Jimin
Después de haberle insistido a Roberto en que intentará recordar cual era el plan, él seguía diciendo que solo alcanzo a escuchar pedazos sin sentido, escucho mi nombre varias veces y el de _______. Y ahora me pregunto si es buena idea que se quede.
- No es mala idea, en realidad- dice Roberto mientras me ayuda a acomodar la televisión plasma en mi nuevo departamento, ahora más que nunca me urgía salir de allí.
- ¿El qué?- le pregunto confuso, pues hace rato estamos en silencio
- Lo de que ella venga a vivir contigo. Quiero decir, en las películas el chico siempre se aleja de la chica pensando que así la protegerá, pero al final lo que le deja más desprotegida, y más acceso al malo de pillarla. - dice como respuesta a lo que le conté antes sobre que ella se quedase conmigo.
- ¿Tú eres tonto?- digo enarcando una ceja, él rueda los ojos- ¡como vas a comparar esto con una película!
- Ya se, es algo tonto. Pero en realidad tiene sentido. Lo que quiero decir, Jimin, es que si Martín quiere hacerle daño para joderte, encontrará la manera, así ella se vaya al otro continente.Me quedo callado sin saber que decir, con solo pensar que él quiere hacerle daño me hierve la sangre y me congelo al mismo tiempo. No entiendo que demonios tiene ella que ver esto, ¿Por qué? Esto no es una maldita película en la que hay que ir a por la chica. Pero veo que a Martín le gusta jugar sucio.
Me despido de Roberto después de terminar de instalarme, me voy a la cama cansado, pero no pego ojo. No paro de pensar en que voy a hacer con esto. ¿Cómo cuidaré de nosotros dos? Antes de saber esto estaba emocionado con la idea de que su madre la dejase conmigo. Pero ahora... no estoy seguro. ¿Qué pasa si Martín consigue saber donde estoy ahora y viene aquí? Yo no temo por mí. Pero si por ella.
Las constantes llamadas en el móvil terminan por despertarme, miro que solo son la siete y media de la mañana y tengo más de cinco llamadas perdidas. Cuando veo que se trata de ______ me incorporo en la cama y la llamo enseguida. Y a regañadientes, termino por levantarme de la cama cuando ella me pide ir a su casa ahora mismo, aunque también tengo curiosidad de saber de que se trata. En cuanto llego una media hora más tarde, ellas ya están esperándome.- Hola- saludo lo más despierto que puedo- He traído desayuno- digo enseñando un bolsa con la marca de Rodilla, donde me paré antes para pedir unos bocadillos y café. - ¿Queréis?
- Gracias, cariño- dice _____ acercándose y dándome un beso corto en los labios
- Que amable- comenta su madre- Pero ya hemos desayunado, gracias.
- Bueno...- digo rompiendo el hielo, pues el silencio nos invadió mientras _______ seguía rodeándome con sus brazos por la cintura
- Sentaos chicos. Quiero hablar con vosotros. - dice su madre, ambos les hacemos caso. - No se si estoy haciendo lo correcto. Pero quiero que al menos tengáis claro ciertas cosas- ambos asentimos, aunque no termino de seguirle el hilo- El tren sale en dos horas. Y antes de que venga la sueña de la casa a por las llaves, quiero hablar bien con vosotros.
- Mamá, ve al grano- le pide
- Bueno, lo primero ¿sigues con esa idea Jimin? - siento la mirada de ambas sobre mí de forma intensa, no se que decir. Quiero... pero es peligroso. _______ me mira sonriendo esperando que diga que si, y simplemente no puedo negarme ahora.
- Claro- me limito a decir y ella me besa en la mejilla
- Bueno, antes de decidir- continua su madre- Sabéis que la convivencia es difícil. Que no todo es color rosa siempre, que tú aun eres menor de edad, _____ y Justin tendría que ser como tu tutor hasta que cumplas la mayoría. Y eso, Jimin, es mucha responsabilidad. Tenéis que pagar casa, luz, agua, gas... son muchas cosas y vosotros sois muy jóvenes. Así que realmente no se si es buena idea o estamos pensando a lo loco y de forma precipitada.
- Yo cuidaré de ella.- le digo
- Jimin...
- Yo trabajo, señora- le miento a medias, ella me mira con el ceño fruncido
- Tengo 19 años. Sé que soy joven, y _____ mucho más. Pero no somos la primera pareja que se muda juntos tan pronto, además, mientras yo trabaje todo estará bien. Y ella podrá seguir estudiando y buscarse un trabajo a tiempo parcial. - ella parecía querer objetar- ella tiene que crecer, tarde o temprano tendrá que trabajar e irse de su lado ¿no?
- Si. Pero no con 17 años- dice preocupada
- Me acabo de mudar a un estudio, esta bien para nosotros dos y es muy económico. Le puedo asegurar que ella no pasará hambre, ni frío.
- Puede que no, pero aun así... no estoy segura.
- Mamá- interviene _______ - Esto me haría feliz. - murmura mirándola con cara de cachorro- Todo estará bien. Prometo llamarte cada día.
- ¿Y si las cosas van mal?
- Bueno, lo solucionaremos.- digo- Yo... estoy muy enamorado de ella. Y la protegeré con mi vida si hace falta- digo y sé que ha sido una promesa echa más para mi mismo, que para ella.