La luz del sol que entra por la ventana comienza a despertarme, odio eso, pero al sentir los brazos de Jimin rodearme por la cintura recuerdo que ayer fue nuestra reconciliación y que no hemos vuelto a salir de la habitación más que a por algo de comer. Y volviendo a mi sentido común eso significa que he pasado la noche fuera de casa.
Cojo el móvil a la velocidad de la luz y me doy cuenta que he recibido diez llamadas perdidas de mi madre. Me asusto y maldigo, tiene que estar muy preocupada por mí y lo último que quiero es darle más dolores de cabeza del que ya tiene. Aunque por otro lado, me alegra saber que recuerda que existo.- ¿Qué pasa?- pregunta adormilado Jimin detrás de mi
- Mi madre me ha llamado varias veces, debe estar preocupada, no le avise de que me quedaría aquí, ni siquiera sabe donde estoy- digo mordiéndome el labio, Jimin se incorpora a mi lado y me besa la mejilla
- Pues llámala, dile que estas conmigo- dice tranquilamente
- ¿Flipas, no? ¿Cómo le voy a decir que pase la noche contigo? Mi madre es liberal pero ahora sabes que no estamos pasando por buen momento, además que esta muy extraña últimamente- digo haciendo una mueca- y en realidad no se que piensa de ti ahora, te esta muy agradecida pero...
- Esta bien- bufa- lo entiendo. Todavía no me he terminado de ganar a mi suegra- dice bromeando, yo le sonrío y me subo encima de sus piernas rodeándole por la cintura- Mm no me provoques- me susurra con la voz roncaYo río traviesa y le doy un pequeño piquito sensual, él ronronea provocándome una risa, Jimin me toma por el cuello para besarme más profundo, me acaricia la cintura y presiona su pene contra mí provocándome leves gemidos. Me separo de él antes de que llegue a más.
- No, quiero más- murmura sobre mi cuello
- Me tengo que ir
- Quédate un rato más.
- En serio mi amor, me tengo que ir- le digo levantándome. Noto su mirada en mi nuca y me doy media para verle- ¿Qué?
- Me has llamado amor- dice acercándose a mí con una sonrisa pícara- suena bien- Susurra sobre mis labios- muy bien... mi amor- dice por último antes de chocar sus labios contra los míos y me rodea por la cintura y sus caricias me hacen cosquillas
- Ya, déjame ir- le digo riendo
- No quiero- dice como un niño pequeño y me rodea por la cintura
- De verdad Jimin- le digo ahora más seria- mi madre se enfadará
- Esta bien- me suelta y se vuelve a la cama con los brazos cruzados, yo me visto rápidamente y me acerco a él para darle un beso antes de irme
- ¿Estas enojado?
- No
- ¿Seguro?
- Sí
- Entonces dame un beso
- No te lo mereces- dice aún con los brazo cruzados y sin mirarme, yo reprimo una risa
- Estas conversaciones suelen ser al revés ¿sabes?
- Me da igual- dice en la misma posición
- Esta bien, me voy- él solo se encoge de hombros, río por lo bajo y le beso, él no duda en responder pero después sigue igualSalgo de su casa con una sonrisa en los labios a pesar de su drama, ahora mismo me siento tan bien. Tan llena y feliz. Jimin logro que me olvidará del mundo, de mis problemas, de todo lo malo. Solo ha sido nosotros. Él y yo. Jimin y yo. Y así espero que siga... toda mi vida.