Don't deserve you. (Editando)

Capítulo 37

El juicio había comenzado, Elizabeth estaba sentada en un sillón al igual que Robb, Tyrion, Petyr Baelish y otros miembros de la corte, todos junto al Trono de Hierro, donde Jon se encontraba. Estaban rodeados de soldados de la Guardia Real, el acusado se encontraba a unos metros, encadenado de manos y pies. Llamaron al primer testigo al jurado, Sandor Clegane. Él la había salvado la primera vez que Kalem había intentado secuestrarla, y le dijeron que habría sido uno de los guardias que lo capturaron cuando apuñaló a Jon. No recordaba haberlo visto, pero de todos modos, no recordaba haber visto nada más aquella noche ademas de la sangre de Jon que brotaba de su cintura.
-Su nombre, por favor. -Dijo Tyrion.
-Sandor Clegane. -Respondió este con voz ronca.
-¿Jura por todos los dioses, antiguos y nuevos, que su testimonio será verídico?
-Lo juro.
-¿Usted fue uno de los que capturó a este hombre? -Preguntó Tyrion.
-Sí, así fue. -Kalem miró con odio a Sandor y luego sus ojos se posaron en Elizabeth.
-¿Usted lo conoce?
-No, no lo conozco. Sólo lo capturé.
-De acuerdo, ¿Hay alguien en esta corte que conozca a este hombre? -Preguntó Tyrion pero no obtuvo respuesta. -Muy bien. ¿Usted conoce a alguien en este tribunal? -Dijo esta vez dirigiéndose a Kalem.
-Sí. -Dijo y a Elizabeth sintió una corriente helada bajar por su espalda. -Esa mujer de ahí me conoce. -Señaló a Elizabeth.
-Esa mujer es su reina. -Dijo Lord Baelish. -Le sugiero que la trate como tal.
-Esa mujer de ahí es Elizabeth Sarsfield. Ella sabe quién soy. -Dijo con odio, todos los ojos se posaron en Elizabeth.
-¿Su alteza tiene algo para decir? -Preguntó Tyrion.
-Su nombre es Kalem. -Dijo Elizabeth mirándolo con odio. -Él intentó secuestrarme y asesinar al rey. - Comenzaron a escucharse fuertes murmullos de toda la gente en la corte.
-¡Silencio!-Sentenció Jon, era la primera vez que hablaba durante el juicio.
-¿Cómo se declara frente a estas acusaciones? -Preguntó Tyrion a Kalem.
-Sólo soy culpable de una cosa. -Dijo Kalem y dirigió su mirada a Elizabeth. -Amar a una mujer sin corazón, y arriesgarlo todo por ella.
-Intentaste asesinar a mi esposo. Tu "amor" casi nos cuesta la vida del rey, sin contar la mía y de mi hijo. - Dijo Elizabeth y sus ojos se cristalizaron.
-¡Yo te amaba! -Gritó Kalem parándose de repente. -¡Tu padre me negó tu mano! ¡Y ese hombre me robó al amor de mi vida! -Dijo señalando a Jon.
-¡Tranquilicen al acusado!- Grito Lord Baelish.
-Y lo haría de nuevo. Los mataría a todos. ¡Hasta al último de los imbéciles presentes en esta sala! -Dijo Kalem mientras los guardias lo sostenían. - ¡Mataría a todos los reyes del mundo si significara tenerte Elizabeth! ¡A todos!
-¡Llévense a este hombre ahora mismo! -Gritó Jon lleno de ira. - ¡Encadénenlo y enciérrenlo en una celda! -De inmediato se llevaron a Kalem a rastras, gritando y pataleando. Jon dio la vuelta y se fue rápidamente, tanto que Elizabeth no podía seguirle el paso con su enorme vientre.
-¡Su alteza por favor no corra! -Gritó una doncella que venía persiguiéndola, con un estómago como ese moverse tan bruscamente era un peligro.
-¡Jon! -Gritó Elizabeth intentando que su esposo se tranquilizara, pero no servía de nada. Jon golpeó con el puño una puerta de madera, haciendo un hueco en esta.
-¡Maldito hijo de puta! -Gritó Jon.
-Mi amor tranquilízate. -Dijo Elizabeth preocupada.
-¡¿Cómo quieres que me tranquilice cuando ese hijo de puta dice que hará todo por llevarte?! -Jon estaba furioso, los ojos de Elizabeth se dirigieron a la mano con la que había roto la puerta.
-Estás sangrando. -Dijo mirándolo. Jon levantó su mano, estaba morada y cortada, -Por favor, trae a alguien para curar esa herida. -Dijo Elizabeth dirigiéndose a la doncella que se encontraba parada en una esquina, esta asintió y fue rápidamente.
-No es nada. -Dijo mientras Elizabeth tomaba con cuidado la mano herida de Jon entre las suyas. -Lo siento, no quise asustarte. -Echó un suspiro cansado.
-Lo sé. No han sido tiempos fáciles.
-Yo debería protegerte, a ti y a nuestro hijo. -Dijo pasando su mano sana por su cabello. - Y todo lo que he hecho ha sido traerte problemas e infelicidad.
-¿De qué hablas Jon? -Preguntó incrédula. -Tú recibiste una puñalada por mí. Casi mueres por mí. -Dijo con sus ojos llenos de lágrimas.
-Y lo haría un millón de veces más.-Dijo Jon acariciando su mejilla.-Pero aún así debí haberte protegido mejor, no debí dejarte sola nunca. -Dijo y Elizabeth negó con la cabeza.
-Haz hecho todo lo posible y más por mí. Eres el amor de mi vida, y no podría ser más feliz de lo que soy contigo Jon. -Dijo acercando su rostro al de él. -Te amo, jamás lo olvides.
-Te amo más que a nadie en este mundo. -Dijo Jon acercándose más a ella, besando suavemente sus labios.