Una casualidad tras otra.

Capítulo 35.

(Apartamento de Carlos, narra Dani)

 Hoy es 5 de enero. Blas nos ha pedido a todos por WhatsApp que quedemos juntos ya que tiene algo importante que decirnos. Ya estamos todos reunidos en casa de Carlos esperando a que hable.

- Yo sigo sin entender por qué habéis tenido que venir todos a apalancaros a mi casa...- Dice Carlos.

- Bueno, creo que tengo que contaros algo. Necesito vuestra opinión sobre un tema importante.- Dice Blas pasando de él.

Yo me tenso en mi asiento. Creo que no quiero oír lo que va a decir.

- El otro día, en navidad, Iria y yo nos besamos.- Todos empiezan a aplaudir y a silbar haciendo el idiota menos Carlos y yo. Carlos mira a Blas como esperando a que continúe y yo solo quiero morirme. -No sé muy bien cómo fue, pero bueno, pasó y ella me gusta, aunque creo que eso ya lo sabíais antes, ¿No?- Dice sonriendo. Quiero pegarle un puñetazo en la cara para hacer que se calle. Quiero pegarle hasta no sentir mis manos.

- ¿Y qué es lo que nos quieres decir?- Interviene Carlos.

- Voy a pedirle salir mañana, cuando nos veamos todos ¿Creéis que dirá que sí?

- ¡Claro, tío! Si os besasteis será por algo ¿No?- Lo anima David.

- Yo también pienso que dirá que sí, parece que le gustas. Os pasáis el día juntos, y os habéis besado. Eso significa algo.- Dice Álvaro dándole palmadas amistosas a Blas en el hombro.

- Carlos ¿Tú qué piensas?- Le pregunta Blas.

- Yo... no me apresuraría. ¿Por qué no dejáis que pase un poco el tiempo? Quizás os vendría bien reflexionar.

- ¿No crees que diría que sí?

- Supongo que sí, creo que le gustas. Es solo que a lo mejor es demasiado de golpe. Claro que la decisión es tuya. - Carlos le sonríe a Blas y este le devuelve la sonrisa. Sin embargo Carlos está serio, como preocupado. Creo que sabe algo que el resto no.

- ¿Dani? Me importa tu opinión.- Me dice Blas.

- Yo... no sé. Sí, pídele salir.- Digo cabreado. - Seguro que dice que sí. Es más, cásate con ella y sed felices para siempre.- Respondo levantándome de mi asiento y yéndome.

- ¿A dónde vas?- Me grita Carlos mientras me dirijo a la entrada.

- Necesito un poco de aire fresco. - Le contesto dando un portazo y saliendo al frío de la calle.

No sé lo que va a hacer Blas, ni tampoco me interesa.

(Apartamento de Iria y Xandra, narra Alina)

Cuando por fin llega el 6 de enero todas las chicas y los chicos nos reunimos en casa de Xandra e Iria. Hemos tenido que mover los muebles del salón para caber todos, y estamos como en una lata de sardinas, porque no cabe ni una sola persona más.

Nos sentamos en círculo en el suelo y después de darnos los regalos, pasamos un rato hablando hasta que nos quedamos sin temas de conversación. Yo e Iria nos vamos a buscar comida a la cocina mientras el resto se quedan pensando en cosas que hacer.

Cuando volvemos ya tienen un plan.

- ¿Por qué no jugamos a la botella?- Dice David.

- Ah no, ni de coña.- Le respondo yo.- Es una mala idea.

- Estoy de acuerdo con Alina. Luego las cosas pueden complicarse. - Me apoya Iria.

- ¡Pero si somos todos amigos!

- Venga, voy a buscar algo para jugar.- Dice Maya entrando en la cocina.

Al final, entre todos, acaban por convencernos a mí y a Iria.