Cuando hablo de ti mágicamente se me sale lo poeta, se me nota lo enamorada y me duele el corazón.
Yo se qué de cualquier manera y a cualquier hora te quiero siempre, como solamente yo te se querer.
Te hecho de menos mi amor, qué enciendo tu risa en el televisor,
Apago la luz y te imagino en mi habitación.
Estamos tan cerca qué apenas nos vemos.
A veces puedo sentir tu pelo rosandome las pestañas y te juro eres tu rondando por la casa.
Es tu voz la qué me duerme, y he tenido tanto insomnio desde qué te fuiste.
¡Me olvidaste! Regresa por mi, amor mío, llevame contigo... o al menos dime como te olvido.
Aunque se qué no quieres que lo haga... yo sé, querida, qué tu tampoco me olvidas y qué te duelo aún, porqué te siento cercana como esta herida.
No... no existe una manera de explicar lo qué siento...
Y sólo existe un manera de sentirlo, y es así con este dolor...
Pero pase lo qué pase quiero decirte, qué me encantó conocer tu calor y sentir tus besos tan míos..., espero qué algún día nos crucemos y volvamos a ser, no lo mismo, si no algo mejor, algo que dure un poquito más qué esto,
Para dejar poesía a la descendencia y querernos hasta perder la paciencia, decencia y esencia.
Desde el cielo, en la primera cita te recita, tu más grande amor,
El roto y poeta.
Yo...
