Pasiones Prohibidas

Capítulo Especial

Aquí una especie de epílogo y final alternativo narrado desde otra perspectiva, en otro contexto y tiempo.

Pueden escoger quedarse con aquel final crudo y realista o tal vez dejarlo a la imaginación y a la expectativa...

***

Tres años después...

Me desperté confundida y algo aturdida por los agudos sonidos que soltaba la alarma, mire a mi alrededor y vi la pequeña habitación iluminada por la escasa luz que se adentraban por la persiana. Me levante sin gana, busque mi bata ya que en Nueva York el clima te obligaba a buscar prendas que te propiciarán un poco de calor, la mañana estaba silenciosa y fría, como de costumbre.

Camine hacia la cocina y encendí la cafetera, me quedé unos minutos mirando hacia el mesón intentando no pensar en nada en absoluto y así era mejor, prefería evadir la realidad a enfrentarla.

Me había propuesto a empezar de nuevo, dejar mis pecados, mis errores y mis dolores en el pasado, no mover esos recuerdos que dolían, debía seguir adelante, era muy joven y tenía mucho por vivir; me concentré en mis estudios, después de pasar un año en Berlín donde fui el foco de atención de toda la ciudad, donde las personas me miraban con lástima y pesar tras ser el tema principal en las noticias y las habladurías de la gente, donde vivía atormentada y agobiada día a día, tome la repentina decisión de venir a NY a terminar mi carrera, no podía seguir en aquella ciudad donde nací, crecí, viví los mejores años de mi vida y perdí todo.

Nadie logró convencerme de quedarme, ni mi abuela, ni mi papá, ni siquiera Toby quien me brindó su apoyo incondicional a pesar de haberlo herido de la peor manera, solo él sabía todo lo que había ocurrido, me había podido desahogar y eso me hizo un gran bien, él no me juzgó y estuvo a mi lado, fue una gran motivación para mí. A Tom no volví a verlo en mucho tiempo, escuche a mi familia maldecirlo innumerables veces, yo misma lo hacía también en mi interior pero sobretodo lo que más me dolía era que a pesar de lo ocurrido lo seguía amando... ¿Cómo podía ser eso posible?

¿Cómo amar al hombre que te destruyo la vida?

¿Acaso el amor puede llegar a ser tan fuerte?

Si, tal vez si.

Habían pasado años desde aquel día, soporte mucho dolor, me juzgue a mí misma, me considere la principal asesina porque aunque no hubiese sido yo la que disparo, yo la había llevado a hacerlo, la traicione y de qué manera... Con el hombre que ella más amaba.

Ahora, a pesar de seguir adelante llevaba un gran vacío en mi interior, la ausencia de mi madre me pesaba como si llevara un crucifijo en la espalda, solo imaginarme su rostro hacia que mi alma quebrantada se rompiera aún más, todos los días pasaba algo que quería compartir con ella, la veía en sueños, quería que se escapara del lugar donde estuviese, viniera y me acunara entre sus brazos como lo hacía de pequeña, no sólo dolía la causa de su muerte sino su abandono. Ya no estaba y por más que rogara porque viniese, jamás lo haría.

No ayudaba en lo absoluto recordarlo a él, una parte de mi quería tenerlo cerca, que fuese él quien me apoyara, quien secara mis lágrimas, quien me dijera que todo estaría bien pero la vida no me lo permitió, contradictoriamente cuando mi madre murió yo quería que fuese él quien me consolará y no los demás, pero mi familia le prohibida acercarse, me dolía no poder verlo, no poder hablarle, tampoco intente buscarlo jamás, no era tan fuerte o valiente, solo esperaba que algún día viniese por mi y me llevase lejos, a algún lugar donde jamás pudiesen encontrarnos, donde el pasado ni las culpas existiesen, donde pudiésemos ser felices juntos...