Una casualidad tras otra.

Capítulo 57.

(apartamento de Xandra y Blas, narra Xandra)

Me levanto a la mañana siguiente con el sabor de la piel de Blas sobre mis labios. Me hago una coleta deshecha y me levanto. Blas todavía sigue dormido, lo que es casi un milagro, así que por una vez me decido a tener un gesto bonito con él. 

Voy hasta la cocina y caliento café. Lleno dos tazas y las llevo hasta nuestro cuarto, dejándolas apoyadas en su mesilla de noche. Vuelvo a meterme en la cama junto a él y acercándome a su cara, comienzo a darle besos por el cuello, subiendo y acabando en su boca.

- Ojalá así todas las mañanas.- Susurra entre mis labios.

- Te he hecho café. - Le digo subiéndome sobre él y cogiendo una de las tazas de la mesilla. 

- Vaya, ¿Y todas estas atenciones hoy?- Hace una pausa mientras se incorpora y le da un sorbo al café. - ¿Tan bien estuve ayer?- Responde sonriéndome pícaro. Yo le pego en el brazo recordando la noche pasada.

- Cállate. - Le saco el café de las manos y bebo yo. Hace ademán de protestar, pero yo dejo la taza sobre la mesilla y cierro sus palabras en un beso.

(apartamento de Alina y Maya, narra Maya)

Me despierto con algo de resaca. Tengo que dejar de beber siempre. 

Carlos sigue dormido, así que le doy un beso en el pecho antes de salir del cuarto. Por lo visto soy la primera en levantarme. Voy hasta la cocina y busco el pan para hacer tostadas. De pronto escucho cerrarse la puerta de uno de los cuartos. Espero a que Alina entre en la cocina, pero en vez de ser ella, es el mismo chico del otro día, aunque esta vez con pantalones. Siento como si estuviera viviendo un déjà vu.

- ¡Eh, tú!- Le digo, llamando su atención.

- Ho... hola.

- ¿No estarás saliendo con mi amiga? Porque si esto va a hacerse costumbre, deberíamos mantener una charla...

- No, no, yo no.

La puerta de la cocina vuelve a abrirse y esta vez es Carlos quien entra bostezando.

- ¿Quién es este tío? - Me pregunta abriendo mucho los ojos.

- Un viejo amigo de Alina.- Le respondo divertida. Justo en ese momento ella entra también en la habitación. - Mira, que te lo explique ella.- Digo soltando una carcajada.

- Alina, ¿Qué...?- Empieza Carlos, pero ella saca a Hugo de la cocina y no deja a Carlos seguir.

- Ya se va.- Responde, a modo de disculpa.

Le da un corto beso en los labios antes de que salga por la puerta, y después cierra a toda prisa.

- No quiero risas, ni miraditas, ni bromas.- Responde volviendo a meterse en su cuarto.

Carlos y yo estallamos en carcajadas.

(apartamento de Iria y Esther, narra Iria)

Aparto el brazo de Dani de mi cintura y me levanto del sofá despacio. Voy hasta la cocina y enciendo la cafetera, después me meto en el baño y me doy una ducha para acabar de despejarme. Al acabar, me meto de puntillas en el cuarto que comparto con Esther y cojo una muda limpia.

Vuelvo a la cocina y me sirvo una taza de café muy caliente. Un ruido me sobresalta a mis espaldas y cuando me giro, veo que es Esther que se frota un ojo mientras se sienta.

- Buenos días.

- Buenos días.

- ¿Te sirvo un café?- Ella asiente y yo saco una taza del armario.- ¿Qué tal anoche?

- Bien...- Responde distraída.- Yo... bueno, quería disculparme por no haberte avisado de que David se quedaría a dormir.- Da un sorbo a su café.- No has dormido en tu cama.

- No. No quería molestaros a David y a ti y compartí sofá con Dani.

- No sabía que se iba a quedar.

- Ni yo hasta que se lo dijo a Jorge.- Ambas soltamos una carcajada.

- Creo que está un poco celoso.

- Yo también lo creo.

Hago ademán de sentarme en la silla al lado de Esther, pero alguien entra corriendo en la cocina y me abraza levantándome del suelo. Yo grito de la sorpresa y cuando me deja en el suelo, miro sonriendo a David.

- Vaya, parece que alguien se ha despertado de buen humor.- Bromeo.

- No lo sabes tú bien.- Me vuelve a abrazar y luego le da un beso en los labios a Esther.

- Creo que me he perdido algo.- Los miro interrogante. Esther baja la cabeza y David no cabe en sí de la alegría.

- ¡Esther y yo estamos saliendo!- Exclama a gritos. Yo me quedo boquiabierta mientras ella sonríe tímidamente y se pone colorada.

- ¡Eso es genial!- Les felicito.- Me alegro mucho por vosotros.

Voy a decir algo más, pero me interrumpo cuando veo a Dani entrar en la cocina vestido únicamente con su ropa interior. Me sonrojo al instante mientras aparto la mirada.

- ¿Y todo este jaleo?- Dice a modo de saludo dándome un beso en los labios.

- David me estaba contando que él y Esther están juntos.

- ¡Tío por fin te has lanzado!

Dani le da una palmada en el hombro y los dos se van al salón. Esther y yo nos quedamos solas, mirándonos la una a la otra.

- Me alegro mucho por ti.- Rompo el silencio.- David es un buen chico y además hacéis buena pareja.

- Gracias.- Sonríe enseñando unos perfectos dientes blancos.

Los chicos, aunque los invitamos a comer, se marchan un poco después junto con Esther, que hoy tiene trabajo en la emisora de radio. Yo, cogiendo todos mis apuntes, estudio para ya los últimos exámenes de este curso.

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Hola, hola! Por fin es viernes y aquí os dejamos un capítulo cortito cortito pero con la promesa de que el de la semana que viene será importante, interesante y más largo :D

No hay mucho que decir, muchísimas gracias por el apoyo ¡sois geniales! Esperamos ansiosas vuestros votos y comentarios :)

Hasta el viernes!

Mucho besos ^^