Jimin
Al fin decidió volver a casa, después de sentirme lo suficientemente tranquilo después de lo que me confeso ______. Vuelvo con la idea de hablar las cosas tranquilamente con ella, de explicarle porqué se debe de andar con cuidado, y que por más simpática que resulte ser Ana, uno nunca debe fijarse al 100% de nadie.
Pero ella me recibe con un bombazo peor y que me deja noqueado. Se ha citado con mi madre. Me siento en el sofá mientras ella me mira mordiéndose el labio con temor a mi reacción, suspiro profundamente, para no gritarle y decir cosas de las cuales arrepentirme luego.
- ¿Por qué lo has hecho?- le pregunto con rabia contenida
- Yo solo... quiero ayudar.
- ¡¿Ayudar a qué?!
- Jimin, no te alteres- me pide- a pesar de que lo niegues, que te hagas el duro. En el fondo la echas de menos, ella es tu madre.
- No. Pensé que me entendías, que podía confiar en ti, cuando te conté mi historia no fue para que un tiempo después te vayas a citar con ella, ¿para qué? ¡¿para decirle qué precisamente, ah?!
- Por favor- susurra ella- no lo pensé en ese momento, yo creo que es hora de que os reconciliéis.
- ¿Y tu quien coño te crees que eres para decidir eso? - le grito- ¡que parte de que no quiero saber de ella no entendiste!
- Mientes ¡te mientes a ti mismo! Tienes años haciéndolo- grita ella- y ella... yo solo quiero saber su punto de vista, solo quiero saber su historia.
- Ya te la conté yo: me cambió por mi supuesto padre. Fin. - le digo cortante
- Jimin...
- ¡Jimin, nada! Además, ¿Quién se supone que eres para que tengas que andar queriendo saber las versiones de la historia? ¿es que no crees en la mía?
- ¡Claro que si, mi amor!- dice intentando acercarse a mi, pero retrocedo varios pasos.
- Entonces, ¿que te andas metiendo en esto?
- Ella es mi suegra a pesar de todo... yo quiero conocerla. - yo me levanto del sofá y doy vueltas por la cabeza intentando tranquilizarme, resoplo varias veces y termino parándome delante de ella y bufo burlón.
- No solo tengo suficiente con tener al puto de Martín esperando el momento justo para joderme, sino que tú, a la nenita ahora se le antojo andar con quien no debe y en lo que no debe. Y encima, le apetece conocer a su suegra, esa que abandono a su hijo por un hombre. - escupo realmente molesto- dime ¿hay alguna mierda más que deba saber? - ella se queda callada y agacha la cabeza.
- Tengo derecho, soy grande Jimin, no quieras tratarme como a una tonta niña ahora mismo- dice despacio, yo vuelvo a bufar
- Ahora mismo me lo pareces.
- Pues lo siento, pero ahora mismo es lo que quiero hacer, ahora es lo que soy- dice tajante, yo me río sarcástico.
- Ay, que la nenita se reveló ¿no?- digo burlón
- Jimin... estas siendo cruel.
- ¡No! Tú lo estas siendo, en el momento en el que decides hacer lo que se antoja, en el que momento que decides meterte en este tema que es tabú para mi, que esta cerrado y que se trata de mí vida. Tú lo estas haciendo intentando revivir todos esos putos momentos que pase- le grito por último.
- ¿Estoy siendo un estorbo, entonces?
- ¡Si!- le grito sin pensarlo- no lo has podido decir mejor, si hubiese sabido, nunca en la vida hubiera dejado que te quedases conmigo. Porque eres un puto estorbo ahora mismo - le termino gritando sofocado, y cuando veo sus lagrimas bajar sin parar por las mejillas me doy cuenta del grave error que acabo de cometer.