Qué no puedo parar de llorar, y no es por tu culpa, pero es por ti.
Y qué mis manos heridas y rotas sangran y no es por tu culpa pero es por ti.
Y mis labios secos se quiebran con cada hilo de voz que sale, y no es por tu culpa, pero es por ti...
Porqué no tienes culpa de ser tú quién me tenga aquí tan ciegamente enamorada, pero es por ti qué lo estoy.
Yo no culpo a nada excepto tus besos porqué fueron esos lo qué me enviciaron a ti, pero no es tu culpa... es por ti.
Y es por ti también qué aquí sigo, queriendote mientras tu no estas conmigo.
Y no es tu culpa, pero es por ti...
Amor mio ¿Como fue qué terminé así? Después de todo, creo que está bien, sufrir, llorar, recordar y extrañar, y no todo por tu culpa...
Pero si por ti.