Free me | zayn |

Capítulo 51

—Hum... Creo que sería buena idea dejar algo de espacio.

Lynn sacó un par de prendas de la maleta, les echó un segundo vistazo, evaluando si eran lo suficientemente importantes como para llevarlas o no. Volvió a meterlas dentro. Shazia, por otro lado, estaba tumbada sobre la cama de su amiga, observándola empacar.

—Siempre puedes comprar otra maleta.

—No sé si quiero gastar mi dinero en algo que ya tengo.

La morena se encogió de hombros.

—Te lo gastarías con el motivo de poder llevar cosas que aún no tienes. Además,todavía tienes mañana para pensártelo bien.

—Y que no necesite—puntualizó— pero somos seres débiles. Seguramente termine liquidando todo mi saldo en alguna estúpida cazadora de Saint Laurent cuando estemos en París, y terminaré comiendo el menú de dos libras en el McDonalds por el resto del año— se llevó las manos a la cabeza— Shazia, no quiero ir, voy a arruinar mi vida.

—Yo puedo comprarte esa cazadora si quieres.

—¿Qué? No, por supuesto que no.

—Bueno, en realidad sería Zayn— sonrió  con picardía— ¿acaso no te tienta obtener un regalo de la persona por la que trabajas horas y horas?

—No es mi jefe.

—Es el que se lleva el cheque de siete ceros. No creo que le importe.

—Hum... Visto desde ese punto de vista.

Llamaron a la puerta, y Dakota apareció con una revista entre sus manos y su pelo azul turquesa recogido en un moño.

—¿Se puede?

—Ya estás dentro— replica su compañera, que doblaba un par de tejanos— ¿qué quieres?

— Quería uh...— se acercó a Shazia—  sé que no es de mi incumbencia ni nada de eso, pero pensé que te interesaría leerlo— le tendió la revista, que estaba abierta por la mitad. Ignoró la mirada de advertencia de Lynn.

 Ella lo tomó, y leyó el titular.

—Perrie Edwards confiesa. ¿La verdadera razón de su ruptura con Zayn? 

  — No leas eso, Shaz. Esa revista está llena de mentiras— su amiga se sentó a su lado. Ella no le hizo caso, y comenzó a leer la entrevista. Cuantas más líneas leía, más se fruncía su ceño.

— Todo esto es mentira.

— Lo sabemos— apoyó Dakota.

— Yo no fui la causa de que cortaran, ¡ni siquiera estaban juntos cuando nos conocimos!

— Lo sabemos, Shaz. No pasa nada, de verdad.

— ¿Pero por qué mintió? No tiene sentido.

—Lo tiene. Es publicidad.

— No lo entiendo.

—Gran parte de la industria musical trabaja así, Shazia.— Explicó Dakota— los famosos venden mentiras para que la gente ponga su atención en ellos, causan drama para dar de qué hablar. Muchas veces no puedes creer ni lo que ellos mismos digan.

— Pero yo no soy famosa, no tengo nada que vender— arguyó— ¿por qué me mete en su problemas?

— Te lo acabo de decir, Shazia: drama.

— No tiene derecho.

— No, no lo tiene— Lynn pasó un brazo por sus hombros— pero no hay nada que puedas hacer. Nadie puede hacer nada. Lo mejor es ignorar esto, ¿de acuerdo? Dakota no debería de haberte enseñado esta basura.