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Acompañamos a mi madre a la estación del tren. Siento una pequeña angustia y tristeza por el hecho de que es la primera vez que me separaré de ella. Esto me parece increíble. No puedo creer que la hayamos convencido. Que Jimin lo haya hecho. Y a pesar de que ella se va con una pequeña duda aún, me dejará quedarme, pero eso sí, me ha pedido que cualquier cosa no dude en ir con ella, y que siempre la llame, esa es su condición.
- Te echaré de menos, bebita- me dice abrazándome y noto como Jimin intenta ocultar su risa- Ya sabes, cuídate mucho, cualquier cosa...
- Y también te echaré de menos , mama.- la interrumpo sonriendo, ella coge sus maletas y despidiéndose de Jimin se marcha no sin antes mirar varias veces hacia atrás- ¡Eres malo!- le digo en cuanto mi madre esta lejos y él explota en una carcajada.
- Pero... ¿Por qué dices eso bebita?- dice burlón y le pego en el hombro mientras él ríe.
- Te odio- murmuro haciendo pucheros.
- Yo mucho más- dice tomando mi cara entre sus manos y besándome- ¿Nos vamos a casa?
- Si- dice sonriendo.No puedo evitar sentirme emocionada por comenzar esto nuevo junto a él, a pesar de que echare de menos a mi madre, por un lado pienso que hago mal, que debería ir con ella que me necesita más, ha pasado poco tiempo de la muerte de mi padre y yo ahora me separo de mi madre. Pero sé que esto es lo que necesito. Esto me hará bien y ella lo ha entendido. Así que al menos de momento todo esta bien.
- Jimin, ¿ya te has mudado?- le pregunto mientras lo veo entrar en el edificio delante de mi y que recuerdo a ver venido a ver antes de que él decidiera mudarse aquí
- Si, fue ayer por eso no te había dicho.
- Esta bien- digo sonriendo, subimos por el ascensor y en pocos segundos estamos ya entrando por la puerta de su casa, él deja las maletas en el suelo y me rodea con sus brazos por la cintura
- ¿Quieres que estrenenos juntos el piso?- me pregunta pícaro y baja sus besos por mi cuello.
- Mmm Jimin... esta noche- le digo seductora separándome de él.
- ¿Por qué no ahora?
- Porque quiero organizarme- digo separándome de él- ¿Dónde esta la habitación?- él me mira enarcando una ceja.
- ¿Quién ha dicho que dormirás conmigo? - yo lo miro confusa- ¡Ni hablar! Te aprovecharás de mi.
- ¿Perdón?- digo riendo
- Pues eso, me violarías. No resistirías ni una noche, si definitivamente me violarías cada noche- dice fingiendo estar afligido y yo suelto una carcajada
- Oh... ¿y no quieres que te viole un poquito cada noche?- le digo seductora acercándome a él y niega con la cabeza- Mmm ¿seguro?- digo y le muerdo el lóbulo de la oreja provocando que se estremezca, acaricio su miembro por encima del pantalón y él gime en mi cuello- Pues que pena- digo separándome de golpe de él y riendo al verlo con los ojos cerrados y ya excitado- Tú te lo pierdes - digo y cogiendo mi maleta me voy en busca de la habitación, cosa que no resulta difícil pues el departamento es pequeño.Mientras me hago un hueco en el armario siento los brazos de Jimin rodearme y pegarse a mí haciendo que sienta su erección y reprimo las ganas de reír. ¿Yo he provocado eso con tal solo una caricia? Pues esta convivencia será muy interesante.