Los Gemelos en mi hotel (Hot)

Capítulo 40

Yo sonreí a modo de respuesta.

Llegamos a la puerta del gran edificio.

-Yo: Adiós Daniel -Dije sonriendo y besándole la mejilla-

-Dani: ¿Vas en coche?

-Yo: Pues claro Daniel, como llevo muchos años trabajando en tu empresa y mi abuela tiene tanto dinero, puedo permitirme un coche -Dije irónica y sonreí-

Daniel soltó una carcajada. Está tan cambiado y tan guapo. Joder.

-Yo: Bueno adiós, voy a coger ese taxi. -Dije señalando un taxi que venía en nuestra direcció-

-Dani: Claro que no. -Dijo sonriendo-

-Yo: ¿Cómo que no? -Dije confusa-

-Dani: Que yo te llevo. -Dijo sonriente-

-Yo: Es igual 'Señor Oviedo' -Dije soltando una gran carcajada-

Daniel soltó otra carcajada mientras negaba.

-Dani: Cuando cruzo esa puerta -Dijo señalándola- soy Dani.

-Yo: Vale Daniel -Dije riéndome-

-Dani: Venga que está ahí mi coche -Dijo señalándo un garaje-

-Yo: Siempre tan cabezota -Dije sonriendo-

Él sonrió y comenzamos a andar hacia el garaje, que se encontraba realmente cerca.

-Yo: Ya me estoy imaginando tu coche. Será un ferrari, un porsche, Ya sabes, el típico deportivo espectacular de los malditos pijos como tú. De esos que van flipando de coche por toda la puta ciudad.

-Dani: ¿Me has llamado maldito pijo? -Dijo sonriendo-

-Yo: Sí, eso mismo. -Dije mordiéndome el labio para no estallar a carcajadas-

Daniel miró mis labios y sonrió.

-Dani: Ese es. -Dijo señalando un precioso ferrari rojo-

-Yo: Lo que yo decía. -Dije con aires de creida-

Daniel soltó una carcajada y me abrió la puerta del copiloto.

-Yo: Todavía sé abrir puertas. -Dije graciosa-

-Dani: Es por ser más caballero.

-Yo: Con que lo seas con las mojabragas que tienes como empleadas es suficiente. -Dije sonriendo y entrando en el coche-

-Dani: Pero esque yo lo quiero ser contigo, no con ellas. -Dijo mirándome frío-

-Yo: No me mires así. -Dije volviendo la mirada al frente-

-Dani: ¿Así como?

-Yo: Pues así de frío, como si...

-Dani: Como si qué -Dijo animándome a continuar-

-Yo: Pues como si no te importara la persona con la que estás hablando. -Dije mirándole-

Daniel me miró tiernamente y me sonrió.

-Dani: Yo ahora soy así.

Yo solo asentí. Daniel arrancó.

-Dani: ¿Por qué zona de Tres Cantos vives?

-Yo: Donde la heladería 'El Verdi'

-Dani: Muy bien.

Apollé mi cabeza en la puerta del coche y comencé a relajarme. Tanto que me quedé dormida.