El viaje más largo | Carl Grimes |

Capitulo 18: ¿Estás bien?

Deje de cubrirme en el momento que termine con los caminantes, olvidando por completo que tras de mí seguía una lucha. Escuche claramente los últimos dos disparos, Maggie había acabado con el último hombre, pero él había acabado conmigo.

—8 muertes de 7 — susurré. Caí de rodillas sobre el suelo, e inmediatamente mi cuerpo completo se desvaneció.

[...]

El sonido de la interferencia de un walkie-talkie logro despertarme. Mis ojos pesaban demasiado, intente abrirlos lentamente, pero la luz y el cansancio no me lo permitían, intentaba recordar como llegue a esta posición, pero era inútil, mi mente estaba bloqueada.

—¿Alguien me escucha?, cambio. —una voz masculina se escuchó a través del dispositivo, no lograba descifrar de quién se trataba, pues el ruido de la interferencia distorsionaba el sonido.

—Aquí Maggie, estuvimos intentando localizarlos — escuché dentro de la habitación. —¿Dónde están?, cambio. —

—Aquí Abraham —anhelaba que mi padre fuera quien estaba tras la radio. —Ya vamos en camino. Llevamos un gran tesoro, cambio. —dijo Abraham para soltar una risa con su voz sumamente gruesa.

Escuchar su risa me hizo recordar a aquel hombre gordo que me torturo, mi mente comenzó a procesar una infinidad de escenas muy rápido y entonces recordé todo. No lograba abrir los ojos, pero sentía como las lágrimas corrían por mis mejillas, apreté las manos sujetando la sabana que me cubría.

—Chloe, ¿Me escuchas? —dijo Maggie sujetando mi muñeca. —Shh., calma, todo está bien. Shh. —intento calmarme. — Abraham, deben llegar pronto. Atacaron Alexandria, Chloe, Carol y Rosita están graves, cambio. —

—¿Qué sucedió? ¿Chloe está bien? — escuché la voz de mi padre.

—Ella está delicada, pero... — hablaba Maggie, pero la interrumpí al sentir un insoportable dolor sobre mi pierna. Abrí los ojos al instante, sin interesarme el dolor que esto me causara, y solté un gran grito, que habría sido transmitido por la radio, pues Maggie aún lo sostenía. Solo podía quejarme del dolor, no podía resistirlo, podría sentir como si alguien estuviera cortando poco a poco mi pierna. Segundos después cerré nuevamente los ojos, había caído desmayada del dolor.

|Narra Daryl|

Hace 3 días habíamos salido de Alexandria al ver que las provisiones se acabarían pronto, los caminantes redujeron su presencia alrededor de la comunidad, por lo que sabíamos que era buen momento para salir.

Rick, Carl, Abraham, Glenn, Aiden, Spencer, Aaron y otro par de habitantes de Alexandria impartimos un viaje en busca de cualquier cosa que pudiera servirnos, y lo logramos. A un día de nuestro hogar, encontramos un pequeño supermercado en un pueblo, que había sido saqueado, pero en la parte de atrás estaban estacionados camiones, repletos de alimentos enlatados.

Nos habíamos detenido sobre el bosque, cuando encontramos un sitio donde la señal del radio era buena para comunicarnos a la comunidad.

— Abraham, deben llegar pronto. Atacaron Alexandria, Chloe, Carol y Rosita están graves, cambio. —escuchamos todos a Maggie.

Su voz desesperante y el escuchar pronunciar el nombre de mi hija logro que me tensara por completo. Habían sido atacados justamente cuando no estaba ahí para protegerla.

Corrí hacia Abraham y le arrebaté la radio de sus manos.

—¿Qué sucedió? ¿Chloe está bien? — pregunté.

—Ella está delicada, pero... — dijo Maggie, pero sus palabras habían sido silenciadas por un grito proveniente del otro lado. No sabía de qué se trataba, pero sabía que esa era mi hija, sufriendo, llorando y destrozada.