Capítulo 5

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Tres días pasaron, Elizabeth había evitado de todas las maneras al rey, ahora desayunaba junto a Lady Rosemary en los jardines reales, se llevaba muy bien con ella, a decir verdad era la única amiga que tenía en este lugar. Sería una pena cuando marchase, pero sabía que se escribirían.

—Lady Elizabeth Sarsfield, ha llegado una carta para usted. —Dijo un joven, de unos 17 años.

—Muchas gracias. —Extendió su mano y tomó la carta.

Estaba sellada a nombre de Lord Sarsfield, su padre. Estaba tan preocupada que había olvidado escribirles.

Al llegar a su habitación, y luego de prometerle a Lady Rosemary que pasarían la tarde juntas e irían al pueblo, abrió la carta y comenzó a leerla.

    Querida Effy:
                                  Hija mía, ¿Cómo has estado? No hemos recibido ninguna noticia de ti y tu madre y yo estamos muy preocupados. Por favor vuelve, no importa si somos invadidos por los Lannister, no soporto estar sin tener novedades de ti. Necesito saber que estas bien. Necesito saber como esta mi tesoro más preciado, no importa cuantos años tengas, ni cuan viejo yo este, para mi siempre serás mi niña pequeña. Con todo el amor que puedo profesar.
                         Tu padre.

Elizabeth se quedó perpleja unos segundos.

¿Acaso el acecho de Lord Tywin Lannister seguía en pie? ¿El rey Jon no había cumplido su parte del trato?

Se paró inmediatamente y comenzó a buscar al rey. Un guardia la guió hasta una habitación, anunciando que Lady Elizabeth solicitaba hablar con él. La dejó entrar, él se encontraba sentado en un escritorio, bebiendo una copa de vino y ocupado en algunos asuntos. Elizabeth golpeo la mesa con la mano con la que sostenía la carta que le había enviado su padre, depositándola allí.

—¿Qué significa esto? —Dijo ella, cada vez sentía más ira.

—Creo que es una carta, dirigida a ti por lo que veo. No sabía que te llamaban Effy.—Respondió en tono burlón, él sabía de que hablaba.

—Sólo lo hacen mis seres amados, conversación para otro día. —Contestó en tono desafiante. —¿Porqué las tierras de mi padre siguen siendo asediadas por Tywin Lannister? ¿Acaso no ibas a enviar una carta?

—Iba a hacerlo, pero no lo hice.—Elizabeth estaba atónita, ¿La había engañado?

—¿Porqué? Hicimos un trato y cumplí con mi parte.

—Verás, Elizabeth. —Dijo mientras se levantaba de su asiento y caminaba hacia ella. —No he quedado satisfecho con el trato.

—¿Eso que significa? —El rey rió, esto hizo que Elizabeth se incomodara e incluso sintiera algo de miedo.

—Significa que te deseo. —Dijo mientras se acercaba aún más, Elizabeth retrocedió hasta chocar contra la pared.

—¿No enviarás la carta?

—La enviaré, si accedes quedarte conmigo.—Estaban a centímetros de distancia, ella podía sentir su respiración y el calor bajo su fuerte pecho.

—¿Cuánto tiempo?

—Hasta que yo lo diga, luego te buscaré un buen esposo y te dejaré ir tranquila.— "Sere la puta del rey" Pensó.

—¿Y si no lo hago?

—Si no lo haces, o si algún día se te ocurre decirle a alguien lo nuestro, enviare mi ejército junto con el de Tywin Lannister a destruir tu casa. —Los ojos de Elizabeth se abrieron como platos.

Don't deserve you.  (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora