Una casualidad tras otra.

Capítulo 34.

(apartamento de Iria y Xandra, narra Xandra)

Iria y yo hablamos mientras hacemos las maletas. Chocamos todo el rato dado el poco espacio que hay en nuestro cuarto compartido.

- Desde luego no voy a echar de menos este edificio.- Dice Iria.

Al final hemos acordado con los chicos que pasarían el día de navidad con sus respectivas familias, pero que vendrían a Galicia el día 27 de diciembre, y todos nos quedaríamos hasta el 3, cuando tendríamos ya que marcharnos todos para organizar las cosas para la vuelta a la universidad.

Maya es la única que pasará con nosotras todas las navidades, ya que su familia la dejó venirse a Galicia con nosotras mañana. Se quedará en casa de Alina durante el tiempo que esté allí con todas, ya que las dos están acostumbradas a vivir juntas.

Todos los chicos están ya avisados, aunque tuvimos que llamar nosotras a Álvaro, porque Alina, no sabemos por qué, no se lo ha dicho.

De hecho ayer a la noche me mandó un mensaje diciéndome que ya ni siquiera le apetecía ir.

¿Qué le pasará?

De hecho ella era la única que quería ir, ya que Iria prefería quedarse estudiando y yo no quería ir por miedo a encontrarme con él. Sin embargo, ahora que va a estar Carlos a mi lado me siento un poco mejor.

(Alcalá de Henares, narra Alina)

Estoy en mi cuarto, en mi apartamento, tumbada sobre la cama.

Hace unas horas que me fui del parque.

Después de que Álvaro me dijera que tenía novia, solo tenía ganas de llorar. Quería llorar, y correr, y alejarme de él todo lo posible, o pegarle una bofetada y hacerle entender lo mal que me lo hace pasar ¿Por qué no es capaz de ver que me gusta? Y sin embargo, me quedé allí, escuchándole hablar sobre su nueva novia, Carlota. Me enseñó fotos, y mensajes entre ellos. Me contó que habían empezado a salir hacía unos días. Tuve que fingir que todo iba bien, y que estaba muy feliz por ellos. Ahora cuando lo pienso me entran ganas de vomitar.

Cuando por fin Álvaro se despidió de mí, alegando que había quedado con Carlota, su nueva novia, por fin pude llorar todo lo que quise. Me quedé en ese banco, en nuestro banco, sentada, sola y con el corazón roto.

Hasta que...

...............................Flashback...........................

- Eh, Alina.- Alguien me toca el hombro. Levanto la cabeza y lo veo.

- ¿David? ¿Qué haces tú aquí?

- Tú me llamaste ayer, ¿Recuerdas? Me dijiste que viniera porque tenías que contarme algo.

Cierto, tengo que preguntarle si le gustaría pasar las navidades con nosotras. Y con todo lo de Álvaro a él no se lo dije. Pero ya me da igual, no me apetece ir, no quiero ver a nadie.

- Vamos ¿Qué te pasa? No llores.

- No es nada, en serio.- Me seco las lágrimas. Álvaro me pidió que como Carlota solo era su novia desde hacía unos días, no quería contárselo todavía a nadie por si acaso no funcionaba, así que yo era la primera y única persona que lo sabía de momento.- Es que a veces me pongo más sentimental de lo normal, solo eso. Pero ya se me ha pasado.

- ¿Estás segura?- Me pregunta David. Sé que no me cree, pero al menos no insiste. - Bueno ¿Entonces qué es lo que me ibas a decir?

Aprovecho el cambio de tema para contarle lo que teníamos pensado hacer en navidades, y él encantado acepta.