a incursionar por provisiones.

Javier se había acercado a mí estos días para disculparse por su comportamiento la última vez que hablamos, y aunque realmente no quería perdonarlo, lo hice por todo el tiempo que cuido de mí y nos quisimos. Mi sorpresa mayor fue que Jacqueline ahora estaba embarazada y ese sería una responsabilidad muy grande para ellos, pues los alimentos de bebes son casi inexistentes hoy en día.

Tara se había acercado a Isaii y sorpresivamente el sentimiento de ella fue bien correspondido, y aun así Carl no logra congeniar con Isaii, pues según sus palabras, le incomoda verme junto a él.

Por otro lado, había tomado la decisión de no quedarme postrada sobre esta incómoda silla, que en este mundo solo me permitiría ser una carga inútil y sin necesidad de sobrevivir. Carol cada mañana venía con comida a mi habitación y a masajear un poco mis piernas y flexionarlas, y aunque a veces era inútil, por fin había logrado sentir y mover un poco mis dedos, aunque había momentos en qué no sentía nada, pero siempre había un infinito sentimiento de esperanza de mi parte. Deseaba con ganas volver a ser la misma de antes, deseaba volver a malgastar mi energía en tonterías o en conseguir alimentos y provisiones para la comunidad. Estar inmóvil todo el día solo me permitía recordar todo lo que sufrí los últimos días antes de caer en esta condición que me estaba torturando a un más. Extrañaba poder volver a levantarme, caminar y moverme por mí misma, e incluso extrañaba el dolor que me causaba correr descalza sobre la tierra, ese ligero, pero incómodo dolor era el que más extrañaba, pues muchas veces el dolor es el que hoy en día me permitía recordarme que estaba viva.

Además, no me permitiría arruinarle la vida a alguien más, o más bien, no ser una carga para ellos, como ahora lo estaba siendo para mi padre y especialmente para Carl, quien se había mantenido cerca de mí en todo momento para poder saciar mis necesidades, como moverme, conseguir comida, algún bocadillo o únicamente la compañía. Mi padre, al recordar las últimas palabras de mi madre «me pidió que te diera una buena vida, que te dejará amar, y que yo volviera amar», logro aceptar lo que Carl y yo estábamos sintiendo, además que él notaba que su compañía era positiva para mí, además de una motivación, aunque Daryl prefería mil veces que tuviera una relación más cercana con Isaii, sabía que los sentimientos de ambos no iban por ese camino. Realmente no lograba entender cuál era la razón por la que Daryl no lograba aceptar totalmente mi acercamiento a Carl, existía una razón que no podía decirme, acerca de él.

[...]

Desperté cuando los rayos del sol entraban por la ventana y pegaban directamente en mis ojos. Me moví lentamente sobre mi lugar y a mis posibilidades. Pude ver un pequeño sobre amarillo en la mesita junto a mi cama, con un pequeño listón sobre él. Me recorrí en mi sitio hasta que mi mano pudo alcanzarlo y vi unas pequeñas letras sobre ellas.

"Para Chloe, de Carl"

—Hola — escuché una voz femenina del otro lado de la cama. No me había percatado de que alguien más estuviera dentro de la habitación, por lo que hizo que me sobresaltará.

Ahora podía escuchar un par de risas extras, al girar mi cara pude observar el rostro de Maggie y Tara. Reían fuerte, pues había pegado un pequeño salto y había dejado caer el sobre al suelo.

La puerta se abrió de repente y entro mi amigo Isaii a la habitación con un panqueque típico de Carol y un vaso de agua. Deseaba compartir es panqueque con una taza de chocolate caliente como en mi infancia, que claramente sería imposible en estos días.

—¿Que hacen aquí? —pregunte. Era sumamente raro que ellas estuvieran aquí por la mañana, por lo regular solo veía a Carol a estas horas.

Isaii se acercó a mí y me dio el panqueque con una sonrisa y dejo el vaso de agua sobre la mesita de la habitación. Se agachó sobre la cama y recogió el sobre que Carl había traído para mí y lo coloco sobre mis piernas que se encontraban cubiertas por la frazada rosa con la que dormía.

—Vamos a resolver el juego— respondió Tara con una sonrisa igual o más grande que la de Isaii.

Su respuesta me confundió, pues no sabía de qué juego se trataba.

—El juego de Carl — hablo Isaii nuevamente. Él caminó hasta el otro lado de la habitación y se sentó en el pequeño sillón donde frecuentemente Carl se quedaba dormido.

—¿De qué hablan? —pregunte confusa.

—Abre el sobre, y lo entenderás —habló por primera vez Maggie.

—Hace tiempo que no juego a la búsqueda de un tesoro — hablo Tara.

—Shhh... —Isaii callo a su novia, pues había revelado un poco de lo que posiblemente vendría dentro de este sobre.

—¡Qué emocionante! —dije con sarcasmo mientras terminaba de abrir el sobre.

Saque una pequeña hoja blanca que estaba doblado dentro de este. Estaba escrito por puño y letra de Carl, quien para la corta edad en la que dejó los estudios, escribía muy lindo.

"Con el presente apocalipsis la normalidad no existe, aunque este día intentaré que se parezca un poco a eso. Desde hace tiempo el estrés para todo el grupo es frecuente, por lo que nos permitimos hacer un juego para ti, y que olvides todo lo negativo de estos momentos.

Una corta lista de aliados te ayudará a recorrer Alexandria y a encontrar las respuestas de los problemas seleccionados para lograr ganar este juego, entre ellos está Daryl, Rick, Gleen, Carol y las 3 personas que se encuentran contigo en estos momentos.

Las respuestas de cada problema son locaciones. Dentro y fuera de Alexandria, aunque no deberás salir de aquí, únicamente con la respuesta podrás pasar al siguiente lugar.

Es posible que no sepas las respuestas de todo, pero las personas que te encuentres en el camino te ayudarán a resolverlo.

Te espero al final del juego.

Pista 1:

Afuera, uno esperaría la lluvia para poder ducharse, pero dentro de Alexandria ya no hay necesidad, pues tenemos la lluvia artificial"


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Editado 19/09/23

El viaje más largo | Carl Grimes |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora