Una mezcla de sentimientos, reprimidos por la razón, ahogados en alcohol, por el corazón.
Música y palabras que maquillan los moratones, hechos por la tristeza profunda, y esta, tan orgullosa de su obra.
Nado sin nadar en un mar de llanto, ando sin andar por un camino, oscuro y lleno de piedras.
Y no lo entiendo, ni el piano sabe consolarme ya, ni el papel tiene una palabra de cariño hacia mi, ni mi mente se engaña ya, señal de que ya no quiere vivir.
Y estoy perdida entre las olas, que el mar anega o levanta, arrastrando mi cuerpo hacia el hastío de mis horrores, mis más profundas pesadillas, intensos terrores...
¿Habrá alguien que me salve de este infierno? Por favor, que se dé prisa, noto que se me acaba la vida.
Enterradme en un cementerio vacío, pues vivo en soledad, y en soledad quiero morir.
Morir de soledad, morir sola, y sola por siempre estar.