Volvi a casa cuando oscurecia, el dolor se habia ya atenuado y me dieron calmantes en caso de emergencia.
Descanse toda la noche, y asi durante algunos dias en cama. André venia a verme diario, e incluso le dejaban entrar a mi habitacion-a pesar de que era mi prometido, no quitaba lo conservadora que era mi familia-, pero se limitaba a sentarse al borde de la cama, para no invadirme, como el decia. Quizas era la costumbre, el respeto o el temor... pero el estaba ahi y era lo que mas me importaba.
Estaba contenta, estabamos juntos en medio del silencio. Me agradaba eso de el, me hablaba con dulzura y cuando no lo hacia, el silencio era igualmente dulce.
Me habia traido presentes, cosas que nisiquiera habia tenido la intencion de ver. Cuando el estaba ahi, nada mas importaba, hasta el ambiente se transformaba, parecia un poco mas brillante, mas calido.
Aun estando alli, en la misma habitacion, le sentia lejos. Queria sentir su calor, solo un poco.
-Ven-Susurre, señalando la cama.
Me miro sorprendido, casi como si hubiera dicho algo inimaginable, algo tan malo, que tuviera avergonzarme de lo que habia dicho. Volvi a señalarle la cama. Lo era que sabia que no habia dicho algo malo, y aunque fuera asi, no sentia ninguna verguenza al respecto, ni la sentiria jamas.
Dubitativo se acerco a mi, apoyandose con cuidado, se recosto a mi lado sobre las cobijas, mirandome con ternura.
-Pensar que pronto despertare asi a tu lado.
Esa simple frase gatillo en mi un sentimiento de felicidad y ansias que golpeaban mi estomago.
Le mire aun unos segundos antes de poder reaccionar al hechizo que me imponia con su voz y sus actitudes de principe de cuento de hadas.
Me acurruque en su pecho, sintiendo como latia su corazon, la calidez que tanto necesitaba, la esencia de este hombre tan maravilloso que comenzaba a rodearme con sus fuertes brazos.
De pronto, mis labios buscaron los suyos y mis manos se enredaron en su cabello, sin rudeza, sin perversion, solo amor...
Me miro largo tiempo, mientras acariciaba mi mejilla.
-Estoy tan contento, pronto seras mi amada esposa.
-¿Señora de Accault?
Sonrio con diversion mientras besaba mis nudillos.
-La unica señora de Accault, el amor de mi vida.
Lo decia con amor, con devocion, con... la felicidad con la que se hablan los novios...
No supe como responderle, no era nada buena con las palabras. Si que me detuve a centimetros de sus labios para volver a besarlo. Estuvimos abrazados unos minutos, hasta que tuvo que irse a una reunion con los gerentes de las joyerias de su padre.
Nos despedimos con cariño, y le vi por la ventana mientras se acercaba a su auto en pasos largos y elegantes, sintiendo que una parte de mi se desprendia y se iba con el...Mamá me agobio con los planes para la boda que estaba mas que encima, era en dos semanas. Me perdi en el color ambar del te que sostenia entre las manos, mientras escuchaba las decisiones que ya se habian tomado, siendo informada de lo que tendria que hacer, donde debia estar, que debia sentir.
Aun era irreal estar en medio de planes tan grandes, tan maravillosos... pero estaba inmersa en algo que no sabia describir... mi propia burbuja que esperaba reventar ante todos aquel dia.
Cuando por fin me recupere por completo y pude patinar, me acerque a la pista con temor, con... exactamente con sensaciones que no eran mias. Pero... cuando entre y me deslice por el hielo, volvi a sentir la vitalidad, la energia, la efervescencia de sentirme hermosa y agil a la vez...
Salte, me movi, gire... hasta que senti la fatiga venir a mi, agotando cada uno de mis miembros.
Volvi a casa con pasos cansados y me sorprendi al encontrar a Rosa ahi.
Sonrio al verme con mis patines en mano, mientras me hablaba sobre el motivo de mi visita, saber de mi.
Mi entrenamiento se reabudaria en todo su rigor en dos meses mas, pero estaba libre de practicar y mas que sugerirmelo, Rosa me lo estaba exigiendo. En el siguiente semestre, habrian dos grandes competencias, que claramente intentaria ganar.
A pesar de mi gran descanso del mundo, pronto fui foco de revistas deportivas y otros asuntos, que no me agradaban para nada.
Tuve tres entrevistas pra revistas, una para television y mas de cinco sesiones de fotografias mientras patinaba. Lo hice sin especial gusto, ya que si bien no me agradaba del todo, el dinero que me daban iria directo a la cuenta de ahorro con la que compraria, bueno, muchas cosas, muchas para convertir aquel departamento en mi nuevo hogar.
Todos fue un colapso. Ir de aqui a alla, decidiendo en los detalles que aun quedaban de mi boda, que seria en... rayos ¡mañana!
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Huellas en el hielo
Teen FictionEl patinaje siempre ha sido mi vida... me encanta, me relaja, me... en fin, enserio adoro patinar. Mis padres siempre me dicen que soy una loca por no sociabilizar en la escuela, pero eso no es lo realmente importante...¡Solo quieren que me case ya...